Bandidas
2006 

3.7
8,907
Western. Acción. Comedia
Sara Sandoval (Salma Hayek) es una bella y altiva aristócrata mexicana que se ha educado en Europa y disfruta de los privilegios de una plácida existencia, sin privaciones de ninguna clase. Al otro extremo del espectro social está María Álvarez, (Penélope Cruz). Volcánica y rebelde, ella es la deslumbrante hija de un peón de campo. Ellas provienen de lados opuestos de la escala social y, en circunstancias normales, sus caminos ... [+]
11 de enero de 2018
11 de enero de 2018
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Como bien dijo Federico Marín Bellón, redactor del ABC. Quizá para alguno, si es que lo hubiere, los nombres de Salma Hayek y Penélope Cruz signifiquen algo...
Los de dos buenas actrices, o, cuando menos, carismáticas. Pues miren ustedes, para mí ni lo uno ni lo otro, ¿saben?
Sólo recuerdo a estas señoras por momentos concretos: la primera porque logró subirnos las pulsaciones con ese mítico baile que se marcaba en "Abierto Hasta el Amanecer", y la segunda con aquellas escenas tan subidas de tono que orquestaba más mal que bien Bigas Luna en "Jamón, Jamón"...y de ahí no pasa mi interés. Y ni mucho menos iba a pasar gracias a esta absoluta tontería que encontré emitiéndose en televisión y que tuve que aguantar porque después retransmitían la estupenda "Amor a Quemarropa" de Tony Scott.
Y si digo "tuve que aguantar" es porque mis ganas de levantarme del sofá en aquel momento eran prácticamente nulas y por una hora y media de más pues no me iba a morir...aunque de poco me ocurre. Tratemos de enfocarlo de este modo: si viviéramos a finales de los '60, "Bandidas" sería uno de esos festivos "westerns" europeos que animaban las salas de barrio, pero hay que reconocer que en estos tiempos actuales una película así no genera el menor interés (sobre todo porque ni de lejos puede compararse a aquellas desmitificadoras obras del salvaje Oeste con pedigrí mediterráneo, infinitamente más divertidas y mejor hechas).
Pese a la producción de Luc Besson y a la presencia de actrices más conocidas por sus respectivos atributos físicos (sí, es algo que no podemos negar...al fin y al cabo no somos de piedra) que por sus casi siempre limitadas dotes interpretativas, como son los casos de Hayek y Cruz, la conclusión es que estamos ante un prefabricado y mediocre ejemplo de cine de consumo rápido, una muestra de película para ver y olvidar, y cuanto antes mejor. El guión, por así llamarlo, y escrito por el mismo Besson (pero en qué pensaba este hombre, me pregunto yo), ya está más visto que el tebeo y del film se puede argumentar que se trata de lo conocido como cine-espectáculo...
Pero de ahí a transigir con su "encefalograma plano", el mismo que se presupone al espectador, hay un abismo. Básicamente la historia es esta: Sara Sandoval es hija de una privilegiada familia de hacendados y ha recibido en Europa una educación elitista, en resumen, una niña rica que goza de todos los privilegios; en el otro extremo está María Álvarez, la turbadora hija de un jornalero a sueldo del padre de Sara; un día, una banda de asesinos capitaneada por el peligroso Tyler Jackson, y a quienes pagan los avariciosos hombres del ferrocarril, entran en la hacienda y asesinan al patriarca aristócrata y al viejo jornalero.
Y así es como tendremos a estas dos bellezas de tan distinta condición social unidas con el único objetivo de vengarse. Gracias a las enseñanzas de un bandido retirado, se convierten en forajidas y atracadoras de bancos (por supuesto, y para reforzar su condición de heroínas, el dinero no es para ellas, sino para los pobres a los que Jackson ha arrebatado sus tierras), aunque su deseo es tener al asesino de sus respectivos progenitores frente a sus pistolas. Entre situaciones supuestamente cómicas, pobres seducciones y muchos tiros estas dos mujeres se disponen a dejar de lado sus diferencias y a vivir una aventura que, ni la del trío protagonista de "El Bueno, el Feo y el Malo".
