Aranoa vuelve con una película que habla de una situación común, nada extraordinaria, pero que te mantiene en el asiento gracias a sus personajes y a unos diálogos inteligentes. Con un toque de humor negro es capaz de mostrarnos las consecuencias realmente duras de la guerra.

El tratamiento de la imagen destaca justamente por pasar desapercibida. Una iluminación muy neutra y poco contrastada, que le da esa naturalidad a la historia.

Marte es una película de ciencia ficción con tintes de humor. Situada en un futuro no muy lejano, plantea una historia de supervivencia con unas bases muy realistas. Mark Watney debe intentar sobrevivir a su estancia en Marte hasta ser rescatado.

La cinta es entretenida y divertida. Además consigue que el espectador se preocupe por lo que le pasará al personaje y se interese por saber más. Sin embargo, y a pesar de su larga duración, la cinta se queda en una narración de sucesos superficial, sin profundizar en el personaje de Matt Damon ante la situación tan extrema en la que se encuentra (solo, al borde de la muerte, sin comunicación alguna).

Por otro lado, cabe destacar el retrato del planeta rojo que se hace en la película, con planos con gran dominante naranja y bastante contrastados. Un contraste que también está presente en los planos en el interior de la base de operaciones donde la fotografía se caracteriza por su clave baja, luz fría y suave.

En general, una película entretenida pero que no deja más huella en el espectador que la anécdota de ver a un botánico cultivando en Marte para sobrevivir.

Whiplash es una obra de arte de Damien Chazelle. Con una gran dirección y un interpretación sobresaliente de Miles Teller y J.K. Simmons, la película nos habla del esfuerzo por alcanzar nuestros sueños y sus límites desde un punto de vista que no deja a nadie indiferente. Guiada por una banda sonora increíble, el montaje impecable e impactante y una dirección de fotografía fantástica, la película cuenta con una gran personalidad. Cadaparte se complementa para crear un todo magnífico.

La película está tratada en clave baja y con una gran relación de contraste, lo cual ayuda mucho a la hora de plasmar en imagen el estado de ánimo del personaje y apoyar la situación tan dramáticas a las que se enfrenta.

Muy merecidas las tres estatuillas conseguidas y, a pesar de la advertencia realizada en la película, me permito decir "Good Job".

Blade Runner es una obra de ciencia ficción que plantea ciertas preguntas acerca del futuro y hace pensar al espectador.

Si hay algo que cabe remarcar es la fotografía. A lo largo de toda la película, predomina el uso de una iluminación en clave baja. Hay un clara predominancia de tonos azules, un color que evoca muy bien esa estética futurista que se busca en el film. Luces de neón y sombras duras, potencian esa atmósfera sobrecargada característica de la ciudad en la que se encuentra nuestro protagonista. Por otro lado, la abundancia de humo ayuda a generar luces muy volumétricas que siluetean muy bien a los personajes y que generan grandes contrastes a lo largo de la película.

Regresión es un thriller inspirado en hechos reales, que trata el tema del miedo enmarcándolo dentro del mundo de las sectas satánicas y sus rituales.

El guión de Amenábar se mueve entre lo policíaco, lo psicológico y lo satánico, en una película que va hinchándose como un globo, para al final pincharse en lugar de explotar.

El director lo hace muy bien para mantenernos atentos y alerta. Abre muchas puertas a lo largo de la narración, y genera esas ganas de saber tan innatas en el espectador que continuamente intenta responder a las preguntas en su cabeza. Genera un suspense que va in crescendo, y crea unas expectativas que se desdibujan en un final decepcionante.

Estéticamente se apoya de una fotografía con colores muy desaturados. El tono gris que domina a lo largo de la película contrasta muy bien con los puntos de luz cálida que aparecen en prácticamente todas las escenas y que, cabe destacar, la gran mayoría de ellos son objetos (lámparas, etc.) de la escenografía.
Del mismo modo, la luz también juego un papel importante para representar esa iconografía del bien (dios) y el mal (satán), haciendo uso de una luz más blanca y ambiental o más oscura y lúgubre.

En resumen, una película entretenida, que te mantiene pegado a la silla pero que decepciona con su conclusión.