Se trata del metraje más famoso de John Waters en el que se dio a conocer a la drag queen Divine. La única aspiración de esta cinta es provocar por provocar. No hay más. La repercusión de la cinta se debe exclusivamente al morbo de ver guarradas, no por ninguna virtud ni técnica, ni de guion ni de actuación. ¿Consiguió (y aún consigue) asustar viejas, indignar a meapilas y conservadores y molestar a los más recalcitrantes defensores del buen gusto? Sí. Ese es el principal éxito de Pink Flamingos. Ahora bien, no se puede considerar a este subproducto basura como una película y de ahí mi puntuación.

Los aspectos técnicos son cutres a más no poder (por presupuesto y/o premeditadamente), la trama es un disparate que en realidad no importa nada para lo que se pretende y la "actuación" consiste en llevar a cabo una serie de guarradas. Los pedorros tratan de dar a esto un barniz de "cultura" a través de etiquetas como "cultura thrash" o, incluso, "contracultura". No obstante, la motivación es equiparable a la del adolescente niñato que buscar molestar a sus papás. Aquellos que consideren eso como cultura normalmente tienen cierto retraso madurativo. Si por cultura se engloba cualquier cosa, al final ese término pasa a ser un significante vacío sin ningún valor.

A esta cinta se le suelen asociar frases manidas del estilo "película de culto" o "la adoras o la odias". En realidad, la cuestión es bien sencilla: hay gente que siente gustillo al ver cerdadas y le va el morbo. Para los que les gusta ver guarradas, por supuesto adorarán Pink Flamingos y deben considerar "película de culto" aquellas en las que se muestran cerdadas. Yo ni la adoro ni la odio: sencillamente lo considero un '2 girls 1 cup' de aquella época y me llama la atención la necesidad de algunos en buscar excusas baratas para revestir una cosa así como cultura.

Describir las marranerías de la cinta es innecesario y solamente creará más morbo del que ya produce este subproducto audiovisual. Si quieres ver un metraje consistente en una sucesión de guarrerías porque te gusta ver guarrerías, adelante, Pink Flamingos es adecuada para ese fin. Ahora bien, si la cuestión es puntuar este despropósito como película, la puntuación es la menor posible porque claramente carece de los elementos mínimos que debe tener una película de verdad.