Haz click aquí para copiar la URL

La soledad de los números primos

Drama En la escuela, Mattia había estudiado que entre los números primos (los que sólo son divisibles por sí mismos o por la unidad) hay algunos muy especiales, a los que los matemáticos llaman números primos gemelos: son parejas de números primos que están casi juntos, pues entre ellos sólo se interpone un número par. Son números como el 11 y el 13, el 17 y el 19, o el 41 y el 43. Mattia pensaba que Alice y él eran así, dos primos gemelos, ... [+]
Críticas 43
Críticas ordenadas por utilidad
escribe tu crítica
6
11 de enero de 2012 3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Inicialmente, debo decir que me sorprendió cuando me enteré de que ya se había hecho una adaptación de este libro, ya que es muy reciente. Sin embargo, me sentí muy contento con solamente pensar que iba a ver imagenes reales y vivas de ese libro tan genial pero tan desgarrador.

Cuando leí La Soledad de los números primos, me sentí un poco triste porque es una historia muy buena, con dos protagonistas y personajes con detalles y personalidades enigmáticas, pero a la vez muy tensionante. El final del libro es un poco triste, real, muy europeo. Alice y Mattia son números primos, como se explica también en el libro: “En una clase de primer curso Mattia había estudiado que entre los números primos hay algunos aún más especiales. Los matemáticos los llaman números primos gemelos: son parejas de números primos que están juntos, o mejor dicho, casi juntos, pues entre ellos media siempre un número par que los impide tocarse de verdad. Números como el 11 y el 13, el 17 y el 19, o el 41 y el 43. Mattia pensaba que Alice y él eran así, dos primos gemelos, solos y perdidos, juntos pero no lo bastante para tocarse de verdad”.

Esa hermosa metáfora explica gran parte de la relación de Alice y Mattia.

(Spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La película no sigue la misma cronología del libro. El libro narra la historia de principio a fin, en cambio la película avanza y retrocede en los tiempos, centrándose en momentos de vital importancia de la historia. Aunque a algunas personas que hayan leído el libro no les guste eso, a mi personalmente me pareció algo creativo, teniendo en cuenta que es muy difícil llevar un libro entero a la pantalla. Por lo tanto, el detalle de los tiempos no me molestó. Por algo, Paolo Giordano colaboró en la elaboración del guión.

Pero sin lugar a dudas, esta adaptación resulta más atractiva por las magnificas interpretaciones de los actores. En los distintos tiempos, tanto los niños, como los jóvenes y adultos. Puedo decir que cuando leí el libro, casi me los imaginada de esa forma. Y este era un factor de mucha importancia, ya que el alma del libro son principalmente los dos maravillosos personajes principales.

Y finalmente, otro detalle que se diferencia el libro de la película, es el final. Como mencioné anteriormente el final del libro es triste y real. Confieso que tenía gran expectativa en saber como iba a finalizar la película. Afortunadamente el final de la película no es del todo triste y no es igual al libro. Para algunos puede ser un detalle positivo o negativo, pero creo que Giordano se compadeció de los muchos lectores a los cuales entristeció con el libro. Claramente no fue final de comedia romántica, era imposible hacer un final de esa forma, ya que al fin y al cabo, la soledad es otra protagonista del libro.

Sin embargo, considero que la película es buena, fue un buen primer intento de llevar el libro a la pantalla grande.
5
1 de abril de 2013 2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hace cinco años, una primera novela de un joven escritor italiano, Paolo Giordano, sorprendió y cautivó a infinidad de lectores en todo el mundo, entre los que me incluyo, y se convirtió en un gran éxito editorial narrando la triste y hermosa historia de Mattia y Alice, dos personajes a la deriva debido a sus muy peculiares personalidades, traumatizadas desde la infancia, lo que les convierte en seres prácticamente asociales.

La semejanza de caracteres entre ambos, sus dificultades para relacionarse con el entorno y sus respectivas experiencias traumáticas de la infancia y la adolescencia serán el germen de la amistad que surge entre ellos y que les mantendrá unidos a lo largo de los años pese a la distancia física y al diferente camino seguido en la vida por cada uno de ellos. Ambos confían el uno en el otro y son capaces de comprenderse porque, al igual que los números primos, viven la soledad de quienes no acaban de encajar en la sociedad.

