Hacia tiempo que no me emocionaba tanto en una sala de cine, que preciosidad de película, probablemente, la mejor de la saga después claro está, de la primera. Recuerdo hace unos meses cuando ví por primera vez el teaser de la película que me impactó bastante ver a un Rocky tan mayor pero cuendo ves la peli se te olvida, es el Rocky de siempre. Acompañando a Rocky hay un desfile de personajes maravillosos, personajes que rezuman fatalismo y amargura por los cuatro costados. Filadelphia sigue igual que siempre; oscura, sucia, solitaria...
Bueno que no puedo seguir escribiendo que me emociono, que no pudo haber despedida mejor para uno de los personajes mas memorables que ha dado la historia del cine.

Rocky Balboa es ya un mito de la historia del celuloide, ha quedado más que demostrado con toda la saga y con este intachable final, 16 años después. Esto ha sido el colofón, la guinda que le faltaba a la historia del mito. Nostálgica hasta la saciedad, muy bien dirigida, llena de recuerdos de la primera saga con un Rocky ya cincuentón que cuenta sus batallas en un restaurante de Philadelphia pero con el gusanillo de todo mito retirado. La BSO de Bill Conti te sigue produciendo un cosquillero en el estómago. La motivada con la que sales de la sala no es ni medio normal. El último combate, quizás el mejor llevado a escena de toda la saga es para vivirlo. Extraordinaria. Gracias Stallone.

En mi país he visto muchas veces a los viejos ídolos del boxeo. He escuchado sus hazañas inconmensurables narradas por los viejos aficionados que las tardes de sábado se reúnen para ver las peleas de los nuevos ídolos del “bofe” también he visto como estas leyendas del boxeo, luego de ganar todo el dinero del mundo, han terminado de forma patética. Solos sin amigos, sin dinero, casi lisiados por las tremendas golpizas que recibieron a lo largo de sus combates épicos. Y me han causado una sensación de tristeza, de ver la decadencia de esos gladiadores. Algo así me ha causado ver nuevamente al gran “semental” italiano, al ídolo de los encordados, al astro del cine de acción, al gran Sylvester Stallone. Y es realmente melancólico ver que el tiempo no perdona, y los estragos del tiempo se ven en el cuerpo, alguna vez esculpido y moldeado en el gimnasio, al grado de parecer un héroe griego. A pesar de las cirugías y del botox, el rostro de Stallone realmente parece de un boxeador retirado. Da pena sinceramente y yo entiendo que el personaje de Rocky Balboa genera mucho dinero y hay que explotarlo lo más que se pueda y darle a la zaga como dicen algunos un “digno final” para sus fieles seguidores. Pero esta tarde de miércoles me he puesto muy sensible y prefiero recordar al gran Rocky Balboa en su esplendor, joven hercúleo, un homenaje al “Dorian Gray” del cine donde los ídolos hermosos del pueblo, nunca envejecen.

Magnífica sexta entrega de la saga de Rocky. Tras el poco éxito que obtuvo ''Rocky V'', Sylvester Stallone sabía que no podía dejar la saga así, de modo que, al estrenar esta ''Rocky Balboa'' consiguió remontar el vuelo y dejar un buen sabor de boca a todos los fans de Rocky.
Caben destacar muchas cosas sobre esta sexta parte; como por ejemplo la presencia de Burt Young (Paulie), que le interpretó en todas las entregas de Rocky; o los guiños a anteriores entregas (excepto a ''Rocky V'' por el poco fervor que siente Stallone a esta entrega) y eso siempre se agradece, al menos entre los fans de Rocky ...
Se nota la ausencia de Talia Shire (Adrian) y tambien de algunos otros actores ya míticos de la saga, pero en cierta medida, con una historia bien trabajada como es la que posee esta ''Rocky Balboa'', consigue que no notemos su ausencia.
El gran Sylvester Stallone ha conseguido cerrar el círculo de esta maravillosa saga de forma absolutamente brillante. Para mí personalmente, el final no es el que yo habría deseado, pero si lo miras de forma objetiva, es el final perfecto para un campeón tanto dentro como fuera del ring.
Por último decir que cuando termina el combate y Rocky sale del ring saludando a la gente, se puede ver a un hombre alto, rubio y vestido de negro con la cabeza agachada ante la presencia de Balboa; dándonos a entender que es Iván Drago (''Rocky IV'') que se encuentra entre los espectadores del estadio. De cualquier forma es mera suposición, ya que no es el mismo actor el que lo personifica.

Lo mejor: Todo. Historia excelente, la extraordinaria forma física con que contaba Stallone a sus casi 60 años (en aquel entonces), volver a verle entrenar y una manera absolutamente perfecta de poner el broche de oro final a una saga genial.
Lo peor: Nada.

Frase destacada: ''No importa lo fuerte que golpeas, sino lo fuerte que pueden golpearte'' - Rocky Balboa -

PD: Personalmente, como fan de Rocky, creo que esta debería ser la última de esta maravillosa saga; ya que cierra de forma perfecta el círculo formado por aquella brillante ''Rocky''.

* Maravillosa película, pero recomendada especialmente para fans de Rocky *

Muy buena.

Como dice mi título, no se qué tan objetiva puedo ser con esta película. Soy fan de Rocky desde siempre, asi que en general cualquiera de sus películas (ok, tal vez la 5 no) me parecen una genialidad absoluta digna del Oscar y de todos los premios que haya disponibles.
Con esa advertencia, dejo mi crítica: Rocky Balboa es una muy buena pelicula, muy emotiva y con un hermoso mensaje digno de este tipo de películas.