No es algo nuevo que Kubrick tome una novela y la filme a su gusto, esta vez acertó. El resplandor de King tiene mucho que envidiar al de Kubrick.

La película no se merece un diez, pero encuentro que Kubrick se lució en su rodaje. Las tomas dejan a cualquiera boquiabierto, la interpretación se salva gracias a un Jack Nicholson inspirado, que sabe transmitir una sensación de locura progresiva que muy pocos sabrían interpretar.

Me saca de quicio que unos cuantos buscadores de sustos fáciles digan que esta película no da miedo. Me parece que no están preparados para entender este tipo de terror, que no se basa en escenas morbosas y los sustos fáciles. Pero obviamente yo no les voy a negar a expresar sus ideas ya que yo no soy nadie para impedírselo. Pero me parece una falta de respeto al cine que puntúen la película con 1.
¿Comercial? Para nada. Kubrick lo que estaba buscando era el reto de dirigir una película de terror, ya que, según me han explicado, tras la frustración de no haber aceptado dirigir el exorcista se había quedado de dirigir una película de este género.