"Dirigen" el dúo de noruegos Joachim Roenning y Espen Sandberg, colaboradores desde hacía tiempo, que se estrenaron en tierras americanas como cineastas con este film, creyéndose que con ella hacían un sentido homenaje al genero del "western" y su cara mas lúdica o algo así, lo cual, si tal intento fuera cierto, hay que decir que les salió de pena; no es lo peor, más tarde volverían a torturarnos con la 5.ª entrega de la cada vez más degenerada y degenerativa saga de "Piratas del Caribe". El éxito de taquilla que generó (¿quién no quería ver a Hayek y Cruz con esos vestidos tan apretados y escotados?) fue gloria de una semana, el tiempo que tardó en renovarse la cartelera aportando títulos si no mejores, al menos mucho mejor estructurados.
"Bandidas" se perfila como una versión de garrafón de "Las Petroleras" (pero en aquélla estaban Claudia Cardinale y Brigitte Bardot y no hay ni punto de comparación) y parodia las aventuras clásicas de féminas cowboys, pero más bien al estilo de modernas propuestas como "Bad Girls" o "Rápida y Mortal", y no logra superar ningún interés, que sólo se aviva en esa estrafalaria y esperpéntica, además de horriblemente interpretada, escena en la que las protagonistas seducen al pánfilo e insoportable Steve Zahn (explíqueme en el nombre del Cielo a qué narices viene un momento así en un film que se supone es "para todos los públicos").
Como era de esperar, las sumamente guapas heroínas abusan hasta el tedio de su gama de pucheros y miradas seductoras con las que apuntalar el efecto de sus curvas, y eso por no hablar de lo patético que resulta comprobar la indigna vejez de un antiguo icono de la contracultura, como es Sam Shepard, perdido entre los secundarios. Desde luego hay que tener estómago para resistir de principio a fin este anodino, insípido y aberrante "western" (que gustará sobre todo a las feministas y otros seres varios sin una gota de buen gusto por eso llamado cine) rodado en México, con producción francesa y estadounidense y dirección noruega (que ahí es nada).
Entre "Brokeback Mountain" y el título que nos ocupa el cine del Oeste no ha podido quedar más desprestigiado (hecho pedazos está ya). Gracias a Dios, actualmente todavía podemos gozar de algunas pequeñas maravillas tales como las nuevas versiones de "Valor de Ley" y "El Tren de las 3:10", "Los Odiosos Ocho" o "Bone Tomahawk".
Por cierto, algunos han cometido la osadía de puntuar esta correosa bazofia cinematográfica con sietes, ochos, incluso dieces...pues precisan los responsables de hacérselo mirar, de verdad.
Los de dos buenas actrices, o, cuando menos, carismáticas. Pues miren ustedes, para mí ni lo uno ni lo otro, ¿saben?
Sólo recuerdo a estas señoras por momentos concretos: la primera porque logró subirnos las pulsaciones con ese mítico baile que se marcaba en "Abierto Hasta el Amanecer", y la segunda con aquellas escenas tan subidas de tono que orquestaba más mal que bien Bigas Luna en "Jamón, Jamón"...y de ahí no pasa mi interés. Y ni mucho menos iba a pasar gracias a esta absoluta tontería que encontré emitiéndose en televisión y que tuve que aguantar porque después retransmitían la estupenda "Amor a Quemarropa" de Tony Scott.
Y si digo "tuve que aguantar" es porque mis ganas de levantarme del sofá en aquel momento eran prácticamente nulas y por una hora y media de más pues no me iba a morir...aunque de poco me ocurre. Tratemos de enfocarlo de este modo: si viviéramos a finales de los '60, "Bandidas" sería uno de esos festivos "westerns" europeos que animaban las salas de barrio, pero hay que reconocer que en estos tiempos actuales una película así no genera el menor interés (sobre todo porque ni de lejos puede compararse a aquellas desmitificadoras obras del salvaje Oeste con pedigrí mediterráneo, infinitamente más divertidas y mejor hechas).
