The Bling Ring

Sofia Coppola nos presenta una cinta entretenida pero algo vacía y monótona. También resulta difícil de creer la pasmosa facilidad con la que entran en las casas. Pese a todo se deja ver con tranquilidad sin que se haga larga, gracias sobretodo a las notables actuaciones de los jóvenes, que consiguen que desprecies por completos a sus personajes.

Hay que tener cara, o simplemente ser muy estúpido para ir contando a todo el mundo cómo y donde delinques.

Cuando el film inicia, piensas que estas frente a algo interesante, una historia de adolescentes, vacíos, tristes y solos, que intentan llenar sus vidas con regalos costosos que roban de casas de millonarios, casas que por alguna casualidad han quedado solas y abiertas, pero resulta que en los primeros 20 minutos se resume todo, los chicos roban, se drogan, roban, van de fiesta, roban, están casi solos sin revisión de sus padres.
Todo esto de una manera fácil, sin suspenso, sin dificultades, en 45 minutos, quieres que la película termine, los personajes son planos, sin profundidad, no conectan con el publico, creo que la directora se equivoco en el casting, en el guion y definitivamente en la manera de dirigir este film, esta película pudo convertirse en un film de culto menor, que reflejara el estilo de vida de ciertos jóvenes de la clase media alta norteamericana, pero no es así, es aburrida y repetitiva, es una lastima que no se le sacara provecho a la maravillosa Emma Watson y al desconocido Israel Broussard que a pesar del pobre guion y la pésima dirección, destacan un poco, espero que esta gran directora de cine, recapacite y haga algo mejor la próxima vez.

Sinceramente no sé si la hubiera visto si no actuara Emma Watson, ya que en mi opinión es una de las actrices con más futuro del momento, un reto para ella como ha dicho en repetidas ocasiones, una buena interpretación, pero no uno de los trabajos por los que será recordada.
Un grupo de adolescentes no tiene bastante con vivir en Los Ángeles, tener grandes casas, padres ricos y más de lo que la mayoría tendrá en su vida con la veintena sin aun empezar, quieren más, quieren ser los referentes (no precisamente de comportamiento) , quieren ser Lindsay y Paris, y ninguna mejor forma de conseguirlo que llevar sus pertenencias.
Cabe destacar que basada en hechos reales, ya hay que ser irresponsable para tener millones y millones en efectivo y pertenencias, no tener ni un sistema de alarma, ni cámaras en algunos casos...hasta las llaves debajo del felpudo, en serio?!?!, es de esperar de las féminas, pero Orlando, menuda decepción, te hacía con más cabeza.
Un puro reflejo de la sociedad inconformista de hoy día, la banda liderada por la mente pensante, el personaje de Rebeca, que arrastra al amigo inseguro y sin personalidad alguna, al que cuando no le interesa le carga con la culpa o no le da ningún dolor de cabeza dejarlo por los suelos. La historia en sí es lo que hay, no hay más argumento, pero aparte de que te guste o no el tema, del que no soy excesivamente amante, la repetida cámara lenta es innecesaria, exceptuando la escena vista una y otra vez de Watson, las imágenes de telediarios, y la vista de las lujosas casas permanentes en las pantallas durante más de 5 minutos y solo ver encender apagar luces se te quitan las ganas de seguir viéndola, pero le das otra oportunidad, y vuelven las cámaras lentas, y otra oportunidad, y otra vez imágenes de TV, pero sale Emma Watson, y digo, venga, otra oportunidad, y se pasa la hora y media. Para colmo después de “Spring Breakers” el cupo de grupo de malotas está cubierto.
De aquí lo único que se puede sacar, es que te apañes con lo que tengas, si haces algo mal y no quieres que te pillen, no seas tan tonto como para repetirlo e ir fanfarroneando con cualquiera y que los referentes de millones de chic@s sean personajes como Lindsay Lohan o Paris Hilton, en mi opinión dice mucho de la decadencia de la sociedad y de los pésimos modelos de conducta, básicamente no hacer nada (o al menos nada útil) y tenerlo todo.
Te gustará si te van las marcas y las chicas malas, pero no esperes grandes lecciones de la vida, interpretaciones correctas, pero sin más argumento. 1,5/5 @Adab88

