La verdad es que yo no esperaba un peliculón ni nada de por el estilo pero ya apartir de los primeros momentos de ver la pelicula me suscitó un interes en verla con más atención.
Entre la crítica que esta película hace a la situación en el continente africano más especificamente en Sierra Leona y lo que a su vez te hace disfrutar es indescriptible, ya que en ningún momento se hace pesada, la interpretación de los actores es bastante buena, los paisajes maravillosos y lo mejor de todo el argumento que escoge el director para explicar el film me parece muy acertado.
En conclusión te hara disfrutar y a la vez replantearte ¿El por qué de esa situación?(cuando veais la película me comprendereis)

Primero fue el señor de la guerra en Liberia, a continuación vino el jardinero fiel en Kenia, seguida de El ultimo rey de escocia en Uganda y de esta Diamante de sangre en Sierra Leona. En estos últimos años se han rodado varias películas sobre África y a cada cual mejor. Diamante de sangre combina a la perfección la historia personal de Di Caprio y Connelly y la trama sociohistórica de la busqueda de diamantes para financiar y perpetuar una guerra sin solución. Se muestra como la guerra y la guerrilla es más rentable que la paz y que cualquier forma de perpetuarla es aceptable aunque ello implique niños soldado y diamantes manchados de sangre. Sin darnos cuenta se nos enseña como la manipulación por parte de las grandes empresas importadoras de diamantes nos oculta el drama que se vive en algunos países africanos. Tanto Di Caprio como Connelly están correctos pero cabe destacar la interpretación de Djimon Hounsou que borda su papel y que impresiona por su intensidad e implicación.

Nos hace ver una pequeña muestra de todo lo sucede en este tipo de paises, donde el dinero es lo único importante, donde los derechos humanos no valen mas de un euro.
La película además de ser una crítica a las poderas naciones que indirectamente o directamente controlan estas guerras nos mete en la vida de un traficador de diamantes y nos muestran lo despiadados que pueden ser por dinero.

DiCaprio realmente hace un gran papel, que bien mereceria un oscar, tiene unas buenas escenas de guerra marcadas por el realismo y la crueldad con la que se realizan y nos muestran sin duda lo peor de estas sucias guerras: los niños con fusiles matando a sus propios vecinos por sobrevivir.

Un film basado en hechos reales con una historia con los sentimientos suficientes para calar en el fondo de las personas, muy buena película.

Me gustó. Como entretenimiento sin duda funciona. Hay problemas de verosimilitud (un DiCaprio campando por la selva como si fuera el patio de su casa). Su caracterización con acento afrikaaner es original y efectiva, endurece a su personaje y favorece a la actitud vital que pasea durante la película. La tensión dramática la sostiene brillantemente Hounsou. Connelly puede hacer lo que quiera porque es maravillosa (tanto como la vida puede ser...). En fin, menos trascendente de lo que pretende pero bien filmada y entretenida a su vez.
Lo mejor: Trío protagonista. Especialmente Hounsou.
Lo mejorable: Chicha en las historias secundarias, verosimilitud en algunos pasajes.

El mensaje de esta película, decirlo no es spoiler puesto que es un anuncio, es que exijas siempre la garantía de que el diamante que vas a comprar no es un diamante de sangre. O sea, que su origen no ha sido a costa del trabajo esclavista de unos niños. Claro, nosotros, los peliculeros, como compramos diamantes todos los días, pues nos emocionamos tontamente ante el aviso, tomamos nota del mensaje tan profundo de concienciación social, y no nos olvidaremos de que mañana mismo, cuando vayamos a comprar el siguiente pedruscón a nuestra pareja: tía, tío, ambas cosas, pidamos que nos asegure el encargado que el pedrusco que queremos no es un diamante de sangre.

-No, por favor, amadísimo cliente, ¿ve? Ni gota de sangre. Es un brillante con un fondo ligerísimo rosado pero no es de sangre, es su color natural, que lo hace bellísimo. Es de una pureza absoluta con una antigüedad certificada de más de mil millones de años.

-Ah, bueno. Es que estoy en contra de esas cosas… Pobrecitos niños, me dan una pena...

-Je, je. No se preocupe. Son 800.000. Muchas gracias. Además, un diamante es para siempre.

-Es que son tantas cosas las que hay... Ya solo falta que las películas también se dediquen a concienciar a la gente como si fueran el telediario. A veces te meten en unos berenjenales que te dan que pensar.

-Es verdad, es verdad... Tome, el ticket.

Una de esas películas tontas del guaperas de turno.