Sé que los haters están ahí. Percibo su presencia. Sé que tienen miedo. Temen a Matrix 4. Temen el cambio. Yo no conozco el futuro. No he venido a deciros cómo acabará todo esto. Al contrario, he venido a deciros cómo va a comenzar. Voy a criticar Matrix Resurrections. Voy a enseñar a todos, lo que los haters no quieren que vean. Les enseñaré una crítica… sin haters. Una crítica sin prejuicios ni discriminación. Una crítica con todo el trasfondo, lo especial y profundo de Matrix 4. Lo que hagáis después es una decisión que dejo en vuestras manos.

Las claves de Matrix 4:
Lana Wachowski nos explica que las anteriores películas de Matrix son obras de culto. Las disecciona exponiendo sus claves; tenían el TIEMPO BALA, armas, muchas armas, un guion complejo, no solo acción sin sentido, criptofascismo, transpolítica, explotación capitalista, una metáfora de todo con mensajes subliminales pero explícitos.
Matrix 4 mantiene su factor universal exitoso, haciéndonos reflexionar sobre nuestra realidad y nuestra vida.
La nueva versión de Matrix funciona con la conexión de Neo y Trinity, el amor. Está basada en la esperanza y la desesperación, deseo y temor. Son códigos casi idénticos. Las máquinas están rompiendo récords de productividad.
“Es más sencillo enterrar la realidad que deshacerse de los sueños”
Es una crítica social explícita: Los humanos somos esclavos de la esperanza, tenemos proyectos de vida. Compramos lotería soñando ganar. Fantaseamos con historias de ficción. Estamos enganchados a los móviles. Vivimos en el desierto de lo real.
El espectador se identifica con Neo como metáfora de lo enganchados que estamos al sistema y cuánto nos tienen manipulados. Una crítica más profunda y explícita que en las anteriores películas.
Además es más dura, insinuando que nos tienen drogados, como a Neo con las pastillas azules. Y además le vigilan muy de cerca. ¿Estamos tan vigilados nosotros hoy en día? Yo no lo dudo.

Matrix 4 más allá:
A nivel argumental está todo justificado, incluso a nivel mitológico de Matrix. Aprovechan el pasado de Neo para justificar sus deja vus. De esta forma, igual que nos identificados con lo manipulado que está Neo, también sentimos nostalgia igual que él y ansiamos que recupere su memoria y revivir esas obras de culto, nosotros somos Neo.
Los homenajes están realizados de la mejor forma: integrados en la trama totalmente.

(Continuo en la zona spoiler)

Como conclusión:
A pesar de los recastings injustificados, la comedia desafortunada y una producción en general inferior a sus predecesoras obras de culto. Matrix 4 cumple con todas las reglas para conseguir que una secuela sea exitosa, respeta la mitología de la saga y su protagonista, vuelve a hacernos explotar el cerebro con crítica social, homenajea justificadamente y nos presenta un futuro brillante, que ojalá podamos ver más pronto que tarde.

Gracias Lana Wachowski.

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El misterio del dragón es la versión oriental de Piratas del Caribe. Con un poco más de comedia y muchas peleas de artes marciales.

La producción hace que sea audiovisualmente atractiva y contrasta con unos escuetos 50 millones de dólares de presupuesto. Cuenta con apariciones estelares de los actores Jackie Chan y Arnold Schwarzenegger, entre otros, quienes no son los protagonistas pero tienen sus escenas memorables que contentarán a los fans.

Realmente esta película es una secuela de Transilvania, el imperio prohibido. Pero al comienzo se nos hace un breve resumen para ponernos en situación, con ello se puede ver libremente esta película sin haber visto la anterior. El argumento es bastante sencillo además.

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Netflix nos ha traído una de las mejores películas de lo que llevamos de 2019. Una combinación de lo mejor de la acción táctica y el ritmo lento, crudeza y seriedad de películas como Sicario; con una historia inteligente, que abre debate sobre las decisiones de los protagonistas para que al final meditemos sobre ellas.

Bajo mi humilde opinión, han querido copiar un estilo que está muy de moda hoy en día, mostrando unos bellos planos aéreos largos, traspasando la frontera de los Estados Unidos de América, llevándonos a lo más profundo de las mafias latinas.
Hasta el mismísimo Rambo se enfrentará a un cártel mexicano en su próxima quinta entrega.

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El reinado de los Superhombres es una continuación directa de la película del año pasado titulada La muerte de Superman. Ambas películas en conjunto adaptan una de las mejores etapas de los comics de Superman, también conocida por el mismo nombre, donde Doomsday acaba con la vida de Superman, o eso nos quieren hacer pensar.