Los adolescentes siguen siendo los elegidos por el cine de Sofia Coppola, y el aburrimiento y superficialidad su materia prima por excelencia. En "The Bling Ring" parte de un artículo de Vanity Fair en el que se recogían los robos de un grupo de jóvenes en casas de famosos de Hollywood. Obsesionados por la fama y por la moda que sus ídolos representaban, esos chic@s entraban en sus mansiones y en sus vidas cuando los propietarios estaban ausentes... para reproducir su vaciedad, para evadirse con sus fiestas y sus vías de fuga -drogas incluidas-, para estar en el candelero... en su caso por las redes sociales. Da pena el panorama que se nos presenta y más saber que responde a hechos reales, y produce lástima contemplar que la raíz de ese pobre comportamiento está en unos padres ausentes o presentes con su insulsez.

Sofia Coppola quiere hacer una crítica hacia ese mundo de vanidad, pero en realidad cae en su misma superficialidad, con una película de ritmo repetitivo y cansino -¿qué necesidad hay de recoger tantos asaltos y tan iguales?-, sin momentos de tensión ni de emoción, con brochazos de fotografía saturada y música ad hoc que acaban cansando, con recursos de videoclip de cámara ralentizada y con un montaje -a estas alturas nada novedoso- que inserta entrevistas a los protagonistas entre sus aventuras recordadas. Los personajes no tienen trasfondo ni pliegues que transmitan humanidad, y en realidad no pasan de ser marionetas de una sociedad de la opulencia -quizá sea lo que se haya buscado, pero son seres sin alma y sin nada que decir-, y los actores no aportan más que su cara bonita y poco más. En definitiva, que el envoltorio esteticista de Sofia Coppola impide llegar más allá de la superficie de unos personajes de rasgos gruesos y con una mínima evolución.

Al final contemplamos la imagen juvenil de un mundo adulto que podrían representar la madre de Nicki o la propia Paris Hilton. Es la posmodernidad mostrada tal cual, en estado puro y en directo, con un narcisismo que campa a sus anchas -patético es la visita a la casa de Hilton con retratos suyos por doquier-, y donde lo importante es satisfacer todas las apetencias y que hablen de uno mismo... aunque sea para mal. En ese sentido, causa dolor la última secuencia en que el personaje de Emma Watson mira a cámara para vender su exclusiva en internet... y esos amigos de Facebook capaces de todo por una exclusiva. Una película fallida sobre un mundo podrido y banal que deja vacío al espectador, lo mismo que sus personajes de ficción y de la realidad.

No voy a engañar a nadie diciendo que es una película vibrante y repleta de acción; la realidad es que se hace un poco larga y tediosa.
Quitando eso resulta gracioso lo REMATADAMENTE IDIOTAS que resultan ser esas pijas, es decir, si fueran unas simples "fangirls" con ansias de acercarse a sus ídolos lo entendería más, solo otras mojabragas más que hacen chorradas.
Sin embargo asaltan las casas de los famosos de manera "fría y oportunista" (realmente si los famosos tuvieran un mínimo cuidado por sus cosas las habrían pillado a la primera).
También creo que hay que decir que Emma Watson alegra la vista cada vez que aparece en pantalla (Muchas escenas sin ella resultarían ser una muerte cerebral para cualquiera que no se pasara el día viendo la vida de los famosos)
¿Y porque unas niñas ricas empiezan a robar y a arriesgarse en lugar de gastarse el dinero de sus papis en drogas y fiestas como todos? ... Pues simplemente por ser malas, por salir del tedio y sentirse realizadas cumpliendo una misión.
Patético.