La verdad es que he quedado sorprendida con esta película. Es humor absurdo, pero he pasado un rato muy agradable con mi pareja. No nos hemos parado de reír en ningún momento. Si bien es cierto algunas escenas tienen humor bastante negro, pero merece la pena su visionado.

Aterriza como puedas, lo siento, pero parece un ensayo para la comedia absurda definitiva: Top secret.

Esta película es un auténtico gozo. La risa te invade todo el tiempo. Te llenas. Te hartas de reír. Pero no es comparable con lo que pasa con Top Secret. Allí si que empiezas y no paras.

Pero bueno, que aquí estamos para hablar de Aterriza como puedas, película que es por si misma una maravilla dentro de las comedias. Con lo absurdo por bandera, utilizando lo obvio como arma, atacan al más serio del lugar. Y cuando digo lo obvio, me refiero a lo obvio en el sentido más estricto; el sentido primero y más tonto y pueril del término. Saber hacer esto es difícil, y nadie como el trío ZAZ para hacerlo.

Nadie podría haberlo hecho así.

Nadie.

Por suerte se juntaron, y se pusieron a hacer genialidades como esta de la que tantos hemos disfrutado.

Os queremos, coño.

¿Quién puede afirmar que algo es gracioso o no lo es? Depende de quiénes somos, qué experiencias hayamos tenido, incluso de qué miedos tengamos... A mí me hace mucha gracia cuando el actor Robert Hays se vuelve a la cámara, después de que su novia le explique por qué le ha dejado, y suelta: “¡Vaya chorrada!” Un amigo mío, de diez años, se rió mucho con la escena en que el enamorado va tropezando y tirando postes mientras se despide de su amada, que viaja en avión. La película, pues, resulta buena para los que la encuentren graciosa. No hay que tomársela en serio. Es una parodia del género de catástrofes. Una réplica en tono de burla de Aeropuerto 77 (1977).
Cuidado: la han vuelto a doblar y con las nuevas voces pierde mucho.

El reinvento de las películas de comedia absurda cobra vida para mí con esta. Para mí una de las mejores comedias, está claro, que es absurdo sin sentido y sin esperar mucho de ella. Pero los gags son tremendos, y pasadas ya unas pocas de décadas, tiene frescura.

Me ha gustado revisionarla de nuevo.

Elegí un mal día para dejar de fumar.

Sería fácil decir que ya no las hacen como antes, pero es que es cierto. Uno ve las últimas de ‘Scary Movie’ o la ‘Spanish Movie’ y no tienen el encanto que tenían las cintas originales que dieron luz al humor absurdo. Solo son una sucesión de gags con mejor o peor fortuna. Sin duda, ‘Top Secret’ y ‘Aterriza como puedas’, juegan en una liga diferente y, se vean cuando se vean, garantizan más de una risa.

El vuelo 209 de la Trans American sale de Los Ángeles con destino a Chicago. Entre el pasaje se encuentran una serie de curiosos personajes. Entre ellos, un ex-piloto de combate que, en pleno vuelo, se verá obligado a hacerse con el mando del avión comercial, tras quedar los pilotos indispuestos por una comida en mal estado.

Elegí un mal día para dejar de beber.

Lo primero que podríamos decir es que Groucho Marx estaría sumamente orgulloso de ella. Con un humor que nos recuerda a aquellas películas o a las de los geniales Monty Phyton, ‘Aterriza como puedas’ basa su éxito en ofrecer casi un chiste por minuto, sin que ninguno se pise y te de perfectamente tiempo a reírte con cada uno de ellos.

Con la historia “suficiente” como para terminar contando algo, cogiendo los grandes éxitos de la época, remezclándolos para burlarse un poco de ellos y sumando su corta duración, es una cinta que funciona la veas cuando la veas. Con la escena de la niña, por ejemplo, sigo llorando de risa.

Luego está Leslie Nielsen, un tipo al que el cielo le ha tenido que reservar un buen sitio solo por hacernos reír tantísimo con todas sus películas. No era un gran actor pero, desde luego, si que era un gran cómico.

Elegí un mal día para dejar de oler pegamento.

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