Como si de una astronauta explorando la posibilidad de vida en mundos alienígena, Vaiana surca los mares en busca de otros pueblos. No guardo mucho recuerdo de la anterior, salvo por la banda sonora, pero esta parte destaca cuando se embarca en la aventura.

Poco nos importa el pueblo o la familia, que en los primeros compases me aburre y pienso que no remontará. Pero cambia de tono desde el momento en que aparece un barco que nada envidia a "Piratas del caribe" con una embarcación de cocos peleones francamente simpáticos y un molusco gigante que es todo un hallazgo y la puerta a otro lado. Ayuda al divertimento un punto disparatado muy cercano a "Las locuras del emperador", con una malvada muy locuaz y el recordatorio, que es toda una declaración de intenciones, de la protagonista manifestando que ella no es una princesa (de Disney).

Ocho años han pasado para que Disney nos brindase la segunda entrega de Moana y con esta secuela volvemos a encontrarnos con la fórmula exitosa que conquisto en 2016 al espectador y ahora en 2024 lo hará nuevamente, gracias que ocupa la fórmula efectiva que la llevo a su éxito.

Si bien en Moana 2 nos encontramos con nuevos personajes que suman gratos momentos a la historia, la fórmula de construcción sigue siendo la misma, por ende la diversión será segura para los más pequeños y también para los más grandes. Sin embargo, esa seguridad no permite que la historia y esta secuela den un paso más allá para intentar innovar en nuevas atracciones, si bien tiene una historia fresca y emotiva a su haber, también padece de un par de lagunas en el recorrido hacia su desenlace, lo que resta intenciones a una secuela que de todas maneras es encantadora.

Los personajes conocidos siguen dándonos momentos divertidos, Moana sigue siendo un gran personaje de Disney, y el estudio se sigue superando con una animación brutal, sensacional y magistral, llena de colores, texturas y luces que visualmente hacen a Moana 2 un escalón más de sutileza. En cuanto a la música y sus canciones, quizás queda bastante al debe, pero un par de canciones logran su cometido, aunque no lo suficiente para destacar de manera categórica.

En definitiva, es cine familiar de aventuras repleto de emoción y maravillas visuales que se enfoca en los más pequeños de la familia. Un lindo mensaje corre por sus venas con una trama que es más compleja y oscura, pero que posee un mensaje actual y pertinente, lo que convierte a Moana 2 en una cumplidora y correcta película que dejara contentos a la gran mayoría y a otros algo menos motivados, pero en ningún caso ofendido o molestos porque la película tiene una fórmula en que dejara a todos incluidos debido a que es una propuesta que no ofenderá a nadie, más bien hará partícipes a todos.