Pese a la producción de Luc Besson y a la presencia de actrices más conocidas por sus respectivos atributos físicos (sí, es algo que no podemos negar...al fin y al cabo no somos de piedra) que por sus casi siempre limitadas dotes interpretativas, como son los casos de Hayek y Cruz, la conclusión es que estamos ante un prefabricado y mediocre ejemplo de cine de consumo rápido, una muestra de película para ver y olvidar, y cuanto antes mejor. El guión, por así llamarlo, y escrito por el mismo Besson (pero en qué pensaba este hombre, me pregunto yo), ya está más visto que el tebeo y del film se puede argumentar que se trata de lo conocido como cine-espectáculo...
Pero de ahí a transigir con su "encefalograma plano", el mismo que se presupone al espectador, hay un abismo. Básicamente la historia es esta: Sara Sandoval es hija de una privilegiada familia de hacendados y ha recibido en Europa una educación elitista, en resumen, una niña rica que goza de todos los privilegios; en el otro extremo está María Álvarez, la turbadora hija de un jornalero a sueldo del padre de Sara; un día, una banda de asesinos capitaneada por el peligroso Tyler Jackson, y a quienes pagan los avariciosos hombres del ferrocarril, entran en la hacienda y asesinan al patriarca aristócrata y al viejo jornalero.
Y así es como tendremos a estas dos bellezas de tan distinta condición social unidas con el único objetivo de vengarse. Gracias a las enseñanzas de un bandido retirado, se convierten en forajidas y atracadoras de bancos (por supuesto, y para reforzar su condición de heroínas, el dinero no es para ellas, sino para los pobres a los que Jackson ha arrebatado sus tierras), aunque su deseo es tener al asesino de sus respectivos progenitores frente a sus pistolas. Entre situaciones supuestamente cómicas, pobres seducciones y muchos tiros estas dos mujeres se disponen a dejar de lado sus diferencias y a vivir una aventura que, ni la del trío protagonista de "El Bueno, el Feo y el Malo".
"Dirigen" el dúo de noruegos Joachim Roenning y Espen Sandberg, colaboradores desde hacía tiempo, que se estrenaron en tierras americanas como cineastas con este film, creyéndose que con ella hacían un sentido homenaje al genero del "western" y su cara mas lúdica o algo así, lo cual, si tal intento fuera cierto, hay que decir que les salió de pena; no es lo peor, más tarde volverían a torturarnos con la 5.ª entrega de la cada vez más degenerada y degenerativa saga de "Piratas del Caribe". El éxito de taquilla que generó (¿quién no quería ver a Hayek y Cruz con esos vestidos tan apretados y escotados?) fue gloria de una semana, el tiempo que tardó en renovarse la cartelera aportando títulos si no mejores, al menos mucho mejor estructurados.
"Bandidas" se perfila como una versión de garrafón de "Las Petroleras" (pero en aquélla estaban Claudia Cardinale y Brigitte Bardot y no hay ni punto de comparación) y parodia las aventuras clásicas de féminas cowboys, pero más bien al estilo de modernas propuestas como "Bad Girls" o "Rápida y Mortal", y no logra superar ningún interés, que sólo se aviva en esa estrafalaria y esperpéntica, además de horriblemente interpretada, escena en la que las protagonistas seducen al pánfilo e insoportable Steve Zahn (explíqueme en el nombre del Cielo a qué narices viene un momento así en un film que se supone es "para todos los públicos").
Como era de esperar, las sumamente guapas heroínas abusan hasta el tedio de su gama de pucheros y miradas seductoras con las que apuntalar el efecto de sus curvas, y eso por no hablar de lo patético que resulta comprobar la indigna vejez de un antiguo icono de la contracultura, como es Sam Shepard, perdido entre los secundarios. Desde luego hay que tener estómago para resistir de principio a fin este anodino, insípido y aberrante "western" (que gustará sobre todo a las feministas y otros seres varios sin una gota de buen gusto por eso llamado cine) rodado en México, con producción francesa y estadounidense y dirección noruega (que ahí es nada).
Entre "Brokeback Mountain" y el título que nos ocupa el cine del Oeste no ha podido quedar más desprestigiado (hecho pedazos está ya). Gracias a Dios, actualmente todavía podemos gozar de algunas pequeñas maravillas tales como las nuevas versiones de "Valor de Ley" y "El Tren de las 3:10", "Los Odiosos Ocho" o "Bone Tomahawk".
