Si la primera temporada fue buena, ésta, hasta ahora (tres episodios), es aún mejor. Muy buenas interpretaciones y un guión inteligente. A destacar esos primeros planos de los rostros de los personajes que no sonríen porque no pueden hacerlo.

Tengo que decir que me he interesado por esta serie porque me gusta mucho la estética que utiliza su creador, Johan Renck, en "Downloading Nancy". Y también tengo que decir que no decepciona.
Aún no he visto todos los capítulos pero puedo asegurar que es buena. Muy buena serie. Muy buenas interpretaciones. Buena música. Buena fotografía.
Recomendable.

No sé porqué pero siempre me han interesado los mendigos y la locura. Cuando veo a uno de esos "homeless" en la calle (los cuáles suelen tener esa extraña cualidad que me interesa) no puedo evitar mirarlos y a veces incluso me llego a parar a observarlos con detenimiento. En algunas ocasiones he compartido algunas palabras con alguno de ellos y siempre una sonrisa. Uno se pregunta de dónde vienen, por qué están donde están viviendo (o desviviendo) y dónde están sus familiares y amigos.
En esta película del genial Mike Leigh el protagonista es uno de esos personajes que por supuesto está más cerca de la locura que de la cordura a pesar de ser un tío inteligente con teorías acerca del mundo que te hacen reflexionar.
Muy bueno el David Thewlis aunque me quedo con Ewen Bremner. Siempre hace los mismos papeles pero es que le van como anillo al dedo. ¿Será yonki o esquizofrénico de verdad?

Descubrí a M. Night Shyamalan cuando se estrenó "El Sexto Sentido", película que me gustó (a pesar de que Bruce Willis no encaje en ese papel). Más tarde vi "El Protegido" y también me gustó, sobre todo porque cuando era pequeño me gustaban los comics de super-héroes. En cambio, nunca llegué a ver la siguiente película del director indio, "Señales" y entonces le perdí la pista. Eso sí, oí rumores acerca de que el realizador había perdido los papeles...

Hace unos días, no sé por qué, decidí ver "El Bosque" y lo hice dudando, no sabiendo muy bien lo que me iba a encontrar y la verdad es que acabé sorprendido. Es por ello por lo que sentí la necesidad de ver otra de las películas de Shyamalan, "The Happening" (el título que se le ha dado en España es bastante malo). Decir que la idea de la cinta es buena pero ya está. Eso sí, los actores... Joder con lo actores... El Marl Wahlberg y la tal Zooey Deschanel se merecen el Óscar y la Copa Volpi cada uno. Pero qué bien lo hacen, madre, si es que se comen la pantalla... Hasta la niña que casi no habla lo hace de puta madre. Y el Leguizamo, aquel Benny Blanco que se carga a Al Pacino al final de "Carlito´s Way", no podía ser menos. En cuanto a los diálogos, vaya con los diálogos... Brillantes, extraordinarios, muy originales y con un humor muy ácido y con una ironía finísima. Gracias, señor Shymalan, se lo agradezco de todo corazón. Lo único que siento en el alma es no haber podido ir al cine a ver su gran obra maestra y así haber podido contribuir a la causa con unos euros.

Supongo que para disfrutar de esta película uno tiene que haber probado alguna droga que otra o, mejor aún, tiene que amar esas sustancias, en general. Digo "para disfrutar" y no "para ver". Para lo segundo bastaría con ser seguidores de cualquiera de los dos protagonistas (magníficos ambos) o simplemente del director.
La cinta es un delirio, una alucinación, un pedo, colocón o puesto muy, muy gordo que hará gracia a los que como yo, amen las drogas (a pesar de haberlas aparcado en el garaje). Y es que, ¿qué sería del mundo sin la droga? ¿Sería el arte el mismo? Y con arte, lógicamente me refiero a arquitectura, escultura, pintura, literatura, cine y, sobre todo, música, además de otras expresiones artísticas. ¿Serían las relaciones humanas semejantes? ¿Las fiestas y los afters contendrían momentos extraordinarios e irrepetibles? ¿Nos diríamos la verdad unos a otros sin usarlas?
El caso es que las drogas forman parte del hombre, siempre lo han hecho, en cualquier cultura, en cualquier sociedad... Bendita droga... Si te gustan, no dejes de ver esta película. De lo contrario, échale un vistazo igualmente, por qué no. Ver a un irreconocible Johnny Depp haciendo el payaso por Las Vegas junto con un melenudo Benicio Del Toro merece la pena.
Viva la droga.