No lo puedo evitar. Me cabreo con las críticas que no comparto. Es, estoy seguro, una muestra de mi enorme intolerancia para con mis "semejantes". Aunque diré en mi favor que me molesta infintamente más una mala crítica a una obra para mí emocionante que una alabanza a algo que para mí sea un bodrio.
Y aquí me encuentro con el segundo caso. Vi esta cosa después de leer las críticas de filmaffinity. Como casi siempre, los internautas divididos. Pero como además de un vil intolerante, tengo alma de elitista, me dejeé seducir por los críticos profesionales; compréndanme: de las críticas de prensa que reúne filmaffinity, todas eran la hostia menos la de Carlos Boyero, y como Boyero es tan suyo...pues hala, a comprar Público.
Una interpretacion contenida es mejor que una gesticulante y con aspavientos, dicen. Sugerir es mejor que mostrar, dicen. Una sencillla mirada de reojo puede contarnos algo más intenso que una escena completa, dicen. Y claro, me imagino que eso es justo lo que hace orgasmearse a los rendidos admiradores de esta película: ¡cómo no cuenta nada de nada, lo tiene todo! Unos estudiantes hablan y andan por la escuela (70 minutos) y al final bum, bum, bum. Adiós.

Pues es verdad que no hay que hacer caso a las críticas, pero oigan, si alguno de los que le habeis cascado dos o tres estrellas a esta película ha pensado en hacerse crítico profesional, que primero ponga un anuncio en el periodico para avisar a la gente. O que antes de hacer una crítica de cine avise de que fué integrante del grupo "dosestrellasparafincher". Más que nada para que la gente no os tome en serio, nunca vayan a ver las películas que recomendeis y no se pierdan las que tireis al suelo.
¿Puede alguien que haya visto más de diez películas en su vida no emocionarse con esto? No me extrañaría que fueseis los mismos a los que les gustó Elephant. En todo caso, del mismo planeta que yo no puede ser quien no es capaz de emocionarse con el relojero del principio, con la cara que mezcla sorpresa, ilusión y tristeza al mismo tiempo (Benjamin: este sí es el mejor papel de Pitt), con la breve pero exquisita aparición de Tilda Swinton. No serán de este mundo los heteros que no quieran casarse con la Blanchett después de esta maravillosa y destinada a la eternidad "El Curioso Caso De Benjamin Button". A la eternidad, eso he dicho.
Con que Forrest Gump, ¿eh?

Los estadounidenses somos los angeles de la guarda del mundo, pero no podemos decirlo así porque no nos creerían. Tampoco montando películas como Rambo, porque ya no funcionan como antes (los espectadores también se hacen adultos). Mejor digamoslo así: Tenemos congresistas cocainómanos, sí, pero simpáticos. Millonarias de extrema derecha y fundamentalistas cristianas que se acuestan con quien les da la gana, sí, pero que tienen carácter, personalidad, atractivo e inteligencia. Ayudantes que entran a trabajar por estar buenas, pero que hacen un buen trabajo. Agentes de la CIA miserables y repugnantes, pero hábiles e interpretados por P:S. Hoffman. Las cosas importantes no las decide el pueblo ni el congreso, sino el congresista drogata, la puta cristiana y el pueblo yanki con sus impuestos. Ah, y los tiranos árabes, que se me olvidaba. Sí, sí y mil veces sí.
Pero ¿Estamos ocultando algo de todo esto en la película? En absoluto, lo mostramos a las claras. Y nosotros mismos nos escandalizamos, de hecho: ¿No habeis visto como se pone Tom cuando le niegan el millón para la escuelita? Y oigan, a ver si se les olvidan los bombardeos rusos, que hay mucho progre olvidadizo poe España. Aunque lo comprendemos, a nosotros también se nos ha olvidado hablar de Bin Laden en esta peli, para que vean.
En definitiva, seremos asquerosos, sí, pero necesarios, porque los rusos no veas. Y si no lo captan, recuerden la musiquilla de fondo, al principio y al final de la peli. Y las interpretaciones son buenas, la cinta es de casi siete. ¿A que sí?

...Pero me causa cierto resquemor no puntuarla con la nota máxima, porque sin duda lo merece.
Sinceramente, poco puedo añadir a las críticas de otros usuarios. Podríamos decirlo así: un poco de ingenio, dos duros, un guión de hierro, unos actores correctitos, una iluminación y una música adecuadas y ¡voilá! Obra maestra al canto.
Por cierto, en el spoiler voy a hablar del más insondable misterio relacionado con esta película; lo llamo "el misterio del siete y pico".