Nos mantiene en vilo con las aventuras de estos adorables y entretenidos perritos. La malvada Cruella nos gusta a pesar de que es malvada. Unos malvados y estúpidos sicarios que no me gustan nada.

Se sabe lo que va a pasar en cada momento. Es aburrida, monótona y te hace sentir mal.

Una madre estúpida y un padre estúpido.

Alexander es un gafe que se cree que la vida es de rosa y que va lamiendo culos para conseguir algo.

La primera, 101 dálmatas, me dejó con un gran sabor de boca al terminar de verla y es que la esencia de este par de peliculas trata de eso, de meterte relleno al principio de la película y en los últimos quince minutos, deleitarte con la parte más interesante: el secuestro y el rescate. Cruella es un personaje que en esta película ya no daba para más y había derrochado todo su glamour en la primera. ¿Cuál es la diferencia entre primera y segunda?

Respecto al argumento no mucha. Pero es que la personalidad de Patch es aburrida y cansina, la de Relámpago el doble. Quizás el único que merecía la pena, era su compañero de rodaje porque ese si daba una trama interesante. Otra diferencia es que el relleno del principio de 101 dálmatas era entretenido y el de ésta, no. Por eso, esta pelicula me aburrió y la otra no.

Cruella es un personaje que me gusta bastante y en esta pelicula, se la han cargao.