Por cierto, algunos han cometido la osadía de puntuar esta correosa bazofia cinematográfica con sietes, ochos, incluso dieces...pues precisan los responsables de hacérselo mirar, de verdad.
26 de mayo de 2021
26 de mayo de 2021
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Idas y venidas, de aquí para allá, sin un minuto de sosiego. Todo es rápido en esta cinta que junta a la aristócrata mexicana Sara Sandoval (Hayek), con María Álvarez (Cruz), hija de un modesto ranchero. Son agua y aceite, pero las comunes desgracias las hacen primero socias y luego amigas, sin dejar de ser bandidas.
El enemigo es el mismo, el malvado Tyler Jackson (Yoakam) que llega en nombre de un banco texano para hacerse por la fuerza con los ranchos que atravesará el nuevo ferrocarril. Pero ahí están las dos para impedirlo.
La cinta es un remedo de las últimas dedicadas al personaje de El Zorro que tienen a Banderas como protagonista, de hecho comparten el doblador de Yoakam. A pesar de las similitudes que hay entre el personaje creado por Johnston McCulley y los de Sara y María, hubo que pensar para la película de ellas en otro título que nada recordara la versión femenina del nombre del espadachín enmascarado.
Fuera del lucimiento de las imponentes divas poco o nada queda destacable. Aventuras fantásticas y el rollo de costumbre con los malvados vecinos del Norte robando y asesinando como siempre al oprimido pueblo mexicano. Nada nuevo con alguna gracieta de vez en cuando.
Obra floja únicamente recomendable a fans de Hayek o de Cruz. Tal vea también para los de El Zorro.
El enemigo es el mismo, el malvado Tyler Jackson (Yoakam) que llega en nombre de un banco texano para hacerse por la fuerza con los ranchos que atravesará el nuevo ferrocarril. Pero ahí están las dos para impedirlo.
La cinta es un remedo de las últimas dedicadas al personaje de El Zorro que tienen a Banderas como protagonista, de hecho comparten el doblador de Yoakam. A pesar de las similitudes que hay entre el personaje creado por Johnston McCulley y los de Sara y María, hubo que pensar para la película de ellas en otro título que nada recordara la versión femenina del nombre del espadachín enmascarado.
Fuera del lucimiento de las imponentes divas poco o nada queda destacable. Aventuras fantásticas y el rollo de costumbre con los malvados vecinos del Norte robando y asesinando como siempre al oprimido pueblo mexicano. Nada nuevo con alguna gracieta de vez en cuando.
Obra floja únicamente recomendable a fans de Hayek o de Cruz. Tal vea también para los de El Zorro.
20 de octubre de 2023
20 de octubre de 2023
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Esta historia creada por Luc Besson es una divertida comedia de western con dos chicas que, a pesar de sus diferencias sociales, comparten la misma finalidad. Penélope Cruz y Salma Hayek son un dúo de hermosas damas que viven una emocionante historia de atracos y búsqueda por la justicia. Ambas realmente tienen mucha química y sus personajes son tanto divertidos como empatizables. Es una película con buenos momentos divertidos y aunque no parezca ofrecer mucha acción, logra generar un rato entretenido. La producción, el vestuario y hasta la banda sonora logran generar una buena ambientación de western clásico. Sus protagonistas se roban por completo la película y hacen de Bandidas una película disfrutable. Mi calificación para esta película es un 8/10.
10 de mayo de 2025
10 de mayo de 2025
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Bandidas (2006), dirigida por Joachim Rønning y Espen Sandberg, fue en su momento una curiosidad en el panorama cinematográfico: una buddy movie de acción ambientada en el Viejo Oeste protagonizada por dos grandes estrellas del cine hispano: Salma Hayek y Penélope Cruz. A pesar de haber sido subestimada por muchos críticos en su estreno, la película merece una revaloración no solo por su desparpajo y carisma, sino por el dinamismo y la química innegable de sus protagonistas.
Hayek y Cruz encarnan a Sara y María, dos mujeres de orígenes opuestos —una refinada hija de un banquero y una campesina rebelde— que se unen para combatir la opresión de los colonizadores y ladrones de tierras estadounidenses en el México del siglo XIX. Ambas están estupendas: Salma Hayek brilla con su porte elegante y decidida presencia, mientras que Penélope Cruz aporta un humor físico y espontaneidad que sorprenden.
