Es una película que me recuerda de alguna de las antiguas de espías que veía de niña, especialmente las de James Bond, con los trucos y aparatitos capaces de sacar de un buen apuro.

Tiene un guión ágil, gracioso y no aburre para nada, hace que uno tenga que poner toda su atención para no perder detalle, a pesar de que el tipo de relación de alumno-maestro que presenta es demasiado visto, eso no la desmerece para nada, aunque la última escena no fue del todo mi gusto

Hace tiempo que no veía escenas de acción tan buenas, escenas de luchas tan bien coreografiadas, sobre todo las realizadas por Gazelle y Harry, además de una gran edición y musicalizadas de forma espectacular (no me puedo quitar Free Bird y Money for nothing)

Colin Firth pasa la prueba y con creces. Honestamente nunca creí que fuera ser alguien solvente para este tipo de film, las que he visto de él no son de esta naturaleza, pero con su estampa y buen hacer es extraordinario, sorprendiéndome su talento para la acción. Samuel L. Jackson es gracioso, sobre todo la forma de hablar que tiene y su fobia, sin mencionar sus gustos tan especiales, hace un villano distinto a todos los demás e inolvidable. Veo futuro para Taron Egerton (claro, después de sacarme la imagen de Cristiano Ronaldo cuando lo vi por primera vez). Caine y Strong (es agradable verlo en el bando de los buenos), grandes secundarios.

Sin duda es una buena película y valió la pena pagar mi entrada para verla en pantalla grande en una de pocas veces que voy al cine