Inicio de una longeva saga que se ha abierto paso en el mercado doméstico, y que, aparte de contar con una serie de una temporada estrenada en 2003, ya va por su sexta entrega, estrenada en 2018.

En Perfección, un pequeño pueblo al borde del desierto de Nevada, algo parece suceder debajo de la tierra. Cuando las líneas telefónicas y las carreteras quedan cortadas, los habitantes comienzan a sentir pánico, pues todo parece indicar que hay algo vivo y terrorífico bajo las arenas del desierto.

Protagonizada por un jovencísimo Kevin Bacon (El Hombre Sin Sombra, 2000) y Fred Ward (2 Guns, 2013), los cuales realizan un genial trabajo como la pareja de rebeldes sin causa de turno, esta cinta mezcla comedia de terror con acción y aventuras, quedando en una cinta bastante entretenida. Temblores , muestra una amenaza ya desde su inicio que va a ir creciendo durante toda la cinta con estas criaturas ficticias que parecen sacadas de la idea de trasladar la película Tiburón (Steven Spielberg, 1975), a la tierra firme. La cinta se mantiene en pie fácilmente durante sus cortos 96 minutos, gracias a su tono desenfadado, que hace que pases por alto los efectos prácticos bastante cantosos de la película y una historia romántica, que aunque no ocupe apenas metraje, es excesivamente típica.

Sin redescubrir nada nuevo y pese a sus defectos, Temblores es una entretenidísima cinta que pasa en un suspiro y marca el camino a seguir a una saga que dura hasta día de hoy.

Nota personal 6/10

No soy amigo de este tipo de películas, pero está tiene un punto humorístico que la hace entretenida. Me atrevo a decir que es hasta recomendable.
Eso sí, para una sobremesa de fin de semana.

No te arrepentiras de haberla visto.

La película me la he encontrado por la televisión por la tarde y ya que había otras de sobremesa del mismo nivel me fijé en esta cuyo logro principal es entretener.
Como película deja mucho que desear en aspectos de guión, lo que es de admitir es flojillo.
No funciona a nivel técnico, las criaturas a día de hoy no están demasiado bien hechas.
Pero es muy entretenida y eso se nota nada más ver cinco minutos que te engancha con facilidad.
Coincido con el crítico Fernando Morales, en este tipo de películas, esta está un poco por encima de otras en cuanto a elaboración de la historia.
Valoro a la película teniendo en cuenta que es antigua, y me olvido de que las actuaciones u otros elementos inverosímiles hacen que el film sea normalito. Pero un fan del género pasa por alto estas cosas si la película le ha entretenido.
Cabe decir que la plaga, está mejor hecha que esta, es una película de hace poco tiempo, la diferencia es que aquella es mejor teniendo en cuenta que es de hace poco, por eso le dí menos nota.
La secuela la de Temblores 2 la emitieron hace nada, pero algo más mala quizás.
Un error para mí es que las muertes no están muy conseguidas y que el aspecto de años de catapum chimpum se le nota un poquito.
El mayor acierto es sin duda, la primera parte de la película, el viaje en la furgoneta y ese aire de nerviosismo que un pueblo tiene cuando se dan esas circunstancias. Me gustan este tipo de películas, así como los viajes de una familia en coche, o unos amigos. Es por esto, por lo que me gustó mucho Dead End, -una de terror-, u otras películas en que se sabe que algo va a pasar y están dentro de un vehículo como el viaje en El resplandor, familia o amigos dentro de un coche y diálogos divertidos me gustan mucho.
Evolution, La plaga, Temblores, Arack Atack, este tipo de pelis no se deben dejar de pasar por alto, aunque sean una estupidez, por el entretenimiento que generan. Al menos eso puedo decir.

Me permito hacer está crítica en 2024 , muchos años después de la primera vez que vi Temblores. Vale, de acuerdo, no será una película de culto, pero me da igual. Vista en perspectiva el veredicto es evidente: es un clásico . No es terror elevado , ni mucho menos . Tampoco tiene una historia muy lograda. Pero la serie b no era eso, la serie b es sentarte en la TV y disfrutar como un enano ! Y la he vuelto a ver ahora , en 2024 , con las mismas sensaciones de siempre.

Si queda alguien que todavía no haya visto está película le animo a que coja un bol de palomitas y se siente a disfrutarla. Porque es diversión, es noventera , es nostalgia por un tipo de cine simple pero sin complejos y que tiene un único objetivo: hacértelo pasar en grande.

Vista desde un punto estrictamente cinematográfico, esta película de Ron Underwood resulta demasiado vulgar para ser tomada en serio. No hay más que ver a los bichos. Son tan cutres que es imposible imaginar cómo montan tanto estropicio a su alrededor.

No problemo. Aquí el encanto no radica en la perfección técnica ni de ningún tipo. Es dejarse llevar por esta divertida aventura, amiga de la serie B, protagonizada por personajes (Bacon a la cabeza) la mar de simpáticos.

No hay que pedir más. Está lejos de eso que llamamos buen cine, y dentro del género, las hay mejores e igual de cutres. Así que, a pasar un rato entretenidos sin pensar demasiado y haciendo poco ruido, no vaya a ser que los monstruos se pispen de que estamos ahí.