El único pecado de la cinta, quiza es ser demasiado larga, porque el resto es sensacional, Grandisima interpretación de Gary Oldman,varios momentos y fotogramas maravillosos a lo largo de la cinta, pero es verdad que la emoción decrece y parece que se diluye sobre el ecuador de la película, aunque al igual que su novena sinfonia, crece en los momentos finales para darle un acabado maravilloso y convertirla en algo más que una buena película, una cinta altamente recomendable, que cualquier amante de la musica clásica y del cine no se debe perder.

En primer lugar, creo que hay que centrarse en el género de la cinta, es una comedia y como tal, de ella se espera la risa y el entretenimiento, y no una calidad técnica, una corregida carga dramática o una estructura y realización impecable.

Una vez dicha la introducción, Creo que en el género de la comedia somos un referente, quiza no esa comedia intelectual francesa, pero si de esa comedia gamberra y adolescente que tantas carcajadas nos ha proporcionado. El triunfo de la comedia adolescente americana viene dado por su capacidad de marketing y promoción y no por su formato lleno de tópicos, muecas absurdas y ese gamberrismo tan formal que tienen.

Quiza por cultura nos salimos siempre de ese formalismo y esa correción, además de la multiplicidad de personajes que somos capaces de crear y de la abundante materia sobre la que tratar que existe en nuestro entorno. No nos tenemos que remitirnos al baile de fin de curso, al chico popular de la clase, al friki y a las tias "pivones" del instituto, ya que en nuestra sociedad es algo más compleja y tenemos más sutileza y grandeza que lo demostrado en esta película. Aun recuerdo comedias como La fiesta, Airbag o la primera de torrente.

Es el género más fácil que existe de crear, no necesita de buenos actores,ni buenos técnicos, solo necesita de buenas ideas que hagan reir a la gente y en eso somos los mejores.

El gran fallo de esta película es que se pierde imitando el cine americano adolescente y se olvida de la grandeza del nuestro en este ámbito.

Hay algo que no entiendo en esta franquicia. Puede ser uno de los juegos, sobretodo los 2 primeros, con una de las historias más imponentes, perturbadoras y claustrofobicas. Resultaba tan impactante que marcó un hito en la historia de los videojuegos, además de tenernos pegados al televisor, no solo entretenidos resolviendo puzles y sobreviviendo a los zombies y múltiples monstruos, sino atentos a que iba a ocurrir en la siguiente cinemática, con que personaje nos íbamos a cruzar, que giro o revelación no iba a hacer etc.

En resumen, es un juego lineal, cinemático y con un guión fácilmente adaptable. Ya si pasas de adaptar el juego, y te tomas las licencia de reinterpretar el mismo, al menos, conserva aquello enganchó a la gente, que era el suspense, la agonia, la claustrofobia de un "Survival horror" no la acción del call of duty.

Ahora bien, para ser objetivos, dejemos la licencia de RE a un lado, y hablemos de la serie. Como serie es estúpida, se permite muchas licencias de guión, muchos sin sentidos, a parte del rollo crepusculero. No empatizas con ningún personaje, carecen de fuerza y hasta caen mal, por los comportamientos absurdos y estúpidos que tienen, realizan actos, que hasta la persona más tonta del mundo los concebiría como absurdos.

De las dos lineas temporales en las que se mueve, no se sabe cual engancha menos.

Una pena lo de esta franquicia, a ver cuando hacen una adaptación de los videojuegos respetando las pautas de los Survival Horror y no la acción desenfrenada.

No conozco nada de la vida de camarón y eso me ha permitido ver la pelicula más como un reflejo artístico, que como una nota biográfica. Me abstengo de valorar la vera´cidad y rigurosidad de la historia, porque sencillamente la ignoro. Pero a pesar de ello, la película como tal, me parece maravillosa,el tiempo bien marcado,ciertos rasgos emotivos, gran interpretacion de Jaenada, tan solo un rasgo negativo, la interpretación de Verónica Sanchez y de algun otro secundario, que deja bastante que desear, y aunque no sea una gran obra o un título de referencia dentro del cine actual, es una película altamente recomendable.

Es una película poco convencional, pero excelente, simbólica y plenamente poética, no hay que buscarle un sentido a la historia, simplemente dejar surgir los sentimientos que evoca la misma.

Aunque no se caracterice por unos planos grandiosos, estos emiten una gran expresividad, y aderezados con una simple melodía a modo de banda sonora, continua a lo largo de la película hacen una combinacion hermosa, en la que los diálogos sobran permitiendole una interpretacion autoreflexiva al espectador.

En conclusión, una película enternecedora, donde la forma, es lo que cuenta, dejando el fondo, es decir , la historia en un segundo plano.