Carece totalmente de la esencia principal que hizo a los Simpson famosos y tan vistos ,el guión es más que pésimo, son como una segunda parte mala. en la serie original cada personaje tiene una personalidad distinguida de los demás, en esta película estos caracteres se vulneran en mas de una ocasión. ¿Cuando se vió a Hommer en una actitud de salvar al mundo?.

Los Simpson en película es un capítulo de la serie mucho más largo. Y en la serie no todos los capítulos son buenos, los hay más ácidos, los hay que son dedicados a un tema o festividad y los hay más puritanos o familiares. Los últimos son los que menos me gustan y la película se puede parecer más a uno de estos, por falta de humor ácido o mordiente más que por exceso de moralina.

El guión no es problema, la historia es un lío más en el que se mete Hommer, y el interés no se resiente con la duración. Como los Simpson son estrellas se ve su película y punto.

Es como un capítulo de la serie pero largo, sin esperar más que eso. Se vuelve un tanto aburrida, hacia la mitad de ella, debe ser por la extensión de la mísma.
No es como para:" Los Simpson "la pelicula".

Me reí harto dos a tres veces, pero me quedo con alguno de los otros capitulos de la seria.

La verdad, esperaba mucho más de esta familia.
Para empezar el Homer que sale en esa película, no es el que estamos acostumbrado a ver en la tele. Parece más sereno, más cuerdo, más consciente de lo que hace.
En segundo lugar, abusan demasiado de los secundarios, llegando a darles un protagonimos exarcebado, irritante incluso. No se, no termina por convencerme la historia.
Perfectamente podría tratarse de un capítulo más (algo más extenso) y encima pasteloso hasta decir basta... prácticamente se cargan a los personajes, porque parece que les hayan hecho un lavado de cerebro y los hubieran soltado a su antojo.
No se, no me han convencido y me han defraudada bastante. Además la historia pierde bastante interés.
Aparte de todo eso, hay algunas escenas que merecen la pena y algún que otro gag en el que me he reído, pero de resto, nada de nada.

La esperada película de Los Simpsons arranca con un episodio de los dibujos de Rasca y Pica, y ya desde el principio uno atisba que algo no va bien: ¿dónde está la sangre que emerge a borbotones de cualquier parte del cuerpo de Rasca?, ¿dónde está esa violencia sarcástica que hizo célebre a la serie dentro de la serie? Puede parecer estúpido, pero sin sangre Rasca y Pica no es lo mismo, la película ha robado su esencia.
Si bien es cierto que la historia del largo de Los Simpsons gira entorno a la familia de forma casi exclusiva, hay personajes completamente tergiversados: Ned Flanders hace de padre ejemplar y tipo serio, cuando en la serie su papel denuncia aptitudes poco "homerianas" pero denunciables: sobreproteccionismo, candidez extrema hasta llevarle al ridículo, y muchos rasgos más que sólo se pueden percibir trás contemplar las infinitas temporadas de Los Simpsons. Y ese es el fallo de la película, es imposible alargar la esencia de un capítulo de 25 minutos a 90. Además los personajes están desaprovechados e incluso inutilizados: Ralph hace de escaparate promocional, Burns (que debería ser el malo del film) aparece en un insulso gag, ¡y ni siquiera recuerdo a Seymour Skinner! Salí muy decepcionado del cine, y para los nostálgicos de Los Simpsons, recomiendo que buceen en Internet para saber las dimensiones de freakismo que ha conseguido la serie original.
Hay puntos buenos en la película, y hace algún que otro guiño al humor absurdo e irreverente de la serie, pero poco más. Mi sensación es que Matt Gregoring junto a David Silverman, se ha empeñado en convertir una serie de culto en una cursileria taquillera y reducida al público infantil.