Entiendo porque esta película tiene relevancia, y no es por un buen motivo.

Su trama se apoya sobre las opciones que tiene un 1% de estadounidenses, en contraste con las condiciones tan precarias de un sistema de salud que -reconociendo mi ignorancia sobre Canadá- no se daría ni en el 1% de barrios más pobres de España. Por supuesto quien procura tales privilegios en la película queda casi como un héroe.

Compara los "privilegios" que deberían ser normales para todo el mundo -pero que solo son accesibles si eres muy rico en Estados Unidos-, con un sistema de salud, policíaco y político tan precario como corrupto como el pudiera tener cualquier país colonizado en las peores regiones del mundo, que aun no ha sido capaz de ser independiente. Sólo con tremendo sesgo consigue argumentar que el sistema privado estadounidense -que ni siquiera adorándolo consigue esconder que sólo es accesible para una minoría- gana por goleada.

No contento con eso, aprovecha para ridiculizar cualquier pensamiento izquierdista por su falta de una corriente de pensamiento única, universal, indiscutible, e imperecedera. Lo desprecia por su versatilidad y su capacidad de adaptación a nuevas visiones. No digo que estos atributos sean fantásticos pero, para no extenderme, sin duda pueden ser algo más que ridículos, y no se molesta ni siquiera en insinuarlo.

En definitiva, propaganda yankie contínua, transversal e inacabable; disfrazada con pedantería (de la cual me confieso adorador culpable, pero ni aún así consigue convencerme) para poder optar a premios de renombre del país referencia en premios cinematográficos.

Espero que al menos tal odio a cualquier visión no-individualista le pagara su jubilación, o al menos su repatriación. Si ni siquiera eso consiguió, ya puede reventar de vergüenza.

Countrymen intenta ser una comedia ligera con crítica social, pero no sabe encontrar su lugar. Alterna sin patrón entre un entorno al más puro estilo "slice of life", ligero y agradable, con un drama crudo - y no demasiado bien elaborado-.

Trata algunos temas serios con extrema ligereza con motivo de ser una comedia, y puedo comprar eso. Pero luego otros temas serios los expone con crudeza ¿Donde está la línea? Yo no la he sabido encontrar.

Además, reproduce estereotipos que promueven la perpetuación de prejuicios injustificados con la excusa de que bueno, es una comedia y es ficción. Incluso alguno siente la necesidad de justificarlo off the record.

En resumen, un intento mezcla de géneros que, a falta de encontrar la fórmula, acaba siendo una simple alternancia que da pasos erróneos cuya arbitrariedad puede mosquear. Pero no creo que sea mala fe, sino simple incompetencia.