Destaco cómo el largometraje deja que el espectador asuma cosas sin mostrarlas, así como también la libertad de pensar qué les habría sucedido a los protagonistas en su destino con un simple actante como lo fue una flor. Así mismo, la construcción de los personajes es tan potente que permite empatizarse con ellos a pesar de no aparecer continuamente en la historia, así como el desprecio que genera el Alcaide y la ironía que supone ver a un personaje inclusive más cruel pero fuera de las rejas.

Este filme utiliza todos los sentidos para construir su narración y se enriquece por medio de personajes muy bien construidos: una madre exitosa y amorosa (y tal vez fría) que no logra el apoyo de su esposo (un ser amoroso pero egoísta) ante el comportamiento de Kevin que a lo largo de los años hace más evidente su problema psicológico hasta un desenlace desgarrador, pero posiblemente evitado.
Destaco cómo la película no culpa a Eva como la culpable en la transformación oscura de Kevin y hace entender que él nace con una maldad innata que lo conlleva a pasar en prisión y pienso que poner este tipo de temas en la pantalla muestra la complejidad de realidad en algunas familias haciendo entender que existen casos donde la crianza no transforma de manera negativa al individuo, pero que tal vez con ayuda externa si hubiese sido pertinente ayudar en este caso, puede que en esto si haya tenido culpa Eva al no actuar a tiempo, sin embargo esa culpa que ella siente la lleva a tomar valor para encarar durante dos años a Kevin dentro de la cárcel, esperando una respuesta que sin decir de manera obvia, se entiende que él mismo comprende el amor que su madre no ha dejado de tener por él a pesar de las circunstancias.

El desarrollo de la historia me hizo entrar en sospecha de una persona en específico casi en el inicio del film y a pesar de confirmar las sospechas el filme supo mantener la intriga en varios aspectos develando una historia más compleja en el fondo.

Ante un trasfondo realista del futuro, en primer plano se centra el amor entre María y Freder (el mediador), como protagonistas en una romantizada manera de salvar a una ciudad de su inminente destrucción. Tal vez no es mi tipo de protagonista ideal estos dos personajes, sin embargo exalto el adelanto que significó construir una historia tan visionaria para la época y aprecio la forma de mostrar un futuro ajeno a una utopía que enseña los valores humanos como los verdaderos cimientos de la sociedad.

La psicología de los personajes solo podría ser desarrollada por Bergman debido a que conocía el elenco original de la obra de Sjöström y Jaenzon lo que aumenta el significado de algunas escenas desde el temperamento de Tora y como va construyendo una relación con la escritora en búsqueda de comprender la obra, hasta la brecha en la creación de imágenes con respecto a la realidad desde una anciana y la visión de un director, concretando el nombre de este sentido homenaje de película.