El éxito de la novela hacía previsible una pronta adaptación cinematográfica, y los buenos augurios llegaron con la noticia de que el propio Giordano sería coguionista de la misma. Pero... por eso sorprende negativamente que la estructura elegida por el cineasta Saverio Constanzo (el realizador y asimismo el otro firmante del guion) tengo tan poco que ver con la estupenda novela de Giordano, principalmente por un equivocado montaje, que alterna las diferentes etapas vitales de los protagonistas -infancia, adolescencia y madurez- de manera algo torpe y cortante, como a trompicones, y que llega a límites exasperantes en la secuencia del accidente en la nieve de Alice, narrada absurdamente en paralelo a la muy posterior en el tiempo de la fiesta, y que se estira innecesariamente convirtiendo una situación de por sí ya previsible en tediosa y desesperante para el espectador.

"La soledad de los números primos" no es propiamente una mala película -visualmente es muy válida (gran trabajo el del director de fotografía Fabio Cianchetti), y se beneficia además de una buena labor interpretativa general, destacando especialmente Alba Rohrwacher como la Alice adulta, y los dos actores elegidos para encarnar a los Mattia y Alice adolescentes-, pero sí que es fallida, por venir de donde viene -su muy atractiva fuente original-, pero también por sí misma, ya que no sabe transmitir del todo bien el complejísimo universo y la desazón existencial de esos dos magníficos e inolvidables personajes que inventó la mente de Paolo Giordano.
5
27 de marzo de 2013 2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hace ya tres años que la novela “La soledad de los números primos” cayó en mis manos y la devoré con inusitado placer. Me pareció emotiva, realista, contundente, valiente y original. Desprendía verdad, por mucho que estuviera revestida y adornada de mil y una ficciones. Destilaba esa clase de autenticidad que liga al autor con su obra, conectándola aún más con el lector. Además, combinaba la ambigüedad, la inseguridad y el enorme potencial de las letras con la exactitud, el misterio y la magia de los números. Ambos universos me atraen sobremanera, de modo que lo tenía todo para gustarme y así fue. Me encantó. Esta primera incursión literaria del italiano Paolo Giordano me descubrió a un escritor interesante y espero ansiosamente leer “El cuerpo humano”, su recién publicado segundo libro.
La historia de Mattia y Alice es un compendio de tristezas hilvanadas a través de las distintas épocas de sus vidas, de la niñez a la adolescencia y de ésta a la juventud, siempre sobre el trasfondo de la soledad. Ese tipo de soledad que se siente pese a estar acompañado y que nace del saberse incomprendido y desubicado en un entorno hostil. Lo expresaba muy bien el personaje de Sean Penn en “La delgada línea roja” a la pregunta de si se sentía solo: “sólo cuando hay gente”, respondía.
“La soledad de los números primos” hace referencia a una fábula matemática según la cual los números primos impares nunca están juntos aunque, a veces, se encuentren muy próximos (como el once y el trece o el diecisiete y el diecinueve). Hay otra cifra entre ellos que les impide el contacto. Mattia y Alice son la metáfora de esos números primos que, debiendo estar unidos, no lo están. Pero, por regla general, las adaptaciones cinematográficas de novelas destacadas suelen estar llenas de peligros y, especialmente, de dos. El primero, no lograr reproducir aquella interconexión que los lectores sostuvieron con la obra. El segundo, no aportar ninguna novedad interesante o creativa por parte del cineasta que trascienda a la herencia del material publicado. En esta película, ninguno de los dos han sido solventados con acierto, de modo que decepcionará tanto a quienes disfrutaron con la lectura como a los que no hayan leído el relato original. El largometraje les resultará lento y desprovisto de los auténticos significados con los que Giordano dota a los números y a las palabras. Si se eluden los simbolismos y se evitan las metáforas, sólo queda un tenue retazo del mensaje que la literatura sí fue capaz de transmitir. Insuficiente para quienes, como yo, albergaba notables expectativas y deficiente para quienes, no conociendo la historia previamente, asisten a su conversión en una trama que no mantiene el mismo nivel de interés durante las dos horas de proyección.
