Cuestión de honor
6.8
57,247
Intriga. Drama
El teniente Daniel Kaffee es un joven y prometedor abogado de la Marina que tiene una excelente reputación. Sus superiores le confían la defensa de dos marines acusados de asesinato. A primera vista, el caso no parece complicado. Pero cuando tenga que vérselas con el Coronel Nathan R. Jessup, Comandante en Jefe de la base de Guantánamo, saldrán a la luz nuevas pistas que harán que el caso adquiera dimensiones insospechadas. (FILMAFFINITY) [+]
25 de octubre de 2013
25 de octubre de 2013
Sé el primero en valorar esta crítica
Sencillo pero muy buen film, con increíbles interpretaciones de sus cuatro protagonistas (Tom Cruise, Demi Moore, Kevin Bacon y el gran Jack Nicholson).
Es cierto que AHB puede ser un film un poco ''flojito'', pero de eso se trata. Tom Cruise hace un papel que de verdad la pena, no a lo que nos tiene acostumbrados desde Misión imposible. Jack Nicholson sigue perturbando y Moore y Bacon hacen lo que se les pide, ni más ni menos.
Como film no tiene mucho que ofrecer, pero es entretenido y tiene un guión interesante. Buena película que no es imprescindible, pero sí recomendable.
-Lo mejor: La narración del film y su guión.
-Lo peor: Tiene síntomas claros de ''cuento de hadas''.
Es cierto que AHB puede ser un film un poco ''flojito'', pero de eso se trata. Tom Cruise hace un papel que de verdad la pena, no a lo que nos tiene acostumbrados desde Misión imposible. Jack Nicholson sigue perturbando y Moore y Bacon hacen lo que se les pide, ni más ni menos.
Como film no tiene mucho que ofrecer, pero es entretenido y tiene un guión interesante. Buena película que no es imprescindible, pero sí recomendable.
-Lo mejor: La narración del film y su guión.
-Lo peor: Tiene síntomas claros de ''cuento de hadas''.
7 de julio de 2014
7 de julio de 2014
Sé el primero en valorar esta crítica
La historia es un batazo tras las rodillas del sistema militar norteamericano, en cuanto al "endiodamiento" de los códigos de honor militares. A pesar de lo absurdo de escribir crítica alguna sobre nada en particular, debo decir que disfruté muchísimo la película con las interpretaciones de todos los personajes especialmente de nuestro amiguete Cruise el cual es todo un resplandor del buen hacer joven americano: sin perdón, el sistema es el sistema y estamos aquí para cumplir la ley: esto me gusta pues es de lo que ha hecho hoy a los Estados Unidos la primera potencia mundial. Buena película, buenísimos diálogos y buenas interpretaciones, a pesar de que de cuando en vez parece que asistimos a un tv serie infantil, pero esto es lo de menos pues apenas se nota este defecto producido probablemente por el montador de la película o quien sabe si por el mismo director. Anímense a verla y no quedarán defraudados, y si no pillan algún diálogo no tengan miedo de retroceder para escuchar de nuevo aquello que han dicho y no consiguió comprender del todo.
8 de enero de 2015
8 de enero de 2015
Sé el primero en valorar esta crítica
Esta es una película de actores, manejada con ritmo y oficio. “Algunos hombres buenos” cuenta una historia judicial típica, rodeada de caras conocidas que saben interpretar y lo hacen muy bien, y son precisamente ellos quienes dan relevancia e interés a la cinta. Es cine judicial entretenido, de oficio y previsible. No rompe ningún esquema y se limita a seguir un camino recto, pero no hay dudas de que mantiene a la audiencia hasta el final. Una película de actores.
20 de agosto de 2015
20 de agosto de 2015
Sé el primero en valorar esta crítica
Nicholson encabeza el cartel de la película, pero apenas es un personaje secundario, crucial para la película, pero interpretetivamente secundario. Eso sí, lo poco que sale, se sale.
Buena película jurídico, donde pone en debate los límites de los militares y también de la condición humana.
Buenas interpretaciones, buen ajedrez, mantiene atento a la pantalla, no hay momentos flojos.
Buena película jurídico, donde pone en debate los límites de los militares y también de la condición humana.
Buenas interpretaciones, buen ajedrez, mantiene atento a la pantalla, no hay momentos flojos.
2 de noviembre de 2017
2 de noviembre de 2017
Sé el primero en valorar esta crítica
Esta película, sin ser lo más, resulta bastante entretenida y tiene una calidad meritoria. La historia de cuenta un juicio desde la jurisdicción militar norteamericana.
Rob Reiner es un director con oficio que tiene en su haber un listado de obras de éxito, alguna de ellas de bastante éxito. En esta cinta hace una conducción que se siente exigente, eficaz y que resucitó en su momento el cine jurídico-militar. Aaron Sorkin escribe un guión fuerte, con punta, con filo y diálogos contundentes, adaptación de una obra teatral de su misma autoría. En el libreto se tratan aspectos morales de calado y aspectos filosóficos con relación al individualismo, o los conceptos de nación, religión o disciplina como base y fundamento del honor militar. Tiene una buena música de Marc Shaiman y adecuada fotografía de Robert Richardson, donde no hay planos inútiles. Buen montaje y excelente sonido.
