Haz click aquí para copiar la URL

Los siete samurais

Aventuras. Drama Japón, Siglo XVI. Una aldea de campesinos indefensos es repetidamente atacada y saqueada por una banda de forajidos. Aconsejados por el anciano de la aldea, unos aldeanos acuden a la ciudad con el objetivo de contratar a un grupo de samuráis para protegerlos. A pesar de que el único salario es comida y techo, varios samuráis se van incorporando uno a uno al singular grupo que finalmente se dirige a la aldea. (FILMAFFINITY)
Críticas 223
Críticas ordenadas por utilidad
escribe tu crítica
9
10 de diciembre de 2008 4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Los Siete Samuráis fue la primera película de mi (corta) vida que vi en blanco y negro. Detrás de ésta han ido muchas, probablemente decenas, pero creo que no la olvidaré por eso, entre otras cosas. Pese a verla por decisión propia me asaltaron las dudas previas: ¿voy a ver una película en blanco y negro?¿Voy a estar tres horas y media viendo algo sin color?

Y así fue, necio de mí, que me pasé toda la película con la boca abierta, maravillado con algo monocromático en estas épocas del HD. ¿Quién me lo iba a decir? La verdad que todo es maravilloso en esta cinta de Kurosawa: personajes increibles, cercanos y profundos; ambiente cultural y costumbrista sorprendentemente bien representado; geniales batallas, y mensaje de sabiduría pura, a modo de siete preceptos del samurái.

Merece Kurosawa las gracias de cada uno que ve su película y aprecia su obra, por lo menos de mi parte gracias por crear algo atemporal, que consiga que seres "modernos" y de la época tecnicolor como yo y la mayoría de mi generación consiga romper prejuicios para deleitarse con una cinta que no aburre, al contrario, y que consigue ponerte en la piel de un ciudadano japonés de la edad media. (8,8 [9]/10)
8
20 de diciembre de 2010 4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
No resulta nada original, hablando de cine japonés, destacar el nombre de Kurosawa. Tampoco lo sería en literatura hablar de Cervantes o para el arte, Leonardo Da Vinci. Podemos carecer de mucha cultura sobre se país, pero muy raros son los aficionados cinéfilos del globo que no mueven sus labios con sonrisa de satisfacción al reconocer a este autor, una marca registrada.

Por supuesto, haciendo un cursillo de guiones dirigido por Eliseo Altunaga, la película escogida por la Filmoteca como exponente de cine oriental fue "Los siete samuráis". Más allás de recordar la anécdota archi-conocida de que inspiró, entre otros, al western, "Los Siete Magníficos", no podía imaginar exactamente qué convertía a esta obra en algo tan especial. Con un inicio claro y contundente, sabes perfectamente en qué clase de historia te has metido.

Esta trama es la de un simple cuento infantil, unos pobres campesinos oprimidos por unos malvados bandidos, hay que reclutar a unos paladines de la justicia. Sin embargo, un arquetipo mil veces hecho se torna interesante porque hay muchas aristas. Ni los samuráis son tan nobles, ni los campesinos tan justos, ni los lazos que los separan tan evidentes.

Absolutamente coral, la elección del reparto es atinadísima. Cierto es, que es una creación de su tiempo, sería muy difícil sentar al espectador de hoy día durante más de tres horas, probablemente ni la brillante caracterización psicológica de los personajes justificaría el lento inicio, una delicia por la manera de rodarse, pero que se termina convirtiendo en un lastre para el resto del viaje si uno la ve impaciente, requiere su tiempo.

Nimio detalle que no enmascara que hoy siga siendo una obligada referencia en los libros de cine.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
El gris queda latente con el personaje de Toshiro Mifune, el falso samurái, contra el técnico, el líder, el lugarteniente... El descubrimiento de que los labriegos robaron cruelmente el equipo de samuráis heridos, es imborrable, casi tanto como ese misterioso anciano que dirige todo y todo lo sabe desde su morada.

Destacar también un final maravilloso de la mano de un Takashi Shimura con un regalo de papel que aprovecha como nadie, el líder que arrastrar muchas honorables derrotas y es perfecamente consciente de que no ha ganado nada, salvo la simple sensación de haber obrado acorde a su conciencia y criterio. Los diálogos entre él y su brillante segundo son imborrables, así como las visuales imágenes del final.

Otro acierto es la sana tristeza que te invade por el romance entre el joven guerrero y la bella campesina.
10
15 de julio de 2012 4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un inciso antes de comenzar: Kubrick procedía de la fotografía antes de ser cineasta, y Kurosawa de la pintura. Pero lo que los igualaba verdaderamente era la obsesión por los detalles y el perfeccionismo de cada una de sus películas.

Aparte de esa comparación personal, Kurosawa gustaba decir que se sentía muy próximo a John Ford. Eso no es extraño si analizamos someramente esta película soberbia. Como a Ford, le gustaban los planos generales con profundidad de enfoque e introdujo la novedad de usar tres cámaras para la misma toma.

Como a Ford, le gustaba dar una dimensión épica a sus historias... y como a Ford, le gustaban las caracterizaciones fuertes de sus personajes, pero sin caer en el melodramatismo (con un uso muy cuidado de la música).

Y en fin, para asombro de todo Occidente, reinventa el "western" desde una óptica japonesa y situándolo en la Edad Media del país asiático. Y no sólo lo reinventa sino que hace copiarlo a Hollywood (Los siete magníficos o Grupo salvaje) e influye en directores como Coppola o Spielberg.

