Aunque la productora se llame A contracorriente, no se puede negar que la película intenta navegar con el viento a favor de las campañas para concienciación sobre la violencia de género. Pero no creo que sea esa vocación oportunista lo que hace que sea tan floja y tópica, sino la inconsistencia de muchos puntos de la trama, lo elemental de los personajes (el poli traumatizado, el pijillo gamberro, la mujer desamparada, el padre vengador) y todo lo que ponen de manifiesto otros comentarios de esta página y que hacen la historia muy previsible a cada paso. Al final, todo se limita a ver a un Harry el Sucio saltarse a la torera cualquier garantía ciudadana y solucionarlo todo a base de pegar más fuerte que el otro. Con ello, el único espectador que puede verla con agrado es precisamente aquel al que le resbalan problemas como la violencia de género. Y le seguirán resbalando después de ver esto.

Soy cinéfilo y escritor de novelas, las cuales muestran una cierta influencia cinematográfica. Filmaffinitty es un punto de referencia para todo aficionado al cine, que desea saber si una película merece o no la pena, a pesar de que opiniones las hay como estrellas en el firmamento. De buena a mala, o simplemente pasable, la película que nos ocupa merece el calificativo de: NOTABLE.
Lo que en principio se antoja como una cinta menor y hasta intimista, desenvuelta en el marco de una Cádiz tan mediterránea como oscuramente cosmopolita, lentamente se transforma, cual Ícaro, en algo de mayor y compleja trascendencia, cuyo axioma es la evidente destrucción de algo que cada día vuelve a revivir, reiterándose en ese atavismo propio del tejido humano en el que lo abyecto termina por agostar a los individuos. Las realidades que nos propone la película de Juan Miguel del Castillo no es algo a tomar la ligera, ni permite jugar a las subjetividades. Todo lo contrario, nos abofetea con la crudeza que destila aquello que sabemos cierto en el día a día de nuestra deficiente sociedad. A través de las poderosas interpretaciones de Fred Tatien, Natalia de Molina y todo el elenco de maravillosos secundarios, asistimos a una historia que seguiremos con especial deleite hasta su conclusión. Estamos, pues, ante una gran muestra del thriller español. No se la pierdan.