No tiene melosería ni sentimentalismo barato; narra una historia cargada de la típica aversión entre tradición y libertad individual. Una afirmación de la realidad del "ser un hombre" que no se centra en la crianza y el machismo si no desde sus orígenes en la valentía y el coraje de aceptarse e ir contracorriente si es necesario.
Se sale de la típica historia gay implicando ciertos factores místicos que le dan un toque mas conmovedor y funcional, sin duda es un drama que ofrece un amor tan fuerte que sobrepasa los limites de la realidad.

Triste es terminar de leer un libro que te atrapo con su inverosímil pero intrigante historia y ver la película inspirada en tal. Carpenter por muchos conocido realiza su peor trabajo con Christine, es mas aparenta jamas haber tocado el libro; las diferencias entre las palabras y las imágenes sobrepasan los limites que se perdonan en tan difíciles adaptaciones ya que ni la caracterización de los personajes es respetada de forma alguna, siendo los de la película simplones y mas metalizados que el carro; escenas en el libro sangrientas y terroríficas se reemplazan por blandengues muertes que finalmente son el entero interés de este cutre filme basado en un interesante libro que abría su paso para algo mejor.