El reparto es punto y aparte, unos actores que hacen interesantes y tensas interpretaciones. Tom Cruise era en aquel entonces un joven actor y a decir verdad, hace un digno papel como oficial abogado que se enfrenta y le sostiene la mirada al mismísimo Jack Nicholson. Nicholson, a pesar de ser en este film un actor de reparto, es sin duda el que, en sus poco más de veinte minutos, domina la historia con su gestualidad y una mirada tan aguzada y dura, que da miedo. Demi Moore hace un buen trabajo como mujer oficial ayudante de Cruise. Igual se luce Kevin Bacon.
Yo he llegado a la conclusión de que la milicia juega su papel en la defensa y otros servicios para un país, pero el mismo organismo militar es también capaz de engendrar personajes, situaciones o climas en los que la vida de soldados e inferiores en general puede hacerse irrespirable.
La película se centra el entramado del cuerpo de los Marines en una Base, y lo personifica en su jefe el Coronel R. Jessup, que es el arquetipo de la máxima autoridad. No olvidemos que el abogado Kaffee pretende demostrar que justamente la autoridad ha obrado mal. O sea, que el Coronel es un indeseable que ha incitado al crimen a dos de sus soldados. Justamente, el carácter delincuencial del Coronel y el hecho de ser juzgado dentro de la misma institución castrense, es el elemento clave dentro del guión, un punto de inflexión, que no excluye cierto cuestionamiento para hacer una invectiva de los Marines en la película. Sin embargo, no llega a ser por este mismo motivo, una auténtica y radical crítica al sistema militar. Esta no es una película antimilitarista, pues está muy centrada en la figura patológica y enferma de un mando, pero que respeta al resto de la “tropa”.
En definitiva, excelente film que recicla el subgénero judicial-militar, y le da unos leves toques de atención al sistema militar americano. Es una buena película de juicios, toca de pleno a la milicia americana; dirección y guión potables, buenas interpretaciones donde Nicholson se lleva la palma, película realizada con mucho oficio, y además atrae el interés del espectador desde el principio hasta el fin.
Rob Reiner es un director con oficio que tiene en su haber un listado de obras de éxito, alguna de ellas de bastante éxito. En esta cinta hace una conducción que se siente exigente, eficaz y que resucitó en su momento el cine jurídico-militar. Aaron Sorkin escribe un guión fuerte, con punta, con filo y diálogos contundentes, adaptación de una obra teatral de su misma autoría. En el libreto se tratan aspectos morales de calado y aspectos filosóficos con relación al individualismo, o los conceptos de nación, religión o disciplina como base y fundamento del honor militar. Tiene una buena música de Marc Shaiman y adecuada fotografía de Robert Richardson, donde no hay planos inútiles. Buen montaje y excelente sonido.
El reparto es punto y aparte, unos actores que hacen interesantes y tensas interpretaciones. Tom Cruise era en aquel entonces un joven actor y a decir verdad, hace un digno papel como oficial abogado que se enfrenta y le sostiene la mirada al mismísimo Jack Nicholson. Nicholson, a pesar de ser en este film un actor de reparto, es sin duda el que, en sus poco más de veinte minutos, domina la historia con su gestualidad y una mirada tan aguzada y dura, que da miedo. Demi Moore hace un buen trabajo como mujer oficial ayudante de Cruise. Igual se luce Kevin Bacon.
Yo he llegado a la conclusión de que la milicia juega su papel en la defensa y otros servicios para un país, pero el mismo organismo militar es también capaz de engendrar personajes, situaciones o climas en los que la vida de soldados e inferiores en general puede hacerse irrespirable.
La película se centra el entramado del cuerpo de los Marines en una Base, y lo personifica en su jefe el Coronel R. Jessup, que es el arquetipo de la máxima autoridad. No olvidemos que el abogado Kaffee pretende demostrar que justamente la autoridad ha obrado mal. O sea, que el Coronel es un indeseable que ha incitado al crimen a dos de sus soldados. Justamente, el carácter delincuencial del Coronel y el hecho de ser juzgado dentro de la misma institución castrense, es el elemento clave dentro del guión, un punto de inflexión, que no excluye cierto cuestionamiento para hacer una invectiva de los Marines en la película. Sin embargo, no llega a ser por este mismo motivo, una auténtica y radical crítica al sistema militar. Esta no es una película antimilitarista, pues está muy centrada en la figura patológica y enferma de un mando, pero que respeta al resto de la “tropa”.
En definitiva, excelente film que recicla el subgénero judicial-militar, y le da unos leves toques de atención al sistema militar americano. Es una buena película de juicios, toca de pleno a la milicia americana; dirección y guión potables, buenas interpretaciones donde Nicholson se lleva la palma, película realizada con mucho oficio, y además atrae el interés del espectador desde el principio hasta el fin.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here