Cine de entretenimiento por autonomasia, espectacular, imaginativo en la puesta de escena, muy divertido y con estupendas interpretaciones.
Una excelente combinación de cine de acción y comedia, que resulta en todo momento muy entretenida, saca la carcajada del espectador en no pocos momentos y, en definitiva, te hace pasar algo más de dos horas la mar distraído.
Muy vistosa y atractiva desde el punto de vista puramente visual, tiene frescura a borbotones, un ritmo alocado y unos personajes inolvidables, como el de "mandarina", a cargo de un soberbio Aaron Taylor´Johnson.
Explosiva, adrenalítica, lo único "negativo" que se le podría achacar sería el tildarla de "gamberrada", pero es algo más: una auténtica lección de cine, superficial en su argumento, en realidad amalgama de muchas cintas anteriormente vistas, pero eficaz e inteligente adaptación de la novela gráfica de Kotaro Isaka.
¿Cine hondo, de grandes lecciones humanísticas que pasará a la historia del cine? No. ¿Y?

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Bueno he de decir que esta película sin ser buena me ha gustado. Logra su cometido de entretener a pesar de sus incoherencias, he disfrutado muchísimo de ver a Brad Pitt tan guapo y tan hábil. Desde luego cuentan con un buen reparto, la banda sonora me ha gustado también y los efectos especiales bastante chulos.
Sin intención de hacer spoiler, todo sucede en el tren como ya se adivinaba, salvo algún flash back y tal... pero dentro de sus tontadas la película es visualmente atractiva, tiene secuencias de acción con peleas muy logradas. Peca de los típicos clichés pero tiene también su poquito de humor así que para pasar un rato agradable sin buscar un gran argumento pues la recomiendo.

"Bullet Train" derrocha carisma por cada uno de sus planos, y no es para menos, teniendo a la dirección a una de las personas que ha creado uno de las películas más influyentes del cine de acción de los últimos años como "John Wick".

David Leitch nos trae una alocada fantasía de acción, llena de sangre y mucho humor, en la que no le basta una simple trama, si no que crea un buen entramado de giros de guión para mantenerte despierto durante sus dos horas de duración. Además, cuida al detalle cada uno de sus personajes para que ninguno pase desapercibido aunque su aparición sea de unos minutos en pantalla. Y como especialista en rodar escenas de acción, eso se nota, y es que le saca partido a todos los elementos que se encuentran a su disposición para dejarnos con la boca abierta secuencia a secuencia.

Una de las grandes películas de acción de este 2022 y ojalá una así cada año que venga a divertirnos.

La verdad, no me ha encantado. ¿Es entretenida? Si.
Muy "tarantinesca", tanto en el humor negro como en menor medida su violenta acción.
Tiene pasajes muy buenos y otros no tanto. Brad Pitt como siempre suele se habitual, en su línea, da a la cinta un muy buen peso, puro entretenimiento para pasar buen rato pero no fascina.
Repiten algunos chistes, y a la peli le sobran minutos, sobre todo al final.

Hubo un tiempo, cada vez más lejano, en el que estaban bastante de moda las películas del estilo de Bullet Train: comedias de acción (o películas de acción con tono de comedia) con personajes disparatados, que al mismo tiempo que ejercían o sufrían la violencia más exagerada, eran capaces de mantener diálogos absurdos sobre cualquier tema, cuanto más extravagante mejor.

El máximo exponente, de hecho se podría decir que el padre putativo, de este estilo era el Tarantino de antes de convertirse en un creído encantado de conocerse a si mismo. Somos muchos los que recordamos esos diálogos desopilantes entre tiroteo y tiroteo o antes de un duelo de katanas, tan delirantes como entretenidos. Después a Quentin le dio por creerse un autor respetable, pero esa es otra historia.

Esta es la historia de un montón de asesinos profesionales, con graves problemas mentales en su mayoría, encerrados en un tren bala, dedicándose a apuñalarse o a acribillarse a balazos mientras charlan sobre Thomas el Tren, el karma o la suerte que los acompaña. Ah, y una serpiente venenosa que va de vagón en vagón para complicar aún más las situaciones.

Es evidente que este tipo de pelis exigen la complicidad del espectador, pero una vez se la das es un entretenimiento, sostenido además en unos buenos intérpretes. Si aceptas jugar a su juego, te lo pasas bien casi todo el rato.

Porque el principal pero de la película es su excesiva duración. Más de dos horas es demasiado tiempo para una broma por muy buena que sea. Tal vez por eso, hay un momento en el que decae el ritmo y se siente la necesidad de que acabe ya. Otro pero sería lo tópico de ambientación y personajes, pero creo que eso se buscaba conscientemente por parte de los guionistas y del director.

En definitiva, una película entretenida, sencilla pero que , al contrario del 99% de las pelis de este palo que se hacen últimamente, no trata al espectador de imbécil. Ni intenta seguir ninguna agenda de las corrientes sociológicas actuales. Y ya sólo eso ya es un gran logro a estas tristes alturas...