Se agradece a nivel personal que en este film al menos la relación de los personajes de Laura Dern y Sam Neill se hiciera más profunda, siempre había esa duda entre ellos y con el beso final, este asunto queda zanjado por fin.

El final me parece correcto. Si, como muchos ya han dicho, muy americanizado y todo eso, pero es lo que es, y lo que debería de ser. Si en el ejercicio de tus funciones y más cuando hay vidas que dependen de tí bebes y te drogas, debes de ser responsable y no harcelo, y si te pillan, tienes que asumir las consecuencias. El resto, la maniobra de la inversión y todo lo demás, está muy bien, pero el piloto no debe nunca de llevar un avión en esas condiciones.
Existe el momento posterior al accidente, en el cual el protagonista huye de todos sus vicios extremos, para posteriormente volver a caer en ellos y terminar la película como finaliza; quizá si se hubiera mantenido firme en abandonar todo el mal que le provocaba la bebida y las drogas, el final podría haber sido distinto, aunque eso sí, el argumento habría cambiado por completo.
Por otro lado, me da mucha pena el personaje de Kelly Reilly. Aunque ella actúa muy bien, pienso que al final el personaje no termina de cuajar en toda esa historia, es como un querer y no poder, y lo peor de todo es que desaparece dejando en la película ese cabo suelto y ese sabor amargo de que podría haber sido mucho importante en la vida del protagonista de lo que verdaderamente fue. Quizá era mejor haber prescindido de ella y así la película hubiera disminuido de duración, aumentado proporcionalmente su nota final.
Y Por último quiero hablar también de John Goodman, el cual pone algo de humor a la película pero no se, lo pone con la condición de frivolizar con el tema de las drogas y eso da que pensar. Tal y como se muestra, parece que si tú te pasas una noche emborrachándote hasta perder el control, lo mejor que puedes hacer al día siguiente es esnifar unas rayas de cocaína para ser una persona centrada. Este momento de la película puede resultar para muchos divertido, justo antes del juicio. De hecho se repite en la primera escena de la misma, pero honestamente, da la sensación de que esto es algo lógico, normal y no, no lo es, es peligroso.

Lo anteriormente dicho, nada que ver entre una y otra... Cuando en la primera era un diablo que quería el cuerpo de una monja para hacer de las suyas con ese final que me dejó un tanto sorprendido con el desenlace final de Sutherland, en esta es el fantasma de una chica que busca venganza a través de los espejos con los compañeros de trabajo que la drogaron, violaron y mataron el mismo día, dejando un final completamente absurdo.... Y es que amigos, si metes en la historia al par de policías, y si te muere el malo malísimo abduccido por el propio fantasma, ¿a quién culpas de todos los desaguisados que pasan?... Por mi parte eran prescindibles.