Tiene su mérito el realizar una cinta de terror, en eso no hay dudas. Y no tenemos por que esperar que no sea terror yanqui, sin embargo Balagueró nos sorprende con no sólo eso, sino que con una película llena de sabrosos cliches humorísticos, que sólo podrían estar presentes en parodias del cine de terror. El guión también es muy divertido, está llena de “personajes que entran solos al lugar donde están los malos”, como buscando la muerte… es un terror tan básico, que si los personajes no hicieran este tipo de cosas no pasaría nada durante toda la película.

Véanla, se reirán mucho, se las aconsejo.... me acuerdo y me río aún....

En primer lugar nunca he estado seguro si Leolo es un niño, o es un viejo que recuerda-inventa su infancia, en donde se incluye como “domador de versos”. Suponiendo que no es así, que Leolo es un niño (o lo fue hace poco), cave la pregunta… ¿qué es de él hoy?
Antes de dar respuesta, quiero mostrar mi disconformidad con la crítica general de esta película que habla de un niño que esta entre la locura y la miseria, que tiene dos hermanas dementes y un hermano halterofílico. Acaso soy el único que vio las escenas de “realidad” en la película, como en la que esta jugando con unas pistolas esperando el autobús con su familia. Una familia normal por lo demás. Una familia normal para un niño normal que odia a su padre y desea matarlo como todo niño normal,… que evade la realidad como todo niño-humano normal.
Lamentablemente hemos hecho crecer a Leolo, lo hemos educado, y ya no es un niño, ahora no sueña con matar a su abuelo, ser el sustento económico de su hermano. Ya en sus fantasías no le parecerá bizarro y llamativo masturbarse con la imagen de una chica con su abuelo, ni las ratas en su bañera. Hoy, luego de la muerte de su fantasía (¡ha crecido!), sueña con ir a la mejor universidad, conseguir un buen auto, dinero e infinitos etcéteras.
Entonces, ¿qué es de Leolo hoy? Nada, pues Leo-lo ya no está más, el “lo” se ha ido.

Mulholland Drive, está llena de detalles que la hacen simplemente...una joya.

Nuevamente Haneke nos angustia por tener una respuesta...
Estas pueden ser muchas...