El atractivo principal de la película es, sin duda, la relación entre ambas mujeres: su rivalidad inicial da paso a una sólida camaradería, en una especie de “Zorras del desierto” que invierten el arquetipo masculino del western clásico. El film no se toma demasiado en serio y, gracias a eso, permite a sus protagonistas jugar con los roles tradicionalmente reservados a los hombres, ladronas de bancos, heroínas armadas, maestras del disfraz y la estrategia.
Las comparaciones con El Zorro (particularmente la versión de 1998 con Antonio Banderas y Catherine Zeta-Jones) son inevitables. Al igual que esa película, Bandidas mezcla acción, romance, humor y un fuerte componente cultural latino en una narrativa de aventuras. Hay incluso escenas que recuerdan coreografías de espada o entrenamientos que remiten directamente a los momentos más recordados de El Zorro, solo que aquí los duelos se dan entre mujeres y con pistolas.
Ambas películas comparten un espíritu de justicia y lucha contra el imperialismo, con un tono ligero pero subversivo. Sin embargo, Bandidas se distancia al eliminar al héroe masculino salvador y dejar que sus protagonistas tomen el control absoluto de la historia, algo poco común en el western tradicional.
Aunque Bandidas no revoluciona el género y su guion es algo convencional, su valor radica en ofrecer una propuesta distinta: una aventura divertida con dos mujeres latinas al frente, algo que aún en 2006 era una rareza. Su estética colorida, las escenas de acción bien logradas y la clara intención de entretener la convierten en una comedia western digna de rescate, especialmente por quienes buscan una mirada femenina —y feminista— dentro del cine de acción.
Hayek y Cruz encarnan a Sara y María, dos mujeres de orígenes opuestos —una refinada hija de un banquero y una campesina rebelde— que se unen para combatir la opresión de los colonizadores y ladrones de tierras estadounidenses en el México del siglo XIX. Ambas están estupendas: Salma Hayek brilla con su porte elegante y decidida presencia, mientras que Penélope Cruz aporta un humor físico y espontaneidad que sorprenden.
El atractivo principal de la película es, sin duda, la relación entre ambas mujeres: su rivalidad inicial da paso a una sólida camaradería, en una especie de “Zorras del desierto” que invierten el arquetipo masculino del western clásico. El film no se toma demasiado en serio y, gracias a eso, permite a sus protagonistas jugar con los roles tradicionalmente reservados a los hombres, ladronas de bancos, heroínas armadas, maestras del disfraz y la estrategia.
Las comparaciones con El Zorro (particularmente la versión de 1998 con Antonio Banderas y Catherine Zeta-Jones) son inevitables. Al igual que esa película, Bandidas mezcla acción, romance, humor y un fuerte componente cultural latino en una narrativa de aventuras. Hay incluso escenas que recuerdan coreografías de espada o entrenamientos que remiten directamente a los momentos más recordados de El Zorro, solo que aquí los duelos se dan entre mujeres y con pistolas.
Ambas películas comparten un espíritu de justicia y lucha contra el imperialismo, con un tono ligero pero subversivo. Sin embargo, Bandidas se distancia al eliminar al héroe masculino salvador y dejar que sus protagonistas tomen el control absoluto de la historia, algo poco común en el western tradicional.
Aunque Bandidas no revoluciona el género y su guion es algo convencional, su valor radica en ofrecer una propuesta distinta: una aventura divertida con dos mujeres latinas al frente, algo que aún en 2006 era una rareza. Su estética colorida, las escenas de acción bien logradas y la clara intención de entretener la convierten en una comedia western digna de rescate, especialmente por quienes buscan una mirada femenina —y feminista— dentro del cine de acción.
10 de abril de 2007
10 de abril de 2007
4 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pues que ver a Penélope en esta película no me sorprende porque peores bodrios ha hecho ya en USA, pero de Salma esto no me lo esperaba....y menos a estas alturas. Aburrida, lenta, sosa, y muy mala esta película. Solo se salva ver a Pé montar a caballo y con su sombrerito de vaquero....y ni eso les recomiendo
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