Genial, genial, genial...por donde se la mire (y cómo) es una obra infaltable para cualquier tipo de cinéfilo, más alla de que no te agrade Pink Floid.
El trabajo de Alan Parker, el arte grotesco de Gerald Scarfe y la música inflanqueable de Pink Floid convirten al film en una bomba atómica demoledora de cualquier matiz estético y social, subyugando cualquier límite y frontera...indescriptible, sin palabras ni críticas, me saco el sombrero delante de los martillos imparables y eternos.

Una de mis series favoritas de la infancia y el recuerdo, el antítesis de Disney, la discriminación total de afecto y violencia, las dosis exquisitas de agresividad y humor en las tardes junto a la TV, aguante la animación certificada!!

No soy alguien como para definir críticamente a una persona o, en este caso, una joya clásica del cine obligado, simplemente es una sincera opinión inexperta, que creo no lo es tanto, que la actriz protagonista de la historia encontró su santo grial en la misma, por algo sus posteriores trababjos no cobraron igual significación.
Lamentablemente, para mi genio, es una actriz más que quedó encarnizada por su personaje y que no podrá igualarse por más intento que haga.

Lo que más me llamó la atención del film es como ivan tomando protagonismo personajes que casi ni salían del segundo plano y se enriedan en la historia de la joven conjuntamente, además del hecho que todo sucede en "nuestro mundo", quiero decir, en nuestro plano de la realidad.
Me gustó bastante, para desahogarse un poco de la vida rutinario, en fín..

Realmente me costó darme cuenta de que se trataba de una película de ciencia-ficción, la realidad y crudeza que deja al descubierto me perturbó desde la primera vez que le heché un vistazo, genial, genial.
Lo demás, lo dejo a su criterio...