Ya hace unos días que termine de verme la primera temporada de Euphoria y ya apenas me acuerdo de ella. Debido a que esta tiene una trama débil y poca originalidad argumental.

La serie va de Rue, una joven de 17 años que vuelve de rehabilitación sin intención de mantenerse sobria, que conoce en una fiesta a Jules, una recién llegada a la ciudad. Los problemas personales de ambos hacen que entre éstas se origine una fuerte amistad y a partir de allí empiezan lo que serían los problemas juveniles.

Euphoria empieza con un primer capítulo bastante intenso, donde cualquier persona quedaría enganchada. Pero a medida que pasan los capítulos, el director, Sam Levinson, no ha sabido mantener bien a flote ese muy buen comienzo, y al final ha hecho de esta una serie poco convincente.

Dejando de lado la trama, esta tiene aspectos positivos como la buena elección de los personajes, los actores interpretativos como: Zendaya, Jacob Elordi, Hunter Schafer, Barbie Ferreira, entre muchos otros. Actores de primera, que, con su gran interpretación y magia, hacen de esta, más apetitosa.

Lo más destacable de Euphoria, a parte de la inmensa cantidad de desnudos, es su carácter audiovisual. Que con su música, efectos, perspectivas e iluminación, complementa una mezcla armónica y contrastada que en diversos momentos nos hace ponernos de lleno en la piel erizada de nuestros protagonistas.

En resumen, Euphoria se ha ganado el puesto de destacar como una de las series del momento, no por su trama, sino por sus diversas e innovadoras características, tanto audiovisualmente, como en su poco seguimiento de los tópicos de la sociedad moderna. Cosa que hace que, para nosotros, los amantes de la buena escritura, esta serie sea una de las mejores para comentar.