Pues el ondeo de la capa fue una de las cosas que defendía Juan Piquer Simón de su película ante "Superman" de Richard Donner, estrenada el año anterior. Eso y también que el personaje se transformase en superhéroe, eso de Clark Kent y Superman tan solo con unas gafas de diferencia no valía. Vamos a ponernos en contexto: Juan Piquer Simón ya ha estrenado "Viaje centro de la tierra" y tiene cierta repercusión en los circuitos de serie B. Le dicen que si se anima con superhéroes aprovechando el tirón de "Superman" y nace "Supersonic Man" que en principio iba a ser "Electric Man" pero según Piquer Simon, tenía nombre de electrodoméstico.

Supersonic Man baja a Nueva York desde Kronos, para salvar al ser humano de él mismo y de su codicia y afán de destrucción. Para ello ha de salvar a un científico secuestrado por un malvado villano que posee un robot muy peligroso. Si Clark Kent era tímido, Paul, la versión humana de Supersonic Man, es más bien calentito y le mete cuello a la hija del científico en más de una ocasión.

Le pone a todos los actores españoles, entre ellos el humorista Quique Camoiras, nombres anglosajones para darse más salida internacional. Coge a una musa del destape como Diana Polakov y se encarga él mismo hasta de los efectos especiales, que por raro que parezca, se llevaron a cabo en jornadas de trabajo maratonianas. Por la falta de presupuesto, había que inventar.

Y nace aquí primera película española de superhéroes, bizarra como ella sola. Llega en algunos momentos a recordar, aunque infinitamente más cutre, la estética de "Flash Gordon". Los efectos especiales, así como sus personajes, su trama, el robot, las maquetas, partes en el montaje a velocidad de 1,5, son risibles, pero entrañables, o la ambientación en Nueva York con imágenes de archivo y la mayoría de la película filmada en una base tecnológica de Telefónica. Hay que ver esta película partiendo del amor al cine de género que siente Juan Piquer Simón y como hace unos esfuerzos titánicos para sacar sus proyectos adelante, porque si no... solo decir que dura poco más de hora y vente pero se hace eterna.

Una película de la mítica American International Pictures que rentaba bien sus películas de bajo presupuesto y dirigida por el mago de la blaxploitation, películas donde los negros eran buenos y justos y os blancos malos y corruptos, Jack Hill. Curiosamente Jack Hill era blanco. La banda sonora también la firma la Motown por lo que es una película que buscaba precisamente un público de color.

En esta peli no solo cambia los roles típicos de razas que solía haber en las películas, sino que también en género aquí tenemos heroína y villana. Y la heroína es Foxy, un personaje con tanto carisma que años más tarde sería homenajeado por Tarantino.

La película nos muestra una venganza ejecutada por Foxy Brown contra los traficantes que le produjeron una gran pérdida y pra ejecutar esa venganza estará dispuesta a llegar hasta las últimas consecuencias. Para llegar a ella usará su mejor arma que es su sexualidad.

La película es una serie B en toda regla y algunas escenas de lucha resultas risibles, pero funciona muy bien y es un gustazo verla. Es una película que hay que ver.

Excelentemente ambientada y hecha con muy bajo presupuesto. La escribe dirije y edita Ti West, con lo que se ve que ha hecho exactamente lo que quería hacer y lo ha hecho muy bien. Me encantan lo créditos iniciales, que los acompaña de una música y uso de la cámara brillante. Y sigue el mismo tono de uso de la cámara absorbente durante toda la película que juega mucho con la inquietud, y no con lo que pase sino con lo que te temes que pase.

La película nos muestra a una estudiante universitaria en los años 80 que quiere conseguir dinero para abandonar la residencia universitaria donde no empatiza mucho con su compañera de cuarto. Para ello acepta un trabajo inicial de niñera que le llevará a una casa donde su excesiva curiosidad le llevará a situaciones inesperadas.

La película se recrea en detalles y cuando te viene toda la acción te da la sensación de que todo es un poco abrupto más que nada porque lo anterior ha sido lento, pero muy inquietante. Muy buena película.

Pues ya estirando, estirando y estirando la misma historia pues le intentan poner fin, pero dejando la camita preparada para que se acueste el nuevo invitado.

No voy a decir nada que no se haya dicho anteriormente, en esta me falta un poco más de metraje en los asesinatos, es muy light, posiblemente para evitar una clasificación según edades más restrictiva. Es una pena una película en la que los efectos especiales los firma el gran Tom Savini y que se sugiera más que se muestre.

Se deja ver bien, pero pega un bajoncito respecto a las anteriores.

Paul Schrader me ha gustado siempre más como guionista que como director, pero aquí la verdad es que ha hecho un buen trabajo. Está bien rodada y el uso que hace de la cámara muy interesante, plana y firme o temblosa según lo que te narra.

La película narra la vida de Bob Crane, famoso por la serie norteamericana de los años 60 "Los héroes de Hogan". Narra un paso por su vida que va desde un católico conservador hasta un depravado para aquella época.

Greg Kinnear y Willem Dafoe hacen muy buen trabajo y la película se pasa volando.