Parece mentira que una película muda, pueda ofrecernos tal variedad de emociones.
El señor Murnau nos ofrece esta auténtica maravilla que nadie debería dejar de ver.

Película estupenda de los albores cinematográficos que nos deja a las claras de la grandeza del cine. Es una película del año 1927 que posee una buena dosis de interpretación y dirección. Fabulosa fotografía, buena banda sonora e historia bien contado, aunque para mi gusto un poco larga. Recomendable para ver que también en el cine mudo, hay muy buenas películas.

Reconozco que he empezado a ver la película por su alta nota aquí y pensaba que me iba a encontrar con otra película antigua sobrevalorada que sólo se entendería en su contexto y me iba a resultar pesada.

Me equivoqué.

Amanecer toca los sentimientos. Con razón se llamaba expresionismo alemán porque expresa perfectamente lo que quiere transmitir en cada momento. Desde momentos turbos a momentos delicados. La fragilidad de Janet Gaynor en la pantalla la puedes acariciar. Los momentos que pasan juntos en la ciudad se disfrutan muchísimo y eres partícipe de su reconciliación e idilio.

La verdad es que no esperaba que una película tan antigua y muda pudiese transmitirme tanto. Me ha sorprendido gratamente. Cierto es que es otro tipo de cine, pero el lenguaje sigue siendo universal.

Para todo aquel fanático incondicional del cine mudo, que sepa que hay vida más allá de Charlie Chaplin. Amanecer es una perfecta oportunidad para indagar en él y descubrir su magia. Icónica, cruelmente tierna y sublime, Friedrich W. Murnau dirige una turbulenta historia en formato de triángulo amoroso. No hacen falta palabras para describir una crisis tan frecuente, pero al mismo tiempo tan delicada. Preciosa.

En pocas palabras la película es notable. En cada escena logras apreciar de forma correcta el sentir de los tres personajes en los cuales se centra la historia, algo muy bien elaborado para ser cine mudo.
Te pueden chocar algunas cosas si las criticas con un pensamiento sobre como es una relación en la actualidad, trata de centrarte en las segundas oportunidades.