The Quest (En busca de la ciudad perdida)
1996 

4.3
7,267
4 de octubre de 2006
4 de octubre de 2006
8 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
Otra peli más del señor Van Damme, sin apenas ninguna diferencia (digamos) argumental con el resto de su magna obra. Un principio demencial nos prepara para un absurdo torneo de lucha, donde estereotipados participantes de diferentes nacionalidades serán sus oponentes, entre decorados de una falsedad extrema, y con la ridícula colaboración de un Roger Moore que debió aprovechar que pintaban el geriátrico para salír un rato y hacer el payaso.
Tan recomendable como pueda ser cualquier (digamos de nuevo) película del enjuto belga aficionado al despatarre.
Tan recomendable como pueda ser cualquier (digamos de nuevo) película del enjuto belga aficionado al despatarre.
15 de enero de 2017
15 de enero de 2017
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
No la vi entera pero la aguanté bastante rato, como para comprobar que su argumento que no acaba de arrancar; una sucesión ininterrumpida de escenas a cual mas tontorronas sin orden ni concierto. Y encima Roger Moore con su aire elegante y sonrisitas que no le pegan en absoluto a las situaciones que vive
22 de octubre de 2023
22 de octubre de 2023
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Una vuelta a los orígenes en toda regla, tanto como para que Van Damme cierre su etapa en la liga de los blockbusters en una última gran amplificación de lo que ofreció en sus primeros éxitos, fusionando el cine de torneos de artes marciales -el guión lo cofirma Frank Dux, y después cofirmaría el fin de su amistad- con el clásico pasatiempo de sesión matinal con granujas aventureros: creo que ésta fue, por cierto, mi última película de Roger Moore en una sala de cine, aquí en su salsa autoparodiándose (atentos a su presentación) y regresando para algunas secuencias a la bondiana Isla de Phuket.
No falta nada -salvo, tal vez, mismo el grado de violencia- de lo que se le habría demandado a la estrella belga una década antes: el suplente que apuntaba a titular (James Remar), una reportera metomentodo (Janet Gunn), un Qissi -Abdel, para más señas, el de 'Lionheart'- con el que pelearse y la consabida nómina de amiguetes e ilustres invitados marciales o no, de Aki Aleong ('Braddock'), Jen Sung ('Kung Pow'), el luchador y muso de la Troma Brick Bronsky, Ong Soo Han ('El rey de los Kickboxers') a Stefano Miltsakakis ('Bloodsport') y una gran ristra interminable de especialistas en nómina de las estanterías del videoclub con los que hacer justicia a lo que había de ser un gran kumite internacional. Entre ellos, el albanés Pjetër Malota hace lo mismo que Jay Tavare en 'Street Fighter', hacer de luchador español zarandeándose y levantando los brazos como un bailaor flamenco.
En principio, 'The Quest' es el debut de Jean Claude Van Damme tras las cámaras, y digo en principio porque es tan factible que participase acreditándose como tal en las coreografías en muchas cintas anteriores como que aquí le echase un cable su buen amiguete Peter McDonald ('Rambo 3') acreditado en calidad de productor.
No falta nada -salvo, tal vez, mismo el grado de violencia- de lo que se le habría demandado a la estrella belga una década antes: el suplente que apuntaba a titular (James Remar), una reportera metomentodo (Janet Gunn), un Qissi -Abdel, para más señas, el de 'Lionheart'- con el que pelearse y la consabida nómina de amiguetes e ilustres invitados marciales o no, de Aki Aleong ('Braddock'), Jen Sung ('Kung Pow'), el luchador y muso de la Troma Brick Bronsky, Ong Soo Han ('El rey de los Kickboxers') a Stefano Miltsakakis ('Bloodsport') y una gran ristra interminable de especialistas en nómina de las estanterías del videoclub con los que hacer justicia a lo que había de ser un gran kumite internacional. Entre ellos, el albanés Pjetër Malota hace lo mismo que Jay Tavare en 'Street Fighter', hacer de luchador español zarandeándose y levantando los brazos como un bailaor flamenco.
En principio, 'The Quest' es el debut de Jean Claude Van Damme tras las cámaras, y digo en principio porque es tan factible que participase acreditándose como tal en las coreografías en muchas cintas anteriores como que aquí le echase un cable su buen amiguete Peter McDonald ('Rambo 3') acreditado en calidad de productor.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Kristopher Van Varenberg -es decir, su hijo Kris Van Damme- se fogueaba en la actuación como el mismo personaje que su padre en edad infantil antes de que el prólogo de pillos y rateros en Nueva York dé paso a un sorprendentemente bien llevado pastiche de géneros, una vez zarpa el barco, entre el cine de piratas, el de las competiciones con artes marciales y los robos con giros argumentales que, aunque sean previsibles, no abundan menos que los de las piernas de su protagonista o los arqueos de ceja de Sir Roger Moore.
