Juan José Campanella nos trae una muy buena película donde las actuaciones son brillantes, la trama te atrapa, y haces que estés pegado a la pantalla las poco más de dos horas de duración.
Es difícil que un actor transmita amor con solo una mirada, pero Ricardo Darín lo consigue.
Algunas escenas están estupendamente rodadas (momento estadio de fútbol).
Y el final...sin palabras, mejor verla, se la recomiendo a todo el mundo.

Hay veces que terminas de ver una película y te das cuenta de que tienes el corazón en un puño y los ojos húmedos. Que estás más cerca de la pantalla que cuando empezaste, que de pronto han pasado dos horas. Y tú estabas sumergida.
Esta es de ellas. Es una de esas películas que te hacen recordar que el cine es arte, que hay quien lo ama y lo demuestra con sus obras. Una de esas.
La banda sonora es preciosa. Y los actores... Ricardo Darín es increíble. Las miradas de todos ellos hacen que el nombre del film resuene en mi cabeza ''El secreto de sus ojos''...

Joya argentina, película lentamente contada. Al detalle, muestra el interior de los personajes y como se desarrolla el trama a través de ellos, con una interpretación excelente y un justo final. Historia de crimen y amor, para adictos al buen cine.

SENSACIÓN APORTADA: Buen cine. Reflexionar

Ësta película pasa a mi gusto como una de las mejores de la historia del cine. Es una película clásica, que tiene de todo pero a la vez con aristas que no son fáciles de digerir. Magnífico el guión, hay una corriente de magia entre los protagonistas Soledad Villamil y Ricardo Darín pocas veces vista en el cine. A pesar de su largo metraje te atrapa por su calidez, su intriga, su romanticismo, su pura vitalidad y por un final apoteósico.

"Mi vida entera fue mirar para adelante, atrás no es mi jurisdicción. Me declaro incompetente."

Segunda película argentina en ganar el Óscar, antes lo logró 'La historia oficial' en 1986, la de Campanella escondía una escalofriante venganza dentro de un amor imposible, una mirada al pasado de crímenes imborrables donde la decisión y búsqueda de justicia hace a Ricardo Darín volver sobre sus huellas. En tiempos de madurez, recorrer de nuevo el pasado puede cambiar la visión y reescribir el futuro. Esos atemporales recuerdos de amor, amistad y muerte, puestos en libertad, pueden acabar en algo más dramático que una fábula conmovedora.

Basada en la novela 'La pregunta de sus ojos' de Eduardo Sacheri, el filme de Campanella se ha consolidado como una de las mejores películas del siglo XXI. De corte y estilo clásico, diálogos bien hilvanados y grandes interpretaciones, esta historia que aúna el thriller con lo emocional o sentimental compone la fórmula perfecta para quedar plasmada en la memoria. Como los misteriosos recuerdos que acompañan a Benjamín Espósito.