Con un argumento que podría haber dado mucho más de sí, esta película no es más que una comedia romántica como tantas otras: sin nada especial, nada que atraiga y mucho menos nada que destacar. Una preciosa historia para quienes vivan en un cuento de hadas, pero nada del otro mundo si quieren ver una película que tenga un mínimo de credibilidad.
De todos modos, el hilo del film no resulta del todo aburrido, aunque pueda llegar a ser predecible.

Estamos ante la serie por excelencia, la cumbre de la caracterización con unos personajes que consiguen traspasar la pantalla y unas tramas que, desde luego, hacen que el espectador se enganche y forme parte de ellas.
Un guión fresco y original, que con el paso de los años sigue consiguiendo que disfrute frente al televisor sea cual sea el capítulo. Diez temporadas de comedia en su mejor versión, con un reparto increíble y una apreciación de la amistad que hace que cualquier persona que vea "Friends" se sienta identificado de alguna forma u otra en alguna escena.

Un gran cocktail de drama y sentimientos que hará involucrarse al espectador en la dura vida de la pequeña Liesel Mamminger, acompañándola en un camino lleno de obstáculos hasta su vida adulta.
Buena adaptación de la novela, aunque sin llegar a su nivel; Brian Percival realiza un buen trabajo con una gran materia prima. Quizá falte un plus de sutileza, de dejar las cosas caer e insinuar más. Siendo difícil conseguir esta sensación, es una película recomendable.

Noche de fin de año no es más que una promoción de un fin de año estadounidense idealizado, una oda a las películas comerciales en toda regla. Las tramas que encajan como un puzzle (que podría resolver un niño de tres años fácilmente) relatan como los protagonistas recomponen mágicamente las partes rotas de su corazón antes de que termine el año: menuda casualidad. Un "Love Actually" en su versión más vulgar, que quizás amenice una aburrida tarde de domingo.

Al principio puede parecer que estamos ante una serie realmente mala, una fusión de casualidades que hacen que nos preguntemos una y otra vez por qué a estas chicas se les ocurre salir de casa a altas horas de la noche para encontrarse con peligrosos desconocidos; pero lo cierto es que, según van pasando los capítulos, dan más y más ganas de saber qué pasará, de sacar tus propias conclusiones acerca de las incógnitas que se nos plantean y de ver qué será de nuestras queridas protagonistas.