El argumento en si es bastante predecible y cada una de las tramas son bastante tópicas. Tampoco es que el trabajo actoral sea muy destacable, a veces incluso es forzado.

Pero los momentos emocionantes que dan los recuerdos en el camino y, sobre todo unas tomas y una fotografía ESPECTACULAR mantienen el interés en una serie de la que te olvidarás en cuanto termines de verla.

No es que sea fan de Elisa Benavent, solo he podido (atrevido) leer un par de sus libros, entre ellos este. El primero lo hice porque la road movie propuesta y las referencias musicales me atraían y bueno, aceptable, sin más. Y esta novela la he querido leer al ver que existía una serie basado en ella y estaba protagonizada por Anna Simón, la cual suele inmiscuirse en proyectos bastante interesantes.

Pues no. La novela está bastante plagada de clichés y es, en ocasiones pastelosa, pero, a pesar del sinsentido de la dualidad de su final, lo cierto es que la relación entre los dos protagonistas es divertida, ocurrente y tiene mucha química. Pues bien, si eso es lo que falla en esta adaptación, la falta de química de los dos protagonistas, un Álvaro Mel mustio y soso y una Anna Simón que no es capaz de remontarlo, ya me diréis que queda. Poco.

Ya no hablamos del difícil encaje y los saltos en la trama para intentar contener en 5 capítulos, algunos de apenas media hora, toda una novela de más de 600 páginas, o de lo frías que son las escenas íntimas, cuando son la pierda filosofal (como siempre exageradas, sobradamente explícitas y empalagosas) de la novela (y la literatura) de Benavent. Por desgracia, la serie, repite el error tramposo de la "resolución" de la trama. Ah, y no quiero dejarlo sin apenarme de que, si hubiera sido más valientes el director, Ingrid García Johnson no haya tenido la oportunidad de hacer un rol mucho más divertido y brillante. Y no será porque el libro no de oportunidades, porque el socarrón personaje de Candela es lo mejor del libro junto con la química del dúo protagonista.

Lo mejor: ese pedazo de "Always Love" de los Nada Surf que suena en ....

Partiendo del indudable talento de Amenabar como contador de historias, su fuerte, el guion, cojea de manera estrepitosa en esta producción. Y no solo eso, las actuaciones no son nada redondas, plana la de Mel y solo pasable la de Polvorosa. A todo ello no añade nada el pésimo doblaje, algo que no tendría que ser hándicap si (por dios, que estamos en 2022) se hubiera rodado en sus idiomas originales. Las escenas de los personajes de habla inglesa o de los españoles en tierras americanas carece de toda frescura con la 'traducción' al castellano. En fin, del ambiente de telefilm de sobremesa para tv solo lo libran algunas escenas llenas de recursos por donde parece que se ha ido todo el presupuesto.

Brillante descubrimiento el de un personaje tan talentoso como Larson a través de una película que entretiene y emociona a partes iguales. Es imposible dejar de lado el trágico final del protagonista mientras viajas por su mundo, sus frustraciones, sus amores, sus miedos. A pesar de ser un melómano empedernido, no soy muy fan del género musical en el cine, pero con este film he disfrutado con un musical como no lo hacía desde los tiempos de Once, salvando las distancias.

Corto documental que se adentra en el universo de el Bulli, como concepto más que como restaurante. No es una biografía al uso, ni del cocinero ni del negocio. Es algo más propio de Adriá y su particular atmósfera, impregnándolo todo de sueños, promesas, esperanza, anhelos, investigación, pasión y que, sin llegar a entenderlo de todo, como su cocina, como su conocimiento, lo importante es sentirlo.