En fin, y como colofón, parece mentira que una película de casi tres horas y media, y en blanco y negro, y con más de cincuenta años de vida, logre mantener en todo momento el interés del espectador, del primer al último plano... y que haya incluso personajes (como la campesina secuestrada y ahora amante de los bandidos) que los describa con un par de pinceladas (planos) y con una gran carga dramática.

Aunque tengo que añadir otra cosa, tras leer algunas de las críticas de este espacio: las diferencias culturales entre japoneses del siglo XVI y las de los occidentales del siglo XIX, por ejemplo en el caso del western de John Sturges son tan obvias como diferentes han de ser el abordaje a través del guión.

Las actuaciones lastimeras (y casi cómicas para nuestra mentalidad occidental muy individualista) de los campesinos están tratadas de una forma muy naturalista (en definitiva realista), y no hablan para nada de un mal hacer del director, sino de todo lo contrario.

Los campesinos, en la mala época que se describe, eran gente desesperada, gregarizada, sumisa, caótica, sin un objetivo mínimo vital que sólo los samurais (pese a sus tan diferentes personalidades) serán capaces de dirigir hacia una meta única: la derrota de los bandidos, que será a su vez su salvación y redención (eso se exalta de forma magistral en los cánticos de los campesinos en la escena final).

Y al final también, los samurais serán redimidos a través de la muerte, de la abnegación y el sacrificio (no olvidemos que se trata de samurais de "clase baja", de "perdedores", como se diría en Norteamérica).

Todo ello pertenece al mundo ético de Kurosawa, deudor también en esto del gran John Ford.
10
7 de agosto de 2022 4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
No siempre es bueno para una cinta derramar a manos llenas tanta influencia temática en el mundo del celuloide. Es lo que ocurre con los samuráis de Kurosawa, especialmente con los magníficos de Sturges (1960). Comparaciones apresuradas restan méritos, a veces, a la obra maestra japonesa. Porque estamos sin duda ante una obra maestra.
Técnicamente impecable con una fotografía que hace de cualquier fotograma una auténtica lámina por su perfección. Nada que añadir a lo ya dicho en las críticas laudatorias sobre guion, realización, ambientación, interpretaciones y demás.
En nuestra reseña queremos ceñirnos exclusivamente al tema. En la larga edad media japonesa se impone, como en otros sitios, el feudalismo. En este caso los pueblos más apartados deben responsabilizarse de su propia defensa ante las agresiones de los bandoleros. Exactamente igual que ocurrió en las tierras de frontera de la extremadura hispana del medioevo y ocurrirá siglos después en el Oeste americano.
Pueblos agrarios y ganaderos centrados en explotar sus recursos que descuidan la defensa del territorio y quedan a merced de los bandidos. En este contexto se analiza la necesidad de disponer de fuerzas del orden que garanticen su defensa. El debate sobre la importancia de la milicia en las sociedades.
Pero también el carácter del campesinado, "tacaños, muy astutos, quejicas, malvados, estúpidos y asesinos". Calificativos muy gruesos puestos en la boca de un samurái hijo de labradores. Y egoístas y desconfiados añadimos nosotros, frente a la generosidad de estos señores de la guerra que se juegan la vida por la comida y el techo.
Película que destaca valores humanos como el honor, la valentía, el respeto al vencido, la amistad, el compañerismo, la comprensión, el trabajo en equipo, la importancia de la colectividad frente al individualismo y muchas otras virtudes más.
Una auténtica obra maestra, donde las tres horas largas del metraje se hacen cortas ante el drama social y humano que se representa.
Absolutamente recomendable para disfrutar con tranquilidad, con tiempo, sin mirar el reloj, sin buscar comparaciones.
10
24 de abril de 2024 4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
La mejor película de Akira Kurosawa y una de las mejores de la historia del cine japonés.

En este fabuloso retrato del Japón feudal, Kurosawa despliega todo su talento a través de una poderosa narrativa llena de acción y aventuras que consigue que el film jamás decaiga en su interés a lo largo de sus más de tres horas de duración.

Con una abrumadora puesta en escena, "Los Siete Samuráis" presenta secuencias inolvidables increíblemente filmadas, con los guerreros samuráis defendiendo una pobre aldea de campesinos, los caballos, la épica batalla final..... Es un auténtico prodigio el trabajo tanto de montaje como de planificación, con empleo de planos cortos, planos medios, planos generales, panorámicas espectaculares, expresivos zooms o travellings magistrales.

Kurosawa logra una obra de una belleza plástica difícil de igualar, una demostración de maestría absoluta a la hora de narrar y de transmitir emociones en una historia tan aparentemente simple pero profundamente compleja a la vez como es esta, colocando a los actores (entre ellos sus habituales Toshiro Mifune y Takashi Shimura) y objetos milimétricamente en el encuadre, haciendo gala de una precisión admirable en la hermosa composición de planos y escenas, situando la cámara siempre en el emplazamiento ideal para conseguir el mayor impacto emocional en el espectador.....

Sin duda nos encontramos ante una extraordinaria y tremendamente influyente obra maestra, una joya inmortal envuelta en melancolía en la que se abordan temas como la lucha de clases, el honor del guerrero, la unión ante el mal común, la injusticia, el valor, o el sentido de la vida y de la muerte.

John Sturges realizaría una fantástica adaptación de esta historia al género del western en la célebre "Los Siete Magníficos" (1960).
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para