"Yo no tengo ni voz ni voto Gibbs, mi vida es la de un pirata". Efectivamente, así se nos ha presentado en esta nueva aventura, como una verdadera películas de piratas, fantasía, venganza, amor y como siempre una magnífica banda sonora.
Si amigos, Jack ha vuelto y no solo Jack, sino todo un digno reparto que hará las delicias de los más acérrimos a esta saga.
Para empezar, y no dejar un mal sabor de boca al final, comenzaré con los aspectos negativos que a mi parecer tiene esta película, porque si, también los hay, aunque no empañan los grandes y divertidos momentos que nos deja. La duración, le falta unos minutos mas de metraje, hacia el final se vuelve como muy apabullada, nos quieren resolver todo cuanto antes, que ya le toca el turno a los créditos. El argumento en si es bueno con una historia creíble que contar pero hay algunos huecos argumentales un tanto desconcertantes (lo aclaro en spoilers).
Respecto a lo mejor de esta cinta, destaco la gran interpretación de la nueva pareja formada por Brenton Thwaites y Kaya Scodelario, se complementan muy bien, Johnny vuelve a ser Jack, aunque esta vez un poco más borracho de lo habitual y por supuesto Javier Bardem en su papel como el Capitán Salazar con una presencia imponente, sin olvidar a un grandioso Geoffrey Rush como el Capitán Barbossa.
Gran trabajo también de Paul Cameron en la fotografía con paisajes espectaculares y originales movimientos de cámara como aspecto novedoso en la saga. Efectos especiales muy bien trabajados, sobre todo en la tripulación maldita de Salazar.
En definitiva, una divertida película que cumple con las expectativas de aquel que quiere pasar un buen rato con una aventura de piratas.
Nos vemos, "tengo una cita más allá de mi estimado horizonte".

Para los amantes de un argumento claro y sencillo donde la acción es la protagonista, explosiones por aquí, y movimientos de camara por allá, es vuestra pelicula.
A mi parecer Zack Snyder explota demasiado los limites de lo fantástico, convirtiendo la película en una carrera sin sentido hacia un final apoteósico que no consigue. Por momentos estas deseando que acabe la película para salir del cine y relajar la vista ante tal estruendo.
Efectos especiales, y más efectos especiales pero mal reconducidos e introducidos a presión con calzador.
Lo mas resaltable es la presencia de actores de la talla de Russell Crowe o de Kevin Costner con los que adquiere un cierto carisma la película.

Me dispuse a ver esta película habiendo visto anteriormente la versión americana de la misma. Pues bien, me esperaba una buena pelicula ya que su remake me gustó bastante pero mi idea se desvaneció al paso de los minutos.
En ningun momento asusta, ni impacta, ni te entran ganas de comerte las uñas. Para empezar la historia (la cual la dividen en capítulos) carece de un argumento entendible para el espectador poco avispado que puede quedarse igual al terminar la película como al empezar.
Los actores bastante planos en sus interpretaciones y la sensación de tensión y ahogo que deberia tener esta película no la tiene, al contrario que su remake que si logra ese escenario de inquietud.
Lo más reseñable es la banda sonora que acompaña a las escenas de terror las cuales consiguen mayor peso gracias a este factor.
Una película que recomendaría quizás hace 20 años, pero que no me logra entusiasmar como me disponía hacer como con tantas otras espléndidas obras del cine de terror japonés.

Es posible que la nota no concuerde con mi opinión pero soy incapaz de ponerle menos a esta película, aunque lo merezca, por lo gran fan que soy de la saga.
Ahora bien, esta quinta parte es inconcebible. Me tiré meses siguiendo el rodaje de la jungla de cristal 5 y esperando con entusiasmo su estreno para sentarme en el cine y disfrutar con mis palomitas viendo a John McClane y ¿Qué es lo que me encuentro?
Una rotunda decepción empezando por Bruce Willis por ponerse en manos de este director y sus camaras con tembleque en las manos, muchos cristales y explosiones y un argumento horrible.
¿A qué juegan padre e hijo? Unos comentarios que crean chispas entre ellos, un McClane desdibujado como si de un anciano se tratara, eso si, un anciano que por mucho que le golpeen, que se caiga y demás no tiene ni un rasguño. Se echan en falta luchas de cuerpo a cuerpo y no disparando a diestro y siniestro apuntando a la nada. Un escenario como Rusia, a mi parecer, impropio para la saga. Un guión que no tiene ni pies ni cabeza, cada frase es una puñalada a la película.
Han resquebrajado la esencia de La jungla de cristal, Jay Courtney demasiado plano en su personaje, y la idea de que cobre protagonismo el hijo de John es un retraso en la saga, John todavía le queda mucha madera que cortar acabando con los malos y estoy seguro de que puede él solito.
He podido ver las otras cuatro películas diez veces cada una y no me canso de verlas pero esta última dudo que la vea mas.
¡Vuelve John!