Cuando vi el primer capítulo de este nuevo producto llamado "Mentes criminales:conducta sospecha", debo admitir que le di una puntuación de 6 puntos, esperanzado por una creíble actuación del señor Whitaker y por una historia que sin salirse de los parámetros clásicos de su serie nodriza, al menos introducía unos personajes en los que se atisbaba algo de profundidad escondida, y una nueva manera de resolver los crímenes no tan "científica", sino más cercana, más intuitiva e incluso más creíble.
Pero esta idea me ha durado unos 4 o 5 capítulos en los que descorazonado, he ido viendo como la serie semana tras semana va repitiendo los mismo pasos, las mismas ideas, los mismos problemas personales y lo que es más grave, los mismos errores, que por lo que se ve, son errores que no se tiene intención de mejorar o eliminar.
Lo que en el primer capítulo me pareció una gran actuación de Whitaker, se ha convertido en una sucesión de muecas sobreactuadas. Gesticula, se agobia, grita, da patadas a las sillas, pone cara de atormentado, y todo eso sea el primer minuto o el último, haya caso o no lo haya, esté hablando con el asesino de turno o simplemente interrogando a una testigo de 60 años, simplemente es así, siempre.
Todos los compañeros tienen una terrible historia a sus espaldas, que les hace involucrarse en determinados casos. Al señor Ryan, le pasa con los casos donde hay niños sin padres, al señor Kelly, donde hay niños que han sido víctimas de abusos, a la señorita Garrett, simplemente en los casos donde algún tipo de sentimiento, y a su jeje Mr. Whitaker, lo dejamos por imposible, porque su problema debe ser el más gordo de todos, pero eso si, media temporada después no ha habido una explicación, un motivo, nada, simplemente es algo que está ahí y con lo que los pobres chicos tienen pelear a diario hasta para sacar fuerzas y levantarse de la cama.
Menos mal que al menos siempre nos quedará Penélope, que como la sufrida esposa de Ulises siempre está esperando y esperando, porque sabe que antes o después la llamarán, y entre sus manos y su tremenda "Bat-Computadora" hará que un grupo de datos y opiniones aparentemente sin relación, den un nombre y una dirección que acabe por resolver el caso.
-Penélope, busca madres solteras, de no más de 35 años, rubias, que hayan tenido problemas familiares en la infancia, que hayan quedado embarazadas jovenes y que después de intentar acabar con su vida, finalmente han tenido a su bebe y sobreviven como pueden en un trabajo cutre de 10 horas al día, o quizá 12.
-Pues chicos ya está, tengo 1 nombre!!
Así la rueda gira y gira, semana tras semana, capítulo tras capítulo, y yo seguiré viéndolos uno detrás de otro, con la esperanza de que una semana, sólo una, la serie me sorprenda y yo mismo pueda darle un voto negativo a esta dañina y reivindicativa crítica.

Al leer la temática de la película, te viene a la cabeza esa Brokeback Mountain, en la que dos vaqueros descubren su homosexualidad, a la vez que se dan cuenta de que la vida es algo más que las apariencias y los prejuicios.
En "Brotherhood" aparte de la temática evidente, se tocan muchos otros temas que lamentablemente están de actualidad. Uno de ellos y quizás el más duro, es ver la facilidad con que grupos extremistas, tanto de un lado político como del otro, consiguen adeptos con una facilidad impresionante, simplemente llenando ese hueco que cada joven tiene en su interior. Esa idea de la Hermandad, del grupo indestructible, con las ideas claras, el sentirte dentro de una comunidad que vela por ti a la vez que tu velas por ella, aunque en el fondo, y en la realidad, no pasen de ser grupos de fanáticos con mucha testosterona y poco cerebro.
Otro cuestión muy bien llevada es la constante contradicción que viven los protagonistas, los propios neonazis... Mientras una noche sales a golpear a un homosexual que se prostituye, a la mañana siguiente te levantas al lado de un compañero desnudo con el que has dormido abrazado. Mientras te dedicas a pegar a inmigrantes, a la vez tomas alimentos que son buenos para el medio ambiente... y así uno detrás de otro. La sociedad de las contradicciones.
En definitiva, una muy bien llevada película, quizás algo predecible en algunos momentos, pero cargada de fuerza. Una "Brokeback Mountain" a la europea, con neonazis en vez de duros cowboys de la profunda América, y con una historia que si no llega a ser de amor, si lo es al menos de dudas, de ilusiones y sobretodo de muchos miedos.