Le fue peor de lo que merecía.
Al final de la peli Van Damme vuelve a Nueva York para ayudar a los niños. De ahí que cuando ha envejecido y se le ve caracterizado se parezca un poco a Paco Arango.
Le fue peor de lo que merecía.
Al final de la peli Van Damme vuelve a Nueva York para ayudar a los niños. De ahí que cuando ha envejecido y se le ve caracterizado se parezca un poco a Paco Arango.
5 de septiembre de 2024
5 de septiembre de 2024
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Otro de esos films que uno ve en la infancia y es mejor dejarlo ahí, quedarte con el recuerdo y no desempolvar. "The Quest (En busca de la ciudad perdida)" bajo la dirección y debut en la misma de Jean-Claude Van Damme es tan plana y pobre a día de hoy que sólo puede vivir de la mitología que todos recordamos.
En la película no hay prácticamente nada, solamente un torneo de artes marciales entre diferentes países estereotipados al extremo. El de España es un torero, el escocés lleva falda, África es sólo un país y evidentemente va a en taparrabos de tribu y adivinen, ¿el japonés? Exacto, un luchador de sumo. Hasta que llega dicho torneo, sólo podemos destacar una correcta fotografía. El guión son dos hojas, los personajes son detestables, sobretodo un egocéntrico Roger Moore y las decisiones y motivaciones de los mismos son aún peores. Creo que hubiese quedado mejor hacer prácticamente todo el film entorno al torneo y omitir esa primera mitad.
Y poco más que añadir. En mi cabeza la tenía como un peliculón pero vista a día de hoy, Dios santo, que bajo teníamos el listón tiempo atrás. No es que sea lo peor que uno haya visto y da espacio para ver un despliegue de diferentes artes marciales y cómo no, a Juan Claudio con sus patadas voladoras y guión a favor. Sé que costará, pero mejor mantenerla en el recuerdo y si nunca se vió, sólo recomendable a los fans del belga.
En la película no hay prácticamente nada, solamente un torneo de artes marciales entre diferentes países estereotipados al extremo. El de España es un torero, el escocés lleva falda, África es sólo un país y evidentemente va a en taparrabos de tribu y adivinen, ¿el japonés? Exacto, un luchador de sumo. Hasta que llega dicho torneo, sólo podemos destacar una correcta fotografía. El guión son dos hojas, los personajes son detestables, sobretodo un egocéntrico Roger Moore y las decisiones y motivaciones de los mismos son aún peores. Creo que hubiese quedado mejor hacer prácticamente todo el film entorno al torneo y omitir esa primera mitad.
Y poco más que añadir. En mi cabeza la tenía como un peliculón pero vista a día de hoy, Dios santo, que bajo teníamos el listón tiempo atrás. No es que sea lo peor que uno haya visto y da espacio para ver un despliegue de diferentes artes marciales y cómo no, a Juan Claudio con sus patadas voladoras y guión a favor. Sé que costará, pero mejor mantenerla en el recuerdo y si nunca se vió, sólo recomendable a los fans del belga.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Nunca entendí porque aparece al inicio y al final el personaje de Van Damme ya anciano narrando como si lo que hubiera hecho, ganar un torneo, es una hazaña o algo similar. El robo de la estatua dorada patético con un Roger Moore que pese a habérsela jugado varias veces al prota, decide salvarlo en pos de la estatua que ayudaría a los niños sin hogar a tener un futuro mejor. Cómo no, el prota se lleva a Janet Gunn con una mirada en todo el metraje y el cierre es literalmente "no gané la estatua de oro pero todos acabaron bien, Dios los bendiga" ¿En serio Juan Claudio? Tú puedes hacerlo mejor.
23 de julio de 2007
23 de julio de 2007
10 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
Para los intelectuales "cinéfilos" esta película les parecerá mala, pero cabe mencionar que de principio a fin la película es muy buena y entretenida, quizás es la mejor actuación de Van Dame de su carrera y las escenas de combate por el dragón son muy buenas. Lo más destacable es el encuentro de personas de distintas razas y países paliando a muerte para lograr sus sueños. ¡¡¡NO ENTIENDO!!!, califican muy mal a esta película por su excesiva violencia, sus escenas algo fantasiosas y por las malas actuaciones; todos estos ingredientes los tiene películas como "El señor de los anillos: El retorno del rey" y gano 11 oscares "EN VERDAD NO LO ENTIENDO".
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