Antes del anochecer cierra la trilogía de forma brillante, con ese punto agrio de los malos momentos en una relación de pareja.
Para mi es la mejor, deja el pastel de las primeras a un lado y muestra la madurez de una relación.

Certera en su forma de explicar como discuten personas que están enamoradas.

Lo mejor: La conversación del coche sobre los hijos y los primeros amores.
Lo peor: Que quieren hacer más pelis y cierra genial con esta tercera

Encuentro bonito, tierno y agradable cuando los miembros de una pareja se meten el uno con el otro, pero haciéndolo desde el cariño y la ironía, como una especie de batalla dialéctica y de ingenio que solo persigue la risa, nunca la ofensa. Atacarse, pero con la templanza de no traspasar la delicada e imperceptible línea del agravio, lo cual es todo un arte, al alcance de muy pocos privilegiados.

Más que las escenas de desnudez de la actriz, lo que realmente enciende la función es el provocador sarcasmo con el que ataca a su pareja. Esa furia es genuina, pasional, que lleve razón o no resulta ser lo de menos (pienso que llega un momento en el que, ante la saturación, a uno/a solo le apetece llamar la atención, desahogarse, provocar, salirse de la monotonía, aunque es un rol que le atribuyo más a la mujer). Además Delpy ofrece una gran interpretación, juguetona y traviesa. La química que tiene con Hawke es tal que uno podría pensar que son pareja en la vida real.

"Before Midnight" es una película espléndida, que sin embargo creo que no puedes disfrutar por completo si no has visto las dos anteriores. Esta trilogía ha sido la vida de dos personas. La primera trataba sobre el amor joven, sobre la ilusión, todo lo que quedaba por hacer. La segunda fue el reencuentro esperado, el anhelo de lo que pudo ser y de lo que debió ser. Pero esta es distinta. Con un amor ya consumado, Jesse y Céline se enfrentan a algo mucho más peligroso: la rutina, el paso del tiempo y los sueños que se quedan por cumplir. Ya no son aquellos veinteañeros que pasaron una noche en Viena, con toda la vida por delante. Es importante que para ver esta película conozcas cuales eran sus aspiraciones, sus formas de pensar, que conectes con ellos desde un principio para darte cuenta de lo que realmente te están contando. Quizás si es la única que ves creas estar viendo una simple pareja de cuarentones que no paran de discutir. Pero no es así. Es la evolución de una pareja, del amor, el mundo real que irrumpe en ese ideal amoroso que nos quieren vender en las películas románticas. No son películas fáciles de ver si no conectas con ellas desde el principio. El constante diálogo hace que a muchos se les hagan pesadas, y lo entiendo. Aún así creo que cada frase es una joya. Cada detalle, cada mirada, cada gesto...todo es perfecto. Es romanticismo puro.

Mención especial para Ethan Hawke y Julie Delpy, los cuales puedes llegar a creer que son pareja de verdad. La naturalidad con la que trabajan y sus aportaciones a los guiones son imprescindibles.

Gracias Richard Linklater por regalarnos esta historia de amor y este estupendo final. Aunque para mi no ha acabado todavía. Espero volver a ver a Jesse y Céline dentro de nueve años.

Antes del anochecer de Richard Linklater, es la tercera parte de lo que de momento es una gran trilogía digna de elogio. Está dirigida con un ritmo parejo a las anteriores, detalle que la convierte en espléndida, y además en esta ocasión, cuenta con alguna interpretación aparte de los protagonistas, y vuelve a dejar un final abierto para continuar la historia.
El guión, escrito esta vez no solo por el director sino también por los protagonistas, es el más real hasta el momento, usado inteligentemente para dar constancia de que los protagonistas no son ya, ni veinteañeros ni treintañeros, sino personas adultas con problemas reales y comunes.
Las actuaciones una vez más, con gran química, auténticas y creíbles en todo momento, como si fueran pareja de verdad y conectando con el público por varios motivos. Con diálogos cotidianos, espontáneos e incluso ingeniosos para arrancar alguna que otra risa por peleas de pareja.
Destacar también, una gran fotografía evocadora a Grecia y su Peloponeso, bella y luminosa para ser acompañada por una música en todo momento, que es tocada por Celine, al final de la segunda parte Antes del Atardecer, por lo que traerá recuerdos gratos a los espectadores.
Por lo que, sin duda, es de visión obligada para todos aquellos que quedaron cautivados por sus predecesoras. Ya que, aunque desde mi punto de vista le falta un hervor para llegar al nivel de las anteriores, sino manteniendo vigente la atmósfera y el estilo que tanto su director como los protagonistas se esmeran en todo momento por demostrar.

Delpy y Hawke siguen enredados en su particular duelo dialéctico, han madurado y la relación y el romanticismo han sufrido el castigo del tiempo.
La volatilidad del amor y la dificultad de la vida en común en cuanto supone de pérdida del "yo" están bien reflejadas, gracias a unos diálogos bien trabajados que constituyen el gran acierto de la cinta al mismo tiempo que también su talón de Aquiles, ya que el exceso de verbosidad ahogan la obra y le confiere una dimensión excesivamente teatral rayando la impostura en algunas secuencias.
Como anécdota, subrayar el título inaudito -¿quíen es el responsable de tal desaguisado?- con el que nos la presentan "Antes del anochecer" siendo el original "Before the midnight", es decir "antes de medianoche"; disparate mayor teniendo en cuenta que la anterior película de la serie era "Antes del atardecer" y siendo, como todo el mundo sabe, atardecer y anochecer sinónimos en castellano.Incomprensible.