Este documental comienza hablando de una impresora, cuya pieza ha fallado, y se recomienda llevarla al servicio técnico. El chico visitó varias tiendas para ver si podían reparar la impresora; sin embargo, en las tres tiendas le dijeron que sería mejor comprar una nueva, ya que repararla resultaría más costoso. Incluso, en una de ellas, le cobraban únicamente por la revisión de la impresora. Este es un caso de obsolescencia programada, que constituye una estrategia para fomentar mayores ventas.
Después de eso, al tiempo, el hombre consiguió arreglar la impresora, debido a que se dio cuenta de que esta impresora llevaba un chip contador, es decir, los fabricantes meten en estas impresoras un chip contador, para que cuando ese contador llegue a una cierta cantidad de hojas impresas no deje imprimir más, para que así el cliente tenga la obligación de comprarse otra . El hombre quiso investigar sobre este chip y busco en redes sociales, y encontró una página web de procedencia rusa. En esta página había un programador que explicaba sobre dicha pieza. Este hombre se metió en un enlace que tenía que descargarse si quería programar otra vez ese chip, para que así el número de páginas imprimidas volviera a cero, y así no tenía que comprarse una impresora nueva.