Todos los actores son desconocidos para el público español, a excepción de Isabella Rossellini, hija de la gran actriz Ingrid Bergman y del director Roberto Rossellini y en cuya filmografía figuran títulos como “Amor inmortal”, “La muerte os sienta tan bien”, “Corazón salvaje” o “Terciopelo azul”.
www.cineenpantallagrande.blogspot.com
@gerardo_perez_s
6
27 de marzo de 2013 2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película narra la vida de unos personajes durante tres épocas diferentes, para centrarse durante la última media hora en el presente y solo en los dos protagonistas principales. Lo más destacado de la película es su montaje, ya que nos cuenta lo sucedido en 1984, 1991 y 2001 ensamblando las escenas de una época y otra de manera perfecta, acompañada de una música bastante decente aunque en algún momento llega a ser cargante. Los principales errores de la película son:
- Guión deficiente, ya que se plantean diferentes situaciones y en muchos casos cuando acaba la película no están resueltas.
- La última media hora se vuelve lineal una vez que abandona los enigmas planteados durante los años anteriores y se centra en el presente, para no solo no terminar de solucionar las dudas surgidas anteriormente sino enredar el argumento todavía más.
El guión es adaptado de una novela de Paolo Giordano, que no he leído y por lo tanto no se si esos enigmas no resueltos están en la novela o si su lectura no nos deja ningún cabo suelto.
Esos defectos no la hacen una mala película y encima me ha encantado escuchar en la parte final una de mis canciones favoritas " Bette Davis eyes ".
El montaje es tan bueno que está a la altura de The master, Blue valantine y El atlas de las nubes, que para mí son otros tres ejemplos de buen montaje.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Los enigmas que quedan sin resolver o por lo menos clarificar son:
- Los números primos que relación tienen con la película, ya que solo vemos dos momentos en que se nombran y son " en 1984 en casa de Mattei y Michaela cuando en cas de estos su padre está explicando a mucha gente que son los números primos " y " en el 2001 en la boda cuando Viola habla a sus invitados de los números primos ".
- Michaela desapareceen 1984 cuando tiene 8 años, pero no sabemos si se escapa es raptada ni siquiera que explicación les da Mattei a esta desaparición.
- En 2008 vemos a Alice muy abandonada, pero no sabemos si diferentes cosas que la suceden son realidad, son sueños o es que se ha vuelto realmente loca.
6
28 de febrero de 2016 1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Leí el libro hace algún tiempo y ya casi lo he olvidado por completo (mala cosa/señal que haya dejado tan poca huella; solo recuerdo una leve decepción). Leí comentarios, críticas, en los que insistían en la mala adaptación, pésima, y me temía lo mucho peor. Y la verdad es que no está tan mal*. Es bastante correcta y delicada. Un intento poético de contar cómo el dolor, cuando es mayor, se convierte en enfermedad, o de cómo el daño apabullante te enloquece, te aísla, te marca y condena. Y de cómo solo es posible atisbar una luz tras ese túnel tan oscuro si encuentras alguien parecido a ti. Amor fou como recompensa y esperanza. Romanticismo consolador.
Es cierto que se pierde a ratos y que su ambiciosa estructura puede llegar a confundir, pero a mí sí me pareció un acierto romper con la linealidad temporal e ir construyendo la historia en zigzag, a través de rimas y asociaciones de ideas, jugando con el sonido, las luces y demás recursos formales, incluso las canciones**. Atenúa tópicos y rebaja convenciones, se muestra más arriesgada en la penetración de ese sentimiento tan ambiguo y fronterizo que pena entre la desconexión, el estupor y el desconcierto. Una historia que no cede a la tentación demasiado morbosa o truculenta ni a los excesos sublimados; es contenida y vaporosa.
Es verdad que se queda en la superficie y peca de cierto artificio un tanto pedante y rebuscado, pero es, en líneas generales, una película interesante, apreciable, querible en su tristeza y dolor.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
* ¿Seré un solitario espectador buscando mi Alice/Mattia cinéfilo, un terco al que le gusta llevar la contraria para llamar la atención o simplemente un primo? No me respondas ahora, mucho mejor después de la publicidad.
** El tremendo éxito discotequero de las Baccara, "Yes Sir, I Can Boogie", y el clásicazo pop de Kim Carnes, "Bette Davis Eyes", nada menos.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para