El bueno, el malo y el feo
7 de febrero de 2008
7 de febrero de 2008
21 de 27 usuarios han encontrado esta crítica útil
"El bueno, el feo y el malo" es la obra crepuscular del Spaghetti-Western. Irradia maestría a lo largo de sus 150 minutos. Sergio Leone creo una obra incomparable con una gran cantidad de ingredientes para hacer del western un poco suyo. Leone puso su sello en el género al lado de un inconmensurable Clint Eastwood.
Leone asignó a cada uno de los protagonistas unas cualidades, pero en el fondo todos tenían algo de malo y sus virtudes quedaban difuminadas. El bueno, conocido como "Rubio" (Eastwood) es un pistolero timador que formaba pareja con el feo, Tuco (Eli Wallach). El malo, Sentencia (Lee Van Cleef) es otro pistolero que se interpondrá en el camino de Rubio y Tuco. Los tres se necesitan para conseguir el dinero escondido del ejército, pese a saber que el oro acabará por enfrentarles.
El film está lleno de frases antológicas, fielmente reflejadas en muchos de los títulos de las críticas aquí expuestas: "Verás, el mundo se divide en dos categorías, los que tienen el revolver cargado y los que cavan, tu cavas". También destaca la escena del duelo con esos primerísimos planos de los rostros de los protagonistas con la celestial música de Ennio Morricone.
Los actores protagonistas están fantásticos. Eastwood hace un papel formidable, Wallach está realmente entrañable, a su personaje se le coge cariño, mientras que Lee Van Cleef es un malo auténtico. También destaca mucho la gran puesta en escena del film con unos paisajes áridos en los que se hace difícil respirar. Ennio Morricone le dio a este film un toque inolvidable.
Leone asignó a cada uno de los protagonistas unas cualidades, pero en el fondo todos tenían algo de malo y sus virtudes quedaban difuminadas. El bueno, conocido como "Rubio" (Eastwood) es un pistolero timador que formaba pareja con el feo, Tuco (Eli Wallach). El malo, Sentencia (Lee Van Cleef) es otro pistolero que se interpondrá en el camino de Rubio y Tuco. Los tres se necesitan para conseguir el dinero escondido del ejército, pese a saber que el oro acabará por enfrentarles.
El film está lleno de frases antológicas, fielmente reflejadas en muchos de los títulos de las críticas aquí expuestas: "Verás, el mundo se divide en dos categorías, los que tienen el revolver cargado y los que cavan, tu cavas". También destaca la escena del duelo con esos primerísimos planos de los rostros de los protagonistas con la celestial música de Ennio Morricone.
Los actores protagonistas están fantásticos. Eastwood hace un papel formidable, Wallach está realmente entrañable, a su personaje se le coge cariño, mientras que Lee Van Cleef es un malo auténtico. También destaca mucho la gran puesta en escena del film con unos paisajes áridos en los que se hace difícil respirar. Ennio Morricone le dio a este film un toque inolvidable.
15 de marzo de 2010
15 de marzo de 2010
16 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Las palabras se quedan cortas al hablar de Leone, un director al que los amantes del western le debemos dar las gracias por títulos tan repletos de buenas cosas como "El bueno, el feo y el malo", que una vez vista de nuevo incluso me atrevo a decir que se me hace corta y que sus dos horas y media pasan como un soplo con una intensidad que muy pocos, de verdad, poquísimos demuestran. Mientras la música de Morricone fluye y encaja a la perfección en cada momento, Eastwood "el rubio", tan avaricioso como todos, sorprende con una actuación muy discreta, a la sombra de un Eli Wallach que supera en protagonismo al resto. Cada vez que asoma la cabeza Lee Van Cleef para decir aquí estoy suena algún tiro, algo malo va a pasar y se respira azufre en el ambiente. Mientras, Leone se recrea con unos planos cortos memorables y realiza guiños antibelicistas mezclados con un humor en el que destaca y brilla Tuco, muy por encima de los demás.
La cinta está repleta de situaciones memorables, frases antológicas y dilapidarias, acción a raudales en el desierto almeriense y personalmente, a mí me da la sensación cada vez que la veo que lo que Leone hace es sólo posible gracias a él, nadie ha hecho o hace películas del oeste así, su sello personal me gusta y me emociona. Mi apología de esta película es sincera y justa, recomendable a todo amante del buen cine. Es historia del cine.
La cinta está repleta de situaciones memorables, frases antológicas y dilapidarias, acción a raudales en el desierto almeriense y personalmente, a mí me da la sensación cada vez que la veo que lo que Leone hace es sólo posible gracias a él, nadie ha hecho o hace películas del oeste así, su sello personal me gusta y me emociona. Mi apología de esta película es sincera y justa, recomendable a todo amante del buen cine. Es historia del cine.
