Una trama llena de misterios, intriga y sorprendentes giros. Probablemente demasiados y es donde falla la película, ya que pierde verosimilitud con esas vueltas de tuercas que de una forma u otra van dejando más y más cabos sueltos. El giro final no llega a sorprender a un espectador atento que a partir de la hora de película se da cuenta de ello y ya conoce el final de la historia. Además, a partir de ese momento sólo se podrá sorprender por pequeños giros que restan importancia al principal.

Aún así, me parece una gran película, llena de buenas y grandes intenciones que merece la pena verla.

Me he dado cuenta de que muchas de las críticas sobre esta serie están realizadas los días posteriores a la emisión de los primeros capítulos. Supongo que serán personas osadas, cuyos prejuicios sobre series españolas anteriores son suficientes para realizar algo tan serio y con tanta responsabilidad como una crítica a una obra de este calibre sin importarles el trabajo y el esfuerzo de las personas que están detrás de ella. Ver un capítulo no significa que hayas visto la serie y para mí, esas críticas carecen de valor alguno.

Considero que en general es una buena serie (para mí, un notable alto) una historia que necesitaba ser contada y que a personas a las que nos gustan las pelis de robos nos ha hecho mucha ilusión disfrutar de una serie sobre este tema. Los giros en el plan del profesor, llegan a sorprender en algunos momentos y el capítulo final es extraordinario, quizás lo mejor de la serie y sin duda uno de los mejores capítulos finales de todas las series que he visto hasta ahora.

En la parte técnica, dirección, fotografía... para mí serían dignas de un sobresaliente. Aunque considero que sobran algunos capítulos (sobre todo en la primera temporada se podrían haber reducido, prescindiendo de escenas que poco aportan al robo, y evitando que el ritmo decaiga en determinados momentos). Igual no sería necesario reducir capítulos pero sí reducir la duración de los mismos ya que creo que esta serie funcionaría mejor en capítulos de 50 min.

Consigue meterte en el juego del protagonista, incluso hacerte cómplice de sus propósitos consiguiendo que el giro final te pille desprevenido y con poca capacidad de reacción más que alabar la película.

El reparto no puede ser mejor, destacando un sublime Javier Gutiérrez (en su línea). También inmensos, Antonio de la Torre y Adelfa Calvo por lo que aportan a sus personajes.