Si buscan un animé que les invite a reflexionar sobre la condición humana con su entorno, además de plantear cuestiones de índole existencialista, este animé es el adecuado.

No tienen desperdicio los 24 episodios, un guión a mi creiterio muy bien trabajado y que sobre todo permite interiorizar, que es al menos lo que siempre busco en un animé.

Procuro no evaluar cuestiones técnicas y de animación, ya que no creo contar con el respaldo cultural suficiente para hacerlo, pero para mí en trabajos visuales de este tipo eso queda en segundo plano. Altamente recomendable, para adeptos y no adeptos.

Entretenida caricatura, pero le faltó despegar y abordar temas de los que simplemente nos proporcionaron una miserable salpicada que me parece insuficiente.
Los personajes por ratos jocosos, por ratos torpes, por ratos despistados. No sé si la recomendaría, sin duda el universo del animé es mucho más rico e interesante en los temas que Avatar pudo haber tocado.