Al menos en cuánto a lograr identificar perfectamente a cada uno de los personajes. Porqué no haría ni falta oír sus nombres, con verlos ya sabes quién es quién. Mención especial para los protagonistas, He-man y Skeletor. Cojonudos.

Que es una pena que se desarrolle en la tierra?, pues haber hecho colecta para aumentar el presupuesto quejicas. Lo cierto es que los que estamos entre los 25 y 30 tacos y adorábamos la serie, creo que guardamos un buen recuerdo de ésta excelente y malilla película.

Los Masters del Universo es una adaptación de los muñecos de Mattel que se hicieron populares a mediados de los 80. Quienes tenemos treinta años o más nos acordaremos de He-Man, skeletor, el castillo de Grayskull, la cuerva de la serpiente, la cueva del terror. Pues bien, parte de esto está en esta película.

Y digo parte porque la película se desarrolla principalmente en la tierra y muy poco o casi nada en Eternia donde es originario He-Man y sus paisanos incluido el malvado Skeletor que vive en su tenebrosa morada llamada cueva de la serpiente.

Perfectamente caracterizado , soberbia la interpretación de Frank Langella, que me convence muchísimo más como Skeletor que Dolph Lundgren como He-Man.

Tampoco entenderé como esta película pasó sin pena ni gloria en el momento del estreno dirigida exclusivamente al público infantil que coleccionaba los muñecos y al formato de videoclub. Por suerte, con el paso del tiempo, y gracias a las buenas críticas por parte del público ha ido ganando fuerza y hoy en día podemos decir que es incluso una película de culto que desborda imaginación, fantasía, acción, entretenimiento, diversión.

En definitiva una película de aventuras que cumple su cometido, entretener.

Hay que tener en cuenta que corría el año 87 , hace ya unos 25 años, que se dice pronto, y que los efectos especiales eran limitados, a no ser que fueras un spielberg , Ridley scott o George Lucas y te inyectaran una buena suma de dinero para producir, se hacia esta clase de películas y con suerte. En ese sentido la película pasa sobradamente el aprobado con una entrañable y mítica escena final entre he-man y skeletor que nos recuerda un poco al final del Retorno del Jedi.

Es una pena que las malas críticas y el poco éxito en taquilla de esta película no dieran pie a una segunda y tercera entrega de los masters, sin duda hubiese sido muy acertado y tendríamos otra buenísima saga como ocurre con la de Superman, regreso al futuro, Star Wars….

Desde hace unos años se rumorea que algún director de la talla de Ang Lee quiere comprar los derechos para rodar una nueva versión, pero todo son rumores.

Gran película de acción y aventuras. Es como ver El Señor De Los Anillos (salvando las distancias visuales) en concepto "macarra". Cuando digo macarra me refiero a los típicos escenarios americanos de los 80, tiendas de música con sabor a caspa (de la buena), calles oscuras al estilo calles de fuego... y un Dolph Lundgren que hace el papel de su vida. Siempre hace de malo, de hombre sin piedad, sin corazón, sin sentimiento alguno; pero aquí no amigos, aquí es el príncipe de Eternia y realmente llega a hacer que te lo creas.
Posiblemente fuera una película en la que muchas otras se inspirasen, una historia que sin ser redonda del todo cumple a la perfección para tenernos pegados a la pantalla durante todo el metraje.
Mención aparte a Frank Langella, ni Dark Vaider oiga. Que carisma derrocha en pantalla, como transmite esa sensación de malo malísimo, cruel, despiado y listo; cosa de la que adolecen otros muchos malos malísimos.
Si te apetece ver algo más de hora y media de aventuras a la vieja usanza no lo dudes, He Man es una gran elección.

P.D. ¿Os imaginais esta película con los medios actuales? Pero obviamente me refiero con el "aroma" a 80 que tan bien le sienta a esta peli.

¿Quién de nosotros no ha tenido de pequeño un He-Man o un Skelletor? ¿Quién no se pasó las tardes enteras formando luchas entre ambos batallones? Esta película marcó a toda la generación de los finales de los 80' y principios de los 90', de eso no cabe duda alguna. Todos nos quedábamos atónitos frente al televisor cada vez que la echaban en la tele, espectantes a cómo la existencia del universo se reducía a una simple "llave musical". Y aunque en aquella época hubiésemos valorado esta película con un 10 sin pensarlo, ahora hay que plantearse seriamente esa nota. La verdad que no vale la pena romper nuestros gratos recuerdos. Hay películas que sólo debemos ver una vez...

Hoy he vuelto a ver esta cinta después de más de diez años, una cinta que fue mi infancia y de la cual apenas recordaba nada, y la verdad es que me lo he pasado teta viéndola. Puede que las interpretaciones, la dirección y demás aspectos técnicos sean bastante deficientes, pero vaya por lo menos un 6 por el rato tan agradable y nostálgico que me ha hecho pasar. Además, adoro su estética ochentera.

Mítica y entrañable.