Los tres primeros capítulos crean una espectación que se difumina en los siguientes hasta terminar la primera temporada. La segunda es simplemente un apéndice del final de la historia demasiado largo y confuso.

Quien se consuele con la imagen y los efectos de sonidos es que tiene un cacao en la cabeza monumental.

Lo que más me ha gustado ha sido la fotografía. JaJA. Es un film hecho con inteligencia. No dejas de meterte en la piel del protagonista desde el principio. Un montón de giros inesperados causa y consecuencia del momento estelar de Tom. El protagonista oscila entre ser "un tipo duro" y un hombre sincero en busca de su segunda oportunidad. A lo mejor puede decirse que es un "Steven Segal" "undeground". Viggo hace que no sea tan inverosímil la historia.

Genial relato. La fotografía y la música hacen que, segundo tras segundo, estés más metido dentro de la historia. Hablan del amor, de los momentos, del contraste entre la manera de vivir fluyendo por el mundo de ella, y el resto del mundo (representado por la bolsa). Nada sobra, todo fluye. Vittoria hace que todo se vuelva puro y divino. Pura sencillez. Madre mía con Monica Vitti...