Otro deshecho más del cine moderno que nos hace añorar aquellos maravillosos años donde no hacían falta niñas diabólicas para sentir miedo.
Es cierto que en la película original salían niñas que cantaban una canción pero ¿cuánto eran? ¿dos minutos? El poco miedo que daba la película era cuando salían las niñas y se hacía tan repetitivo que en vez de temblar, mirabas la hora para ver cuanto quedaba de aquel insufrible film.
Esta película no tiene NADA. Se han cargado a Freddy. Lo malo no es que cambien la historia, eso no tiene importancia, lo malo es la historia en si y esos pésimos actores que o hablan a susurros o pegan voces, parece que no han enseñado a hablar normal a esos niñatos.
Otra cosa que no soporto es las repeticiones de cosas que han tenido cierto éxito. Las niñas pequeñas, las canciones infantiles, escenas en el baño... ¿se les han acabado las ideas?
¿Y que es esa mariconada de Freddy que han puesto? Krugger es un hombre que es cómico pero da miedo y que te raja de arriba abajo, no te hace una estúpida rajita en el cuello y te dice que tu cerebro va a tardar 5 minutos en desconectarse y de deja con las ganas de ver esa mutilación, la ausencia de gore se hace notar. Desde aquí pido esos charcos de sangre de Tu madre se ha comido a mi perro. No voy al cine a ver una versión de Pesadilla en Elm Street para ver tres gotas de sangre contadas.