Al igual que con cualquier tipo de música, si no elegimos el momento adecuado, una película puede provocarnos rechazo. Es por esto, que deberiamos prepararnos al menos con alguna pincelada, sin desvelar totalmente el argumento, para lo que vamos a ver.
Una vez hecho esto, podremos disfrutar de una historia de sufrimiento perfectamente contada, de la soledad de una heroína y, de algo que planea sobre la mente del espectador durante toda la cinta: ¿ podría yo reaccionar como ella?
Algún detractor de este tipo de películas, como la reciente "mar adentro", podría hacerse la siguiente reflexión: si el cine es entretenimiento y diversión, ¿ por qué sufrir con premeditación?. Creo que la respuesta está en nosotros mismos, en nuestra capacidad para analizar situaciones límites de la vida real y, en el propósito final del director, convertirnos en espectadores activos con la oportunidad de pensar.

No conocia a Jennifer Aniston en otro registro distinto del de la comedia, pero me ha sorpredido gratamente su papel en esta película. Es bastante creible. El director hace lo que quiere con el espectador, y como en todo buen thriller, uno no se da cuenta hasta el final. Muy buena

Hitchock hubiera firmado el resultado de esta cinta sin ningún escrúpulo. La recreación lenta, nunca aburrida, de pequeños detalles la convierten en una intrascendente maravilla. Precisamente el sinuoso vuelo de la cámara durante los momentos iniciales, hace creer al espectador que éstos serán el eje principal de la película. Nada mas erróneo y gratificante a la vez.
Por otra parte, la espera por ver aparecer a figuras consagradas como Hurt y Harris con una buena parte del tiempo ya consumido, remachan todavía mas la idea de que lo está gustando pueda todavía superarse.
Cuando alguien en el ecuador del film, no advierte la deriva de la trama, puede afirmar que estamos ante un buen thriller y, si además está bien realizado, se preguntará, por un momento:¿ seguirá vivo don Alfredo ?

¿ De donde a salido esta Rachel McAdams?. La vi por primera vez en "el diario de Noa" y, me sorprendió gratamente. En un papel totalmente distinto, desarrolla una interpretación muy interesante para una actriz poco conocida en España. Buen argumento, ritmo vibrante y máxima tensión aderezan este film típico de aviones.

Lo que hace que hacia la mitad de la cinta no nos parezca que esta historia ya la conocemos, ya nos la han contado otras veces, es la limpia y creíble inocencia de los jóvenes protagonistas. Pero, por aquel entonces, todavía no conocemos que la guinda está en el final. Sencillamente delicioso. Una verdadera historia de amor, que no deja lugar a la imaginación del espectador. Tiene un principio y un epílogo contado, con unos diálogos maravillosos, por los propios personajes. El inicio y el ocaso de un romance, como el comienzo y el final de la vida artística de los cuatro actores que representan esta historia.