Hay tantísimas críticas de esta película que no sé por dónde empezar. Me ha costado 3 años decidirme y por fin la he visto -2 veces seguidas. La 2ª disfruté bastante más del principio, pues es un film lleno de flashbacks absorventes e inteligentemente justificados. El director de Ciudad de Dios no ha superado la primera, pero se acerca y merece la pena seguir de cerca su futura trayectoria. Hay un par de secuencias que desde el primer fotograma ponen los pelos de punta, casi equiparables al disparo contra el niño-rata en Ciudad de Dios, que tanto revolvió las tripas del espectador.

Film lleno de intriga, romance, denuncia social y grandes interpretaciones -descubrimiento por mi parte de Rachel Weisz, que se llevó el Óscar a mejor actriz de reparto esta vez; y el siempre magnífico Ralph Fiennes, que me tiene enamorada desde La lista de Schindler.

En definitiva, fascinante recorrido y erudito final. Cabe destacar de nuevo la música de Alberto Iglesias, como siempre estremecedora.