Me quedo con el título en francés, mucho más artístico que el soso "La clase". Ya puestos a traducir, se podía haber titulado "¡Cómo está el patio!".

Pero dejando a un lado las trivialidades, se trata de un film tremendamente interesante para todo aquel que sienta cierta curiosidad (por no decir preocupación) por la generación que sigue a la nuestra y por el sistema educativo en general. Cantet baja nuevamente a la arena (ya lo hizo en la notable "Recursos humanos" tocando un tema tan actual como los recortes de plantilla) y a través de este semidocumental nos deja introducirnos por todas las dependencias de un colegio para que, sin ser excesivamente explícito, decidamos si es preciso dar la voz de alarma.

Es cierto que estamos en Francia, que se centra en un suburbio y que los protagonistas, niños y niñas de entre 12 y 14 años estén probablemente en la peor edad posible para emitir una valoración objetiva, pero esto no es óbice que la peli sirva para repensar si las cosas se están haciendo bien o mal.

Y no es sólo un problema del alumnado (probablemente el menos culpable), como siempre, y no se descubre nada, la responsabilidad primera ha de recaer en padres, profesores y políticos.

Nuestra generación no vivió la inmigración y su (parece) inevitable consecuencia, la xenofobia y el racismo, pero es otro ingrediente o variable más a considerar. Francia nos lleva mucha ventaja y el director le da un papel relevante a lo largo del film.

Quizás, entre otras muchas cosas, esta peli nos muestra algo que ya todos sospechamos, que el respeto y la disciplina son valores en riesgo de desaparición, pero no olvidemos el probable drama social que viven cada uno de estos pequeños protagonistas (padres en paro, sin papeles...).

Soberbio trabajo del profesor y de toda la chavalería.