De los creadores de la exitosa Pequeña Miss Sunshine llega a España Sunshine Cleaning, la historia de dos hermanas que, obligadas por sus circunstancias económicas, ponen en marcha un negocio de limpieza de escenas de crimen.

Sunshine Cleaning es un intento de comedia cuyo principal sustento es la interpretación de las dos protagonistas Amy Adams y Emily Blunt. Demasiado superficial en su tratamiento de los personajes y sus relaciones, la película llega a hacerse aburrida por momentos y ni siquiera roza de lejos la emoción. Hay muchas relaciones entre los personajes, como la del niño y su abuelo o la de Norah con Lynn, a las que apenas se da juego, quedando un filme soso y ya no digamos ausente de comedia.

Hay puntos que son pasables, como por ejemplo el conflicto que Norah padece a causa de la muerte de su madre, pero que se ven sepultados, aparte de por no ser explotados como cabría esperar, por otros estúpidos momentos que favorecen el que la película haga aguas. Si no, ¿qué diablos quiere decir esa escena nocturna en la que Norah, en compañía de Lynn, respira las chispas que saltan al pasar el tren por la vía?

Sunshine Cleaning es una nueva entrega que nos brinda el cine independiente norteamericano que, aunque se deja ver, puede generar decepciones en más de uno. Sobre todo si lo que se espera es una comedia.

Dos hermanas en situaciones no socialmente bien vistas, que tienen que seguir tirando hacia delante. El planteamiento es bueno, muy realista, al fin y al cabo muchos estamos así a día de hoy. Un padre con sus historias que tampoco anda muy fino y un niño curioso completan esta familia. Los personajes está bien, son diferentes y tienen todos algún que otro problemilla, muy realistas y los actores están bien metidos. Luego ya el desarrollo del argumento pues… bueno es una historieta más, un episodio en la vida de esta familia, que pese a todo, pues están unidos y se ayudan entre ellos. No está mal, es un pequeño drama como el de cualquier otra familia, con una trama peculiar, muy americana. Porque estas cosas, solo pasan en las películas americanas.

Para poder disfrutar de esta película hay que olvidar el hecho de que es producida por Peter Saraf y Marc Turtletaub (“Little Miss Sunshine”). Tomando en cuenta lo anterior, Sunshine Cleaning no tiene punto de comparación con la reina de Alburquerque, Sunshine Cleaning es un drama y no una comedia como se vende publicitariamente. Sunshine Cleaning es un drama que tocas temas oscuros y trágicos, una película con buenos momentos pero que no llega a despegar. Un filme con giros argumentales apresurados y pocos originales. Una película que muere en el intento. Lo Mejor: Amy Adams, Emily Blunt y el pequeño Jason Spevack. Lo Peor: un guión pobre y poco trabajado. Decepcionante.

Comedia negra sobre dos hermanas que se dedican a limpiar escenas de asesinatos, que termina no siendo comedia. Hacer chistes sobre asesinatos y sangre no cuenta como comedia negra si estos chistes no tienen gracia o si no son lo suficientemente chocantes como para ser dignos de ser recordados. Un drama bastante sin sustancia.

Comedia dramática o drama con un aire cómico, pero en cualquier caso negro, indie y feminista, con directora y una guionista mujer, combinación global que no me atrae mucho. Afortunadamente "Sunshine Cleaning" cuenta con la presencia de dos actrices encantadoras, Amy Adams y Emily Blunt, que interpretan a dos hermanas que son unas fracasadas, así que merece una oportunidad. Sobre este particular duelo, pese a las virtudes de Adams, me inclino sin dudar por la británica, no sólo por su obvia belleza sino porque tiene un aspecto entre socarrón y tierno que es irresistible. Algún crítico la define en esta página como con "cara de bobalicona" y en cierto modo así es siempre que entendamos la bobería como una especie de virtud femenina. Para el que no entienda bien lo que estoy diciendo puede visionar la secuencia en la tienda, cuando hablan del puzle de los gatitos, las caras que pone, o cuando se dedica a jugar con una ¿porra? improvisada, en el mismo local.

Por su parte la película pues empieza normal, luego mejora, a continuación pierde fuelle y termina con un cierre muy falso en el que no aclara absolutamente nada y nos remite a la inquietante pregunta de qué va a hacer con su vida Norah (Emily Blunt), lo intuyo muy mal para ella. Ahora bien, aunque "Sunshine Cleaning" se deja ver, fracasa completamente a la hora de explicarnos por qué dos jóvenes que son las más bellas del pueblo, agradables y sin defectos gruesos que las invaliden están solas, no tienen un duro y son unas desgraciadas. Aunque Rose (Amy Adams) alega que no sirve para nada "salvo para animadora y amante", las amigas que se ven en la fiesta son más inútiles aún y desde luego más feas, y sin embargo están casadas, tienen pasta y son felices o se supone que lo son. La idea de que no hay ninguna relación entre el atractivo personal de la mujer y su éxito afectivo, más bien juega en su contra, es un error muy común y muy grave en el cine femenino.