16 de mayo de 2007
16 de mayo de 2007
17 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
Puede ser que Clint Eastwood sea la estrella de este largometraje. Puede ser que aquí encontraremos la fuente de inspiración de muchas de las ideas del señor Tarantino. Puede ser que la película se extienda un poco más de la cuenta. Puede ser que muchas de las frases señaladas por los personajes sean de aquellas que es necesario recordar para siempre. Puede ser que la banda sonora de este film sea la más recordada del denominado cine de vaqueros. Pueden ser tantas cosas, pero lo único rotundamente claro es que el Feo se apropia de la película. Es él, a través de sus cambios de temperamento, de su amplio registro gestual y de su humor solapado, quien se echa al bolsillo al protagonista e impone un personaje mal agestado y muchas veces ruin, al cual, sin embargo, es imposible no quererlo.
Síntesis: Entretención de cabo a rabo. Imperdible la actuación del Feo que hace ver algo tieso a Eastwood.
Síntesis: Entretención de cabo a rabo. Imperdible la actuación del Feo que hace ver algo tieso a Eastwood.
15 de octubre de 2011
15 de octubre de 2011
13 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tras ver la trilogía del dólar y "Hasta que llegó su hora", solo puedo decir cosas buenas de Sergio Leone. Cuando uno piensa en western, suenan nombres como John Ford o Howard Hawks. No sé si Leone es mejor o peor que ellos, lo que sí puedo decir es que el director italiano es bastante especial. Su estilo propio a la hora de hacer sus famosos spaghetti western lo convierte en uno de mis directores favoritos.
"El bueno, el feo y el malo" cierra de forma magistral una trilogía muy bien empezada con "Por un puñado de dólares" y continuada de forma excelente con "La muerte tenía un precio". Clint Eastwood (esta vez llamado Rubio) se pone por 3ª vez el poncho para vivir una nueva aventura leoniana en el oeste, con -como no- Ennio Morricone sonando de fondo.
La película comienza presentando a los tres personajes principales de la película, el bueno, el feo y el malo. La introducción es buenísima y nos hace presagiar lo mejor. Evidentemente el bueno es Clint Eastwood, quien va acompañado del feo, Eli Wallach. El malo es interpretado por Lee Van Cleef, a quien ya vimos en "La muerte tenía un precio".
Los tres personajes buscan un objetivo común, típico de los western: dinero. El problema está en que para llegar hasta él deberán cooperar, una tarea difícil viendo que no se llevan muy bien. "El bueno, el feo y el malo" es la más larga de la trilogía, y eso hace que sea la más completa. Hay una buena variedad de situaciones, todas dirigidas de forma magistral. Leone nos mete una vez más de lleno en la ambientación de un buen western.
La cinta transcurre en plena Guerra de Secesión norteamericana, donde Leone se muestra crítico con ambos bandos. Ni unos son muy buenos, ni otros son muy malos. Los dos están a la misma altura. Una postura que se agradece bastante, ya podrían hacer lo mismo otros directores ante otros conflictos, porque en la guerra no hay buenos ni malos.
Si tuviera que elegir un momento, me quedo claramente con los 20 últimos minutos, son impresionantes. Diría que es el mejor final que he visto. Y no es porque suceda algo inesperado, imprevisible. Tampoco porque sea un final enrevesado, que de que pensar. No es lo que ocurre, es la forma de llevar el momento. Tras ver ese final es imposible pensar que Leone no está entre los grandes directores. Es toda una lección de cine.
La música de Ennio Morricone que acompaña a ese tremendo final es perfecta. Los pelos de punta cada vez que escucho "Ecstasy of Gold". También es impresionante "The Trio", que culmina uno de los mejores momentos de la historia del cine.
Los adjetivos para alabar "El bueno, el feo y el malo" son interminables. Dirigida de una forma sublime por Sergio Leone, acompañada de una alucinante banda sonora de Ennio Morricone, gran fotografía, excelente montaje, bien interpretada, ... Es una película perfecta en cualquier apartado. Es una obra maestra.
"El bueno, el feo y el malo" cierra de forma magistral una trilogía muy bien empezada con "Por un puñado de dólares" y continuada de forma excelente con "La muerte tenía un precio". Clint Eastwood (esta vez llamado Rubio) se pone por 3ª vez el poncho para vivir una nueva aventura leoniana en el oeste, con -como no- Ennio Morricone sonando de fondo.
La película comienza presentando a los tres personajes principales de la película, el bueno, el feo y el malo. La introducción es buenísima y nos hace presagiar lo mejor. Evidentemente el bueno es Clint Eastwood, quien va acompañado del feo, Eli Wallach. El malo es interpretado por Lee Van Cleef, a quien ya vimos en "La muerte tenía un precio".
Los tres personajes buscan un objetivo común, típico de los western: dinero. El problema está en que para llegar hasta él deberán cooperar, una tarea difícil viendo que no se llevan muy bien. "El bueno, el feo y el malo" es la más larga de la trilogía, y eso hace que sea la más completa. Hay una buena variedad de situaciones, todas dirigidas de forma magistral. Leone nos mete una vez más de lleno en la ambientación de un buen western.
La cinta transcurre en plena Guerra de Secesión norteamericana, donde Leone se muestra crítico con ambos bandos. Ni unos son muy buenos, ni otros son muy malos. Los dos están a la misma altura. Una postura que se agradece bastante, ya podrían hacer lo mismo otros directores ante otros conflictos, porque en la guerra no hay buenos ni malos.
Si tuviera que elegir un momento, me quedo claramente con los 20 últimos minutos, son impresionantes. Diría que es el mejor final que he visto. Y no es porque suceda algo inesperado, imprevisible. Tampoco porque sea un final enrevesado, que de que pensar. No es lo que ocurre, es la forma de llevar el momento. Tras ver ese final es imposible pensar que Leone no está entre los grandes directores. Es toda una lección de cine.
La música de Ennio Morricone que acompaña a ese tremendo final es perfecta. Los pelos de punta cada vez que escucho "Ecstasy of Gold". También es impresionante "The Trio", que culmina uno de los mejores momentos de la historia del cine.
Los adjetivos para alabar "El bueno, el feo y el malo" son interminables. Dirigida de una forma sublime por Sergio Leone, acompañada de una alucinante banda sonora de Ennio Morricone, gran fotografía, excelente montaje, bien interpretada, ... Es una película perfecta en cualquier apartado. Es una obra maestra.
4 de enero de 2007
4 de enero de 2007
43 de 75 usuarios han encontrado esta crítica útil
Después de probar el género western sin mucha fortuna, esperaba encontrar algo diferente en el spaghetti-western y parece que así ha sido.
Tras unos brillantes títulos de crédito iniciales (sorprendentes para ser de 1966), la película comienza con una secuencia en la que no se pronuncia ni una sola palabra en los primeros diez minutos, sin embargo, no da la sensación de que dure tanto toda la escena. Leone consigue tener pegado al espectador en el sillón hasta que él lo desee. Eso es spaghetti-western: oler el sudor, ver las espinillas, escuchar la respiración e incluso sacarle los mocos a los primeros planos en los que podemos observar a golpe microscópico cada uno de los personajes.
De todos es sabido que Morricone es un genio, y aquí lo vuelve a demostrar una vez con una banda sonora que todos hemos silbado en más de una ocasión. No sólo la canción principal hace gala de lo grande que es Morricone, las piezas más emocionantes son las menos conocidas: los coros, armónicas y violines, en la secuencia en la que “el malo” intenta conseguir cierta información, recorren nuestras venas como la heroína.
Los personajes están grandiosos, salvo Clint que con su inexpresividad no consigue más que fotos de su cara en movimiento. Menos mal que “el malo” y “el feo” actúan por él y hacen que pueda mover ficha en el celuloide.
El guión a pesar de ser bastante simple, crea diferentes situaciones que hacen que la película no se haga excesivamente aburrida, aunque quizás es un poco extensa en metraje y un buen recorte hubiera dado más ritmo.
Lo que más me ha gustado han sido todos estos momentos puntuales (primeros planos, música, algunas secuencias...), pero el conjunto se me ha hecho un poco empalagoso y unas cuantas veces he tenido que mover el culo del sillón y respirar hondo para ponerme cómodo.
Una nota para acabar: soberbios los minutos finales de la película.
Nota: 6,5
Tras unos brillantes títulos de crédito iniciales (sorprendentes para ser de 1966), la película comienza con una secuencia en la que no se pronuncia ni una sola palabra en los primeros diez minutos, sin embargo, no da la sensación de que dure tanto toda la escena. Leone consigue tener pegado al espectador en el sillón hasta que él lo desee. Eso es spaghetti-western: oler el sudor, ver las espinillas, escuchar la respiración e incluso sacarle los mocos a los primeros planos en los que podemos observar a golpe microscópico cada uno de los personajes.
De todos es sabido que Morricone es un genio, y aquí lo vuelve a demostrar una vez con una banda sonora que todos hemos silbado en más de una ocasión. No sólo la canción principal hace gala de lo grande que es Morricone, las piezas más emocionantes son las menos conocidas: los coros, armónicas y violines, en la secuencia en la que “el malo” intenta conseguir cierta información, recorren nuestras venas como la heroína.
Los personajes están grandiosos, salvo Clint que con su inexpresividad no consigue más que fotos de su cara en movimiento. Menos mal que “el malo” y “el feo” actúan por él y hacen que pueda mover ficha en el celuloide.
El guión a pesar de ser bastante simple, crea diferentes situaciones que hacen que la película no se haga excesivamente aburrida, aunque quizás es un poco extensa en metraje y un buen recorte hubiera dado más ritmo.
Lo que más me ha gustado han sido todos estos momentos puntuales (primeros planos, música, algunas secuencias...), pero el conjunto se me ha hecho un poco empalagoso y unas cuantas veces he tenido que mover el culo del sillón y respirar hondo para ponerme cómodo.
Una nota para acabar: soberbios los minutos finales de la película.
Nota: 6,5
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here