Una película a la que le sobra ese envoltorio de juicio maniqueo y desde una mirada de superioridad clasista flagrante. Arruina el resto de la película que podría haber sido redonda. Tal vez si la directora no hubiera querido hacer tan patente su opinión versus prejuicios yo la hubiera votado con un 10. ¿Qué nos ha querido transmitir con esa pantomima de juicio del hijo contra los padres? ¿Que si son unos miserables refugiados que no tienen papeles no deben tener hijos porque no los pueden mantener ni educar? Ese alegato supremacista no me parece de recibo. Creo que ni la debieron nominar.