La muerte de Superman no me pareció muy buena por la importancia que le dieron a la relación de amor entre Lois y Clark, con un Superman desconocido y contada de manera muy torpe, pero sí me sorprendió la violencia mostrada por este famoso villano. Una película floja pero con grandes peleas. Cabe señalar que en la película Batman V Superman hicieron una interpretación de este enfrentamiento, quedando un tanto descafeinado para mi gusto en comparación con el original.


Los Superhombres
Superman ha muerto y se ha hecho notar durante poco tiempo, porque en tan solo seis meses, además del equipo restante de la Liga de la Justicia para defender el planeta, han aparecido cuatro humanoides que dicen ser el hombre de acero. Todos se dedican a luchar contra el crimen, pero en cada uno de ellos hay algo raro que nos hará dudar de ellos en cierta medida, sobre todo cuando comienzan a pelear entre sí para autoproclamarse como el Superman verdadero.

Lois Lane tiene el mayor peso argumental de la película, pero todo gira en torno a los cuatro Superhombres. Superboy, una versión joven de Superman que está más interesado en las chicas y la fama. Steel, literalmente es un híbrido entre Superman e Ironman con el martillo de Thor. Cyborg Superman, sí, se llama así, es quien más se parece al original pero con la pequeña pega de que físicamente tiene aspecto de cyborg al 90%. Erradicador, la versión más molona con gafas deportivas estilo futurista, que lanza rayos con las manos (como Ironman) y tiene sin duda la personalidad más oscura y sin escrúpulos de todos.


Misterio empequeñecido por la acción trepidante
Mis expectativas eran buenas y no me equivoqué, este segundo arco del cómic fue mi favorito cuando lo leí porque la trama era totalmente misteriosa, con un final sorprendente y grandes combates. No estamos ante una adaptación literal, pero toma los conceptos esenciales de la trama y añade otros más modernos, sustituyendo personajes desconocidos por unos más reconocibles por el público de hoy en día.

El misterio provocado por los cuatro Superhombres aquí prácticamente desaparece, todo sucede de forma muy ligera, tanto que no da tiempo a pensar qué está sucediendo, plantearse quién es el malo o la desaparición del cuerpo de Superman. La película es trepidante, tiene una duración de menos de una hora y media y no es tiempo suficiente. Pero su gran acierto siguen siendo el desarrollo del villano, su final y sus peleas.

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Revenger nos presenta una distópica isla, presumiblemente surcoreana, que fue abandonada por motivos que no se llegan a contar y ahora es utilizada para enviar allí a criminales convictos. No esperéis una trama profunda más allá que la frase que os acabo de escribir. En ella se encuentran presos de todo tipo, desde enfermos mentales hasta asesinos o violadores, toda ella regentada por un tal Kun, el villano de la cinta. Algo así como “1997: Rescate en Nueva York” pero en una isla, sin llegarle a la suela de los zapatos, por supuesto.

Nada más empezar, misteriosamente se teletransporta en la playa el personaje protagonista Yool, no esperes que te expliquen cómo ha llegado hasta allí, lo importante es conocer sus motivaciones personales para querer acabar con la vida de Kun y casi sin quererlo ¡Salvar a la isla de su malévola tiranía! Revenger no tiene diálogos deslumbrantes ni viene a revolucionar el género, sabe a lo que viene: hacer pasar un buen rato al espectador, metiendo muy peleas cada media hora, con algo de trasfondo argumental para que tenga un mínimo de sentido. Realmente cuando llegan dichos combates son muy gustosos de ver y presenciar sus desenlaces. Los personajes son carismáticos en su justa medida para que llegues a coger cariño a algunos y a odiar a los villanos, queriendo ver cómo Yool acaba con todos ellos.

Bruce Khan, el gran acierto de Netflix, es un especialista de artes marciales que ha trabajado en muy pocas películas y no es conocido, pero en Revenger se come la pantalla. Las mejores partes de la película son las cuatro escenas de acción protagonizadas por este actor. Es una gozada ver estas coreografías, maneja de forma excepcional diferentes armas, incluso llega a pelear sin brazos cuando es necesario. Los últimos treinta minutos de película son un no parar.

Otro aspecto que me ha gustado ha sido la banda sonora en bastantes momentos, muy buena para ser una película de este calibre. Por otra parte, es una pena que la película no esté doblada al castellano, pero realmente no es necesario ya que no hay muchos diálogos.

Revenger (2019) Una película palomitera con la sorpresa de Bruce Khan y